Chapter 39: Listo para el duelo
Listo para el dueloDespués de esta semana por fin pude moverme con algo de libertad, iba a la habitación que nos dieron para descansar esperando encontrarme con mis hermanos y prepararme para el combate de hoy. Por el camino me encontré a Mykos, ciertamente era extraño verlo por aquí, desde nuestro duelo no lo vi ya que nunca se paseaba por esta área.
Cuando me vio se empezó a acercar a mi.
[Mykos]: "Oh, Hola kaiba al fin estás bien por lo que se ve, venia a ver como estabas en tu habitación y creía que aún no te habían dejado salir."
[Kaiba]: "Salí hace un rato, con el permiso de Ignar."
[Mykos]: "Por lo que veo sigues creciendo a un ritmo alarmante, parece mentira que tengas ¿cuantos meses eran, dos verdad?"
[Kaiba]: "Si tengo esa edad, tan raro es crecer tan rápido es decir, aunque no lo sepa el crecimiento normal yo también creo que esto es un poco exagerado."
[Mykos]: "Normalmente en alcanzar tu forma se suele tardar unos dos años en alcanzar tu crecimiento y ya es uno acelerado, también tengo el conocimiento de que algunos como tu lo intentaron pero tuvieron consecuencias bastante malas haciéndose más débiles de lo normal, pero tu rompes todo eso y tus hermanos también."
[Kaiba]: (Tendré que preguntarle luego al sistema pero me parece que la habilidad de la experiencia doble tiene algo que ver con esto, si no como dijo Mykos mis hermanos no hubieran podido seguir el ritmo de evolución.)
[Kaiba]: "La verdad no sabria responderte, yo también tengo muchas dudas al respecto quizás algun día pueda decir que soy realmente y para qué estoy aquí pero por ahora, me voy a centrar en entrenar y estar con mis hermanos nunca se sabe que puede pasar, ya tube una mala experiencia y no quiero que se repita"
[Mykos]: "No se que paso con tus padres y tal nunca me lo dijeron pero bueno cambiemos de tema, vine porque quería que antes de que te unieras a nosotros al entrenamiento como te dije antes de irte, me gustaría que conocieras a los demás ya que solo te conocen de vista más lo que contó nuestro padre."
[Kaiba]: "Oh, claro porque no se lo haré saber a mis hermanos también ya que dijiste que podían venir."
[Mykos]: "Si sin problema, pero te aviso de antemano, hay mucha competitividad entre nosotros y quizás no te traten del todo bien al inicio y cuidado con Ersas puede ser apegarse a alguien y hacer cosas horribles luego, también están un poco nerviosos desde la desaparición de la reina Zomryr nuestra madre."
[Kaiba]: "Ah ese es la dragona que Ignar menciono, no me dijo su nombre pero decía que alguien desapareció"
[Mykos]: "Simplemente no saques el tema allí, por lo demás simplemente muestra tu fuerza y estarás bien. "
[Kaiba]: "Me lo esperaba por tu actuación al inicio, pero mirate al final resultaste ser bastante amable."
[Mykos]: "Yo respeto a todo aquel que lo merezca, si simplemente otros dragones tuvieran tu resolución no tendría que actuar así además al inicio eras sospechoso, un dragón royal que viene de la nada los cuales sus padres no eran nada cercano a este tipo de sangre por sus características ."
[Kaiba]: "Ciertamente pero no soy adoptado ni nada hasta el punto que sé, quizás si lo encuentro pueda preguntar pero lo dudo."
[Mykos]: "Bueno hoy estarán por la zona de entrenamiento por si quieres ir."
[Kaiba]: "Antes tengo que solucionar el duelo con Ignar para que me deje salir del castillo."
[Mykos]: "!ERES IDIOTA!"
Mykos gritó de pronto cuando dije lo del duelo.
