Pensamiento de Julia
El tiempo paso y pronto anocheció. El sonido de disparos y explosiones no paro en toda la noche. Las trasmisiones en vivo de las personas que querían probar suerte fueron poco a poco desapareciendo.
El miedo llego a arraigarse en todos los habitantes de la ciudad. Los canales de televisión seguían con estática por lo que no había noticias. No conseguimos procesar lo que estaba pasando. De pronto aparecieron monstruos, un sistema y habilidades. Todo parecía una especie de pesadilla.
Aún estoy preocupada por mi padre. ¿Estará bien?
Punto de vista - Leo
Abrí mis ojos una vez más. El familiar techo que vía todas las mañanas al despertar me indicaban que aún estaba en mi casa. Me dolía la cabeza y la espalda por lo que decidí mover mis brazos. Sin embargo, no pude, dos sensaciones de peso me impedían moverlos. Eran Melissa y Julia que dormían en mis brazos.
Lo último que recuerdo es que estaba a punto de entrar al cuarto cuando algo me golpeó la cabeza. Volteando la cabeza y buscando el objeto solo vi un posible sospechoso. Un bate de baseball que tenia guardado anteriormente en el armario. Mi mente empezó a imaginar los posibles escenarios llegando a una conclusión. Lo más probable es que Julia lo hizo pensando que era el enemigo.
Viendo a la tranquila y hermosa Julia recostada sobre mí me hizo pensar en el futuro. Lo normal sería que nuestros sentimientos se fueran fortaleciendo con el tiempo, terminaríamos la universidad, le propondría matrimonio y tuviéramos hijos. Pero ahora eso es prácticamente imposible. Las situaciones cambiaron, pero aun así tengo algo muy claro en mi mente no dejaría que nada le pase a ella y a Melissa.
En otro punto de la ciudad
Un portal se abrió en medio de la cárcel de ella salieron criaturas humanoides parecidas a perros que empezaron a acabar con los guardias de seguridad que intentaron contener el fenómeno.
Guarida 1: Señor no podemos aguantar más, las armas no funcionan y los presos han empezado a inquietarse.
Guardia 2: ¡Retirada!
Guardia 1: Señor ¿va a abandonar a los presos?
Guardia 2: Son la escoria de la sociedad no podemos permitir que salgan en este desastre.
Con esas palabras los guardias que solo estaban armados con batutas empezaron a abandonar el bloqueo que habían creado alrededor del patio, cerraron las puertas de hierro y abandonaron la cárcel. Sin embargo, no pudieron saber que habían realizado una acción que condenaría a miles de personas en el futuro.
¿?: jefe los guardias se han ido
Jefe de los presos: Salgamos de aquí, saco los materiales escondidos y ordena la distribución de las armas, tomaremos este lugar para nosotros.
¿?: ¡Si jefe!