PROLOGO-HELGEN
ANTES DE COMENZAR QUIERO ACLARAR ALGUNOS PUNTOS DE ESTA HISTORIA
1-El continente de Tamriel no es igual que en la versión original, Skyrim es la provincia mas grande del continente, mientras que las otras provincias son independientes
2-Los Imperiales en esta historia son nórdicos también y sirven a la reina Elisif
3-Las ciudades y comarcas dentro de Skyrim son mas grandes que en el videojuego por lo que la mas chica de todas puede albergar a 15,000 personas
4-Fantasma no será encontrado en Westeros si no en Skyrim, por lo que habra un capitulo donde Jon encuentre a un cachorro de Huargo
5-Jon Snow en esta historia tiene 15 años, por lo que aun quedan 2 años para el inicio de los eventos vistos en Juego de tronos
6-Los dragones de Skyrim tienen la misma inteligencia que los de Canción de Hielo y Fuego a excepción de Alduin y Paarthurnax
7-Las Razas en Skyrim no existirán, serán solo humanos, pero se conocerán por diferentes nombres
8-Este apartado es mas una votación, así que quiero preguntarles ¿Quién será la pareja de Jon Snow?, aquí dejare las seis mujeres que pienso yo podrían ser una perfecta pareja para Jon, pero esa es su votación.
-Lydia La Guerrera-
-Aela La Cazadora-
-Ysolda La Comerciante-
-Brelyna Maryon-(Humana)
-Alys Karstark-
-Dayce Mormont-
VOTEN POR SU PREFERIDA PARA JON SNOW, AHORA SIN MAS QUE DECIR DISFRUTEN DEL CAPITULO
ESTA ES UNA HISTORIA DE FANTASIA UNIENDO EN UN CROSSOVER A UN VIDEOJUEGO, SERIE Y LIBRO EN UN SOLO MUNDO, ESPERO LES GUSTE COMO ADAPTO LA HISTORIA DE SKYRIM CON JON SNOW DE PORMEDIO. PERO E DE ACLARAR QUE NO TODO SERA FIEL COMO EN EL VIDEOJUEGO CAMBIARE VARIAS COSAS PERO SOLO SERAN EVENTOS Y ECENARIOS DE SKYRIM PARA QUE LA TRAMA ESTE MAS VIVA Y ENTRETENIDA. ASI QUE SIN MAS LOS DEJO CON EL PROLOGO.
MAPA DE TAMRIEL Y SUS ALREDEDORES

Desperté confundido mirando mi panorama sujeto de mis manos. Frente a mi un hombre pelirrubio ojos azules, su mirada era tranquila a pesar de estar en la misma situación que yo, a un lado de ese hombre un castaño ojos negros asustado a diferencia el hombre rubio y a mi lado un hombre pelirrubio oscuro, su boca tenia vendas y llevaba ropas finas. Me gire hacia el frente y vi como nos transportaban sobre una carreta quien sabe a donde, pero un mal presentimiento tenia sobre mi.
-Eh tu, al fin has despertado-escuche frente a mi al hombre pelirrubio quien me sonreía al parecer alegre de que yo estuviera bien-Intentabas cruzar la frontera ¿no?. Fuiste a caer en esa trampa imperial, como nosotros y ese ladrón de ahí-Me confundí al mencionar sobre la trampa, no recordaba mucho de lo que había pasado, pero sentía un fuerte dolor detrás de mi cabeza.
-Malditos capas de la tormenta, Skyrim estaba muy bien hasta que llegaron, El imperio era perfecto-Escuche hablar al hombre castaño, al parecer molesto ahora por la situación actual en la que estaba-Si no los buscaran podría haber robado ese caballo y ya estar a medio camino de paramo de martillo-Un recuerdo llego a mi mente, este hombre había intentado arrebatarme el caballo que ese amable señor me había regalado., Por culpa de el estaba en esta situación-¡Eh tu!. Tu y yo no deberíamos estar en esta situación. Es a esos capas de la tormenta a los que quiere el imperio-al escuchar lo que decía este hombre me moleste tanto que me levante de mi asiento dándole un golpe al rostro con todas mis fuerzas, provocando que los guardias de atrás me gritaran, mientras el ladrón tomaba su nariz rota
-¡Eh otro arrebato como ese y juro que te matare aquí mismo-grito el guardia a caballo apuntándome con una ballesta, no tuve otra opción que sentarme de nuevo mirando satisfecho al hombre castaño
-Bien hecho camarada, eso es lo que merece este granuja-dijo el pelirrubio mirándome con una sonrisa-¿Oye dime de dónde provienes?-ante la pregunta Jon respondió tranquilo.
