Chapter 26: El lugar más peligroso es el lugar más seguro

Después de la cena, Xiao Shao sacó un mapa y lo extendió en el suelo.

—Aquí es donde estamos ahora —dijo, señalando un lugar en el mapa.

Xiao Yi miró el mapa y preguntó:

—¿Cuáles son tus planes?

Su pregunta era para Xiao Shao. Xiao Shao miró a los demás y dijo:

—No planeo volver al Imperio Shang por ahora.

Llevantando la vista, Xiao Yi miró a su hijo mayor y preguntó de nuevo:

—Entonces, ¿a dónde quieres ir?

Xiao Shao señaló el mapa otra vez y dijo:

—Aquí.

El resto de la familia Xiao y Xu Xiang miraron el mapa durante un rato, y luego se miraron entre sí. Xiao Han frunció el ceño y dijo:

—Hermano Mayor, ese lugar es la frontera del Imperio Bei Wei.

—Lo sé. Pero nuestra única opción es ir allí o morir —dijo Xiao Shao con calma.

Xu Xiang miró las caras preocupadas del resto de la familia Xiao y preguntó con curiosidad:

—Joven Maestro Xiao, ¿por qué fuiste allí? ¿No hay otro lugar al que ir?

Al oír su pregunta, Xiao Shao dijo:

—Si mi suposición es correcta, la Emperatriz Viuda debe haber sido encarcelada por el Emperador ahora. Sin la presión de la Emperatriz Viuda, el Emperador enviará asesinos para matarme, o a nosotros. Ir al Imperio Bei Wei, podemos evitar a los asesinos y tener suficiente tiempo para hacer un plan. Además, el lugar más peligroso es el más seguro.

Después de pensar en lo que acababa de decir, Xu Xiang no dijo nada más. A diferencia de Xiao Shao y Xu Xiang, que tenían rostros tranquilos, Xiao Jing parecía un poco ansiosa.

Ella miró a su hermano mayor y dijo:

—Hermano Mayor, aunque podemos escapar de la persecución del Emperador, ese lugar es peor que el páramo. ¿Cómo podemos sobrevivir allí con nuestras condiciones actuales?

Tan pronto como sus palabras terminaron, todos excepto Xu Xiang y Xiao Shao mostraron expresiones preocupadas. Con sus suministros y habilidades de vida, ella está segura de que pueden sobrevivir incluso en un lugar peor que el páramo. Pero saber este hecho y decirlo en voz alta son dos asuntos distintos.

Ella quería devolverles la gracia de salvarle la vida, pero nunca les diría su secreto. Dos vidas son suficientes para entender que el corazón humano es la cosa más peligrosa.

Después de un largo silencio, Xiao Shao guardó el mapa y dijo:

—Vamos a tomarlo un paso a la vez. Cuando lleguemos allí, encontraremos una manera. Nuestra prioridad ahora es llegar a la frontera del Imperio Bei Wei de manera segura.

Xiao Yi miró la expresión preocupada de su esposa y dijo:

—Da Lang tiene razón. Por ahora, no nos preocupemos demasiado.

Al escuchar las palabras de su esposo, Wen Wan asintió suavemente y dijo:

—Um, hagamos como dijo Da Lang.

Xiao Shao miró a los demás y dijo:

—Entonces yo haré guardia esta noche. Padre, madre y Xiao Jing pueden dormir en el trineo. Er Lang dormirá conmigo. Señorita Xu, usted también puede descansar temprano.

Después de terminar de hablar, los miembros de la familia Xiao se fueron a dormir, y Xu Xiang se metió en su carreta de mula. Dentro de la carreta, sacó cinco edredones de su propio espacio. Después de eso, salió de la carreta con los edredones en sus manos.

Al principio, no quería usar el edredón de su mundo original. Pero el edredón que compró en la Ciudad Bei Qiang era demasiado delgado para soportar el frío viento nocturno. Algunos están hechos de tela áspera, y otros de tela fina y resbaladiza. Si los edredones no son inútiles, es demasiado incómodo usarlos. Con un suspiro en su corazón, decidió usar el edredón de su mundo original.

Caminando hacia el trineo, le entregó tres edredones a la familia Xiao. Después de eso, caminó hacia Xiao Shao y le entregó los dos edredones restantes. Sosteniendo el edredón suave y cálido, Xiao Shao no sabía qué decir. Hasta donde él sabía, nunca había visto ese tipo de edredones, y no sabía de qué material estaban hechos.

Xu Xiang no sabía que la sospecha de Xiao Shao creció de nuevo y dijo:

—Voy a volver a dormir. Buenas noches, Joven Maestro Xiao.

Sosteniendo un edredón suave en su mano, Xiao Shao la miró y dijo:

—Buenas noches, Señorita Xu.

Después de desearle buenas noches, Xu Xiang regresó a su carreta de mula. Pero esta noche, en lugar de irse a dormir, bajó la cubierta y con un pensamiento, entró en su propio espacio.

Al segundo siguiente, cuando abrió los ojos, ya estaba de pie bajo un cielo brillante. La última vez que entró en su espacio fue el día que cruzó a este mundo. En ese tiempo, no tuvo tiempo de mirar alrededor. Después de eso, no tuvo la energía y el tiempo, y temporalmente olvidó su plan para revisar su espacio.

Esta noche, cuando escuchó las palabras de Xiao Shao después de la cena, de repente recordó la vasta tierra de cultivo en su propio espacio. El espacio antes de su muerte no tiene tierra de cultivo ni el lago, y no puede entrar en él. Solo esos animales y objetos pueden entrar. Pero ahora, no solo puede entrar ella, sino que también hay una tierra de cultivo y un lago muy vastos.

Xu Xiang miró alrededor y encontró la zona de la fábrica y el área de almacén. Mirando esos edificios, se dio cuenta por primera vez de que su espacio era realmente grande. Esos edificios altos se ven realmente diferentes cuando se ven con la mente y con los ojos. La primera es como ver un edificio en un juego desde una vista de pájaro, y la segunda es como ver un edificio en la realidad.

Con eso en mente, decidió usar su mente para trabajar en sus fábricas y tierras de cultivo a partir de ahora. Si tuviera que hacerlo manualmente, no sería capaz de terminar un día de trabajo en un año. Mirando hacia la vasta tierra de cultivo, pensó por unos segundos antes de revisar las semillas dentro de los almacenes con su mente.

Después de contar el número de tipos de semillas, Xu Xiang divide el campo en dos. Un lado se utiliza para la agricultura mientras que el otro lado se utiliza para la plantación de árboles. Después de dividir la tierra de cultivo, comenzó a preparar la tierra y luego a sembrar las semillas. Basándose en cuántas semillas tiene, también prepara campos y huertos con el mismo número.

Después de dividir la tierra, cada semilla se planta en una plantación de aproximadamente cincuenta mu a cien mu de acuerdo con su rareza e importancia. Pasó alrededor de tres horas plantando las extensas tierras de cultivo y huertos, antes de salir del espacio. Sentada dentro de la carreta de mula, se frotó el espacio entre las cejas cansada.

—Realmente es rápido trabajar con la mente, pero el dolor de cabeza es realmente molesto —murmuró para sí.

Sabiendo que su dolor de cabeza se debía al uso excesivo del poder mental, Xu Xiang bebió su agua del lago antes de quedarse dormida.

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