Mientras que todos esperaban el resultado final de los exámenes, Lu Xiulan se fue de su asiento.
—Voy a ir a fumar un cigarrillo —le dijo a Yuan Jin. Yuan Jinmiró la espalda de Lu Xiulan retirarse, antes de negar con la cabeza. Lu Xiulan debería entrar en razón y lidiar con cualquiera que fuera el problema del cual intentaba escapar. La fulminante y envidiosa mirada de ella hacia Lu Xinyi y ShenYi fue algo que notó Yuan Jin.
Lu Xiulan era consciente de lo elocuentemente que la miraba Yuan Jin. Ella no necesitaba que él le recordaraqué hacer. Simplemente,la hacía sentir perdida no saber nada de ese hombre cada día que pasaba. Los pasos decididos que daba hacia la máquina expendedora, eran muy diferentes al lio que tenía en el corazón.