-Westeros-ante esa relevación hasta el mismo hombre vendado de su boca se giro a mirar, al parecer interesado de donde provenía.
-¡De Westeros!. Si que estas lejos amigo mío-dijo el pelirrubio mirando hacia el frente donde ya podía verse una ciudad amurallada, un suspiro se escucha salir de el-Si tienes algún Dios al que rezar Westerosi, hazlo ahora eso ayudara a recordar el hogar-dijo el hombre cerrando sus ojos para rezar en silencio, mientras yo recordaba mi hogar y del que escape hace ya tiempo.
-Stendarr, Mara, Dibella, Kynareth, Divinos ayúdenme por favor-dijo el hombre castaño sujetándose su nariz mientras el temor volvía a el, Jon solo pudo suspirar mientras recordaba a sus hermanos y padre rezando a los antiguos dioses por su bienestar
Después de unos momentos de camino llegamos a esa ciudad amurallada, los guardias de la puerta abrieron para que las dos carretas con prisioneros entraran y pude ver lo majestuosa que era la ciudad, al parecer una capital o eso creía yo.
-Mira, El general Tulio-Me gire para mirar a un hombre de armadura elegante frente a tres sujetos con diferente aspecto a los residentes de este lugar, al parecer discutiendo algo-Y parecer que los Thalmór lo acompañan, malditos Altmer. Seguro que han tenido algo que ver con esto-dijo con molestia el Pelirrubio mirando con rencor a los sujetos.
Seguimos nuestro camino por la gran ciudad aun con mis pensamientos sobre esos hombres, parecía ser una diferente raza de hombres, pero no podría saberlo ya que no sabia donde me encontraba solo que estaba en un continente llamado Tamriel
-Esto es Helgen-Mi atención fue llamada por el Pelirrubio quien miraba con adoración la ciudad, al parecer con cierta melancolía-Solía llevarme bien con una chica de aquí. Me pregunto si Vlod aun hará esa aguamiel con frutos de enebro-Lo mire con cierta gracia, al parecer el hombre trataba de desviar sus pensamientos sobre la situación actual por la que pasaba, recordando viejos momentos divertidos en su vida. Eso era algo que el respetaba pues desviaba el miedo recordando viejos tiempos-...Es gracioso, de niño las torres y murallas del reino me hacían sentir a salvo-El Pelirrubio solo bajo su rostro y se quedo en silencio durante el camino.
-¿Quienes son ellos papa?. ¿A donde van?-escuche preguntar a un niño quien estaba en su casa junto a su padre el cual lo tomo del hombro para guiarlo a dentro.
-Tienes que ir dentro cachorrito-dijo el hombre en voz cariñosa tratando de no asustar a su hijo.
-¿Por que? quiero ver a los soldados-dijo el niño tratando de suplicar a su padre que lo dejara estar mas tiempo fuera de su casa.
-A la casa. Ahora-en un tono firme el padre logro que el niño entrara a la casa. Un acto que el podría entender pues al parecer el niño era aun muy pequeño para entender la gravedad de las cosas. Luego de unos minutos todos llegaron a una plaza central en donde varias personas estaba presentes junto con muchos guardias custodiando el orden de la zona.
Las carretas pararon y los guardias se asentaron a los lados de ella.
-Bajen ahora-ordeno uno de ellos quien tenia su arma lista por cualquier atentado que quisieran hacer ellos.
-Vamos no debemos hacer esperar a los Dioses-dijo el pelirrubio mientras se levantaba de su asiento.
-¡No esperen, no somos rebeldes!-grito el castaño tratando de excluirse de esta situación final.
-Oh vamos. Enfrenta tu muerto con algo de valor Ladrón-dijo el Rubio reprendiendo al ladrón quien seguía de revoltoso tratando de salir de su destino final.
-¡Tienes que decírselo, no estábamos contigo!. ¡Esto es un error!-Un soldado se dio cuenta del alboroto y se acerco a el castaño.
-¡A callar carroña!-dijo un soldado golpeando al castaño en su abdomen haciendo que se doblara por el dolor pero logrando que se mantuviera en silencio al fin
-Caminar hacia el tajo cuando escuchen sus nombres . Uno a Uno-dijo un hombre con una lista en sus manos, era pelirrojo y de ojos azules. Mientras al lado de el se encontraba una mujer con una armadura mas acorazada, al parecer siendo la líder de este pequeño ejercito de la ciudad, algo que sorprendió a Jon...Ya que no era común en su tierra que las mujeres lucharan o lideraran ejércitos
-A los de la capital les encantan sus malditas listas-Me susurro el pelirrubio mientras el hombre empezaba a tomar lista, haciendo que uno a uno pasara al frente, hasta llegar a ellos los cuales estábamos casi al final.