[Mykos]: "De verdad quieres pasarte otra temporada en la cama sin poder moverte, Ignar es unos de los dragones más poderosos de aquí, sin comentar del que tiene más experiencia en combate."
[Kaiba]: "Lo se pero tengo mis motivos, tu que harías de pudieras volver a alguien que te importa."
[Mykos]: "Quizás hiciera la misma estupidez, pero ¿a quién buscas?"
[Kaiba]: "A mi padre, tengo la certeza de que está cerca de este bosque, en cuanto a como lo se, bueno no sabría responder."
[Mykos]: "Vale mira, si consigues salir no victorioso pero más o menos ileso de ese combate te ayudare, a buscarlo. Ya sabes para la próxima que puedes preguntar para estas cosas ya te dije que te considero un rival digno y te di todo mi respeto, así que te ayudaré."
[Kaiba]: "Oh enserio, gracias Mykos, quizás cuando lo busquemos pueda saber qué fue lo que pasó con nuestra madre y con él ese día."
[Mykos]: "Te dejo, iré a verte en la arena supongo, aunque no se si estoy listo para ver tal paliza, buena suerte la necesitarás."
De pronto mykos se levantó sobre sus patas traseras y me dio un ¿abrazo?
[Kaiba]: "Eh?!"
[Mykos]: "Es solo un gesto de ánimo los humanos lo usaban para la gente por la cual sentían pena."
[Kaiba]: "Bueno gracias por los ánimos."
Después de eso Mykos se despidió y se fue. Retome mi camino inicial y hable un rato con mis hermanos, Moon asi me mata ella misma al oír todo lo del duelo y tal pero cuando mencione lo de nuestro padre, estaban ansiosos porque al menos tuviera una oportunidad.
Después de unas pequeñas prácticas que hice con mis hermanos para ponerme al día ya que mis músculos aún estaban un poco tensos por no haberlos ejercitado por un tiempo.
Llegó la hora de ir, todos fuimos a la arena que Ignar me designó y no voy a mentir me perdí y tuve que pedir ayuda al algun dragonborn del sitio para encontrar la sala, una vez allí fui hacia la arena y mis hermanos fueron a las gradas que había, allí pude ver a Mykos y otro dragon Royal que si no me equivoco era esa tal Ersas.
Al poco vi a Ignar entrar, y aquí estamos yo un dragón de unos tres metros de altura y 6 metros de largo contra una bestia que me triplicaba el tamaño, pero bueno que podía salir mal, realmente todo.
[Ignar]: "Algunas palabras antes de que te mande de vuelta."
[Kaiba]: ".."
[Ignar]. "Vale, entonces comencemos ya sabes las reglas."
Por suerte había poco público, y ya no tenía porqué esconder mi elemento que intente ocultar de una manera no muy eficiente tengo que decir, pero primero empezaré a tantear el terreno a ver cuanta diferencia hay.
Y aquí estamos ahora.
Por las fauces de Ignar pude ver como salía humo de ellas, tengo que decir que note una subida de temperatura en la habitación, una gigantesca bola de fuego se precipitaba hacia mi.
Rápidamente cree un muro de hielo delante mía para parar la gran bola de fuego que venía hacia mi, que ingenuo fui al esperar que esto la pararía, la diferencia en poder era demasiado alta para que me diera tiempo a formar un muro lo suficientemente fuerte para pararlo.
Puede que no lo parezca pero el tamaño de la bola de fuego se redujo, como último intento intente usar mi aliento de hielo para pararlo pero sin muchas esperanzas.
Active mi habilidad para aumentar mi velocidad, en el acto mi cuerpo se comprimió un poco, con este estallido de velocidad pude tomar un poco de distancia pero esta maldita cosa seguía siguiendome.
Mientras intentaba alejarme siguió maldiciendome internamente por aceptar este maldito desafío de Ignar, claramente me iba a pegar una paliza, yo un dragon con unos meses como podria derrotar a esa cosa.
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