—¿A dónde vamos después? —Nux preguntó mientras caminaba por el corredor con sus esposas, Melia y él.
—A la única persona que puede ayudarnos y ejecutar exitosamente nuestro plan —respondió Melia.
—Planeamos hacer que esas Bestias se enfrenten entre ellas mientras nosotros cosechamos las recompensas, ¿correcto? —Nux preguntó.
—Así es.
—Aquí estaremos lidiando con Bestias de 12 Estrellas, diablos, podríamos incluso enfrentar a una Bestia de 13 Estrellas si no tenemos cuidado… —Nux empezó a decir, preocupado.
—Alguien que puede ayudarnos en esta situación… ¿Quién es esa persona? —Nux preguntó.
—Ya la has conocido —Melia sonrió.
—… —Nux frunció el ceño.
El número de personas que había conocido aquí era escaso. De todas ellas, alguien lo suficientemente fuerte para manejar una Bestia de 12 Estrellas
De repente, la expresión de Nux cambió.
Al ver este cambio, Melia sonrió:
—Tu cara dice que sabes a quién vamos a ver.