-Ulfric Capa de la Tormenta, Jarl de Ventalia-dijo el pelirrojo captando mi atención centrándome en ese tal Ulfric, al parecer era alguien muy importante sobre estas tierras.
-Fue un honor estar a su lado Jarl Ulfric-dijo el Pelirrubio, al parecer el era un soldado de ese hombre y seguidor fiel.
-Ralof de Cause Boscoso-Mire como el Pelirrubio avanzaba hacia el frente, así que ese era su nombre. Mire como Ralof le dedicaba una mirada de muerte al Pelirrojo, al parecer ellos dos ya se conocían de hace tiempo.
-Lokir de paraje de Rorik-Luego vi al castaño, su mirada se apago unos momentos pero note cierta tensión en el...luego al fin exploto
-¡¡NO, NO PUEDES HACER ESTO!!-Lokir corrió lo mas rápido que pudo entre la multitud tratando de escapar de los guardias-¡No me van a matar!-Grito Lokir, pero un arquero desde una torre disparo y perforo su cabeza logrando dejar muerto al ladrón que callo al suelo frente a la multitud quien no reacción ante su muerte, al parecer era una persona odiada entre la multitud. Después de esa escena, por fin siguieron con las listas y era mi turno.
-Eh tu un paso al frente-El pelirrojo me llamo di un gran suspiro para dar un paso al frente y estar frente a las personas que pronto me sentenciarían a muerte-¿Quien eres y de donde vienes?-ante la pregunta no me sorprendí, pues nadie conocía mi nombre y era algo lógico pues estaba inconsciente a lo mejor cuando estaban tomando nombres a todos los prisioneros...Jon maldecía su suerte, pero tal vez si decia de donde provenía podrían perdonarlo
-Mi nombre es Jon Snow, provengo de Westeros-Respondió Jon sorprendiendo a las dos personas frente a el. El pelirrojo anoto el nombre en su lista.
-Estas lejos de casa eh Westerosi en algún ¿viaje personal?-Pregunto el Pelirrojo
-Si...Mi camino se cruzo con ellos tras ser golpeado en la cabeza-Respondió Jon mientras el pelirrojo lo miraba atentamente, luego se giro para preguntar a su capitán que hacer
-¿Capitán que hacemos con el. Este no esta en la lista-dijo el Pelirrojo mirando a su superior quien lo pensó unos momentos.
-Hay que ejecutar a todos los que estén en los carros. Ordenes del General-Jon suspiro, mientras el pelirrojo arrugaba su rostro
-A tus ordenes capitán-dijo el pelirrojo volviendo a mirar a Jon-Lo siento. Nos aseguraremos de enviar tus restos a Westeros-dijo el pelirrojo tratando de aliviar a Jon quien no pudo negar que seria algo gratificante saber que por lo menos terminaría enterrado en su tierra natal-Sigue al capitán-Ante la indicación, mire como la capitán de esta guardia me guiaba a una piedra donde ya había comenzado a ejecutar a los prisioneros. Me colocaron a un lado de Ralof el cual estaba serio mirando como cargaban los cuerpos de sus camaradas en una carreta para enviarlos a enterrar cerca de un cementerio hasta que se dio cuenta de que Jon estaba a un lado de el.
-Oh mi amigo de viaje. Es bueno saber que estoy en buena compañía en este final-dijo Ralof provocando la sonrisa de Jon pues no esperaba que aun el hombre estuviera tan entusiasta por su muerte-Oye dime tu nombre, no pude escucharlo por estar tan lejos-pregunto Ralof s
-Jon, Jon Snow-Respondió Jon provocando la mirada confusa de Ralof.
-Nieve...vamos chico no me digas que ese es tu verdadero apellido-pregunto Ralof y Jon asintió ante la sorpresa del nórdico-Juraría que pensé que me estabas jugando una broma...pero quien soy yo para juzgar los nombres de los demás. Mi nombre es Ralof pero eso es algo que ya sabias verdad jajajajaja-rio Ralof provocando que un guardia le golpeara la costilla haciendo que se callara de momento-Estúpido-susurro Ralof con molestia.
-Estas bien-pregunto Jon ayudando a levantar al nórdico quien agradeció con un gesto a Jon.
-Si no te preocupes, e estado en peores situación, recuerdo cuando estuve al borde de la muerte tras enfrentarme al oso mas grande que jamás hubiera visto, era negro y de ojos rojos como la sangre...daba miedo y creo que me cague en mis pantalones lo juro por mi honor-empezó Ralof a relatarle la historia de como había matado a ese enorme oso y Jon solo escuchaba atento con gracia la historia fantástica de Ralof. Pero todo momento de tranquilidad tuvo que finalizar cuando todos escucharon al general discutir con Ulfric.
