—¡Déjenme ir, chicos! ¡Ella necesita mi ayuda!
—No se puede, muchacho —dijo Darius.
—Escúchanos, nieto. Tienes que tener algo de fe en sus habilidades —aconsejó Asmodeo.
—Es verdad, joven señor. Mis extensas lecturas muestran que la fe en la autonomía de tu pareja es integral para una relación saludable —afirmó Hakon.
—¿Desde cuándo lees cosas así, hermano? —preguntó Absalón.
—Lo que hago en mi tiempo libre es asunto mío y solo mío —respondió Hakon.
—Qué trío de hermanos tan extraño son ustedes tres rabisu... —comentó Hajun.
—¡Mónica necesita ayuda, suéltenme todos!
A pesar de las súplicas del príncipe más joven, ninguno de los generales lo soltó y en lugar de eso lo sujetaron más fuerte para que no saliera corriendo por la puerta para llegar hasta su 'prometida'.
—¿Un poco de ayuda aquí, por favor...? —preguntó Asmodeo con irritación.
Abadón terminó de limpiar la jalea de la boca de Courtney y de la de Mira antes de que finalmente mirara perezosamente al grupo.