-Ulfric capa de la tormenta. Algunos aquí en Helgen te consideran un héroe. Pero un héroe no usa un poder como la voz para matar a su rey y usurpar el trono-al escuchar el relato del general, Jon entendió el porque ese hombre estaba tan bien custodiado, pero no entendía eso de matar con la voz, acaso seria que el incito que mataran al Rey de estas tierras o algo parecido. A Ulfric se le escucho gruñir al parecer molesto por el relato del general sobre la muerte del Rey-¡Tu comenzaste esta guerra, sumiste a Skyrim en el caos y ahora el reino quiere tu cabeza para restaurar la paz!-pero ante el discurso del general un poderoso rugido se escucho a la lejanía llamando la atención de todos en la plaza principal.
-¿Que fue eso?-fueron las preguntas de muchas personas en la plaza quienes estaban confundidas por el repentino ruido que se escucho. Un mal presentimiento llego a las entrañas de Jon quien sentía que algo muy malo empezaría pronto.
-Señoras y señores no es nada, continuemos con la sentencia-dijo el General calmando a la multitud de gente que había sobre la plaza. La capitana de la guardia camino hacia el frente y empezó a mirar a todos los presentes para seguir con las decapitaciones.
-Tu el Westerosi-la capitana lo había llamado y Jon camino sin miedo a la piedra de sacrificio, empezó a pensar en todo su vida, incluso varias preguntas empezaron a surgir en su mente mientras la capitana lo colocaba en la piedra. Pero una pregunta y la mas importante surgió en su mente. ¿Su familia lo recordaría?...¿Habría alguien que llorara su muerte?...¿Sabrían a cazo que el murió?, Jon miro como el verdugo comenzaba a preparar su hacha...¿Tenia arrepentimientos?...Si uno...Su hermanita a Jon le dolía saber que la dejaría sola, sabría que al enterarse de su muerte caería en una fuerte depresión ...Por lo que mirando al cielo rezo a los dioses antiguos en busca de protección para su hermana
El verdugo levanto el hacha mientras Jon cerraba los ojos y colocaba mas codo sobre la piedra...Pero luego el rugido se escucho nuevamente, la plaza se comenzó a alborotar y Jon se pregunto por que...Pero de pronto una fuerte ráfaga de viento movió a todo mundo, Jon abrió los ojos y vio impactado a un maldito dragón
-¡¡POR OBLIVION ¿QUE ES ESO?!!-La gente de la multitud comenzó a apuntar hacia el dragón. El miedo comenzó a apoderarse de todos y el dragón con un potente rugido empujo a todos los guardias sobre la piedra de ejecución. Una tormenta comenzó a presentarse y de ella bolas de fuego comenzaron a incendiar toda la ciudad. El Dragón comenzó a volar nuevamente y con su potente aliento empezó a quemar toda la ciudad. La gente corrió despavorida tratando de salvarse del Dragón y Jon termino en el suelo aun atado de manos. Por suerte para el, Ralof llego en su rescate.
-¡Oye Westerosi levántate, tenemos que salir de aquí, los dioses nos han dado otra oportunidad!-grito Ralof levantándole y ayudándole a correr a una torre cercana donde podrían refugiarse de las bolas de fuego que caían del cielo. Dentro de la torre Ulfric era liberado por varios soldados suyos que habían logrado escapar
-Jarl Ulfric, ¿Que es eso? ¿Acaso son ciertas las leyendas?-pregunto un soldado capa de la tormenta a su líder quien estaba sobando sus muñecas por el dolor que debía sentir por las fuertes ataduras que tenia.
-Las leyendas no queman ciudades-Ulfric miro a todos sus hombres que había logrado sobrevivir-¡Debemos marcharnos ya!-Ordeno Ulfric para que todos comenzaran a subir a la torre en busca de ayuda. Jon siguió a Ralof mientras varios hombres estaban frente a el. Pero a plena mitad de la torre la cabeza del dragón destrozo la pared y escupió una gran cantidad de fuego quemando a varios capas de la tormenta. El miedo invadió el corazón de los rebeldes, pero Ralof se adelanto para mirar sobre el agujero. Miro a Jon y con la mano le indico que se acercara.
-¿Ves la posada al otro lado?. ¡Salta al tejado y sigue!-le indico Ralof y Jon sin mas obcion salto de la torre cayendo sobre el tajado de la casa, pronto termino en el suelo y se levanto como pudo continuando tratando de salir de la ciudad.
Corrió por varia calles y no encontraba un salida hasta que llego a otra plaza central donde pudo ver a ese hombre pelirrojo el cual ayudaba a un niño a cubrirse del fuego del dragón. La familia del niño se salvo y continuo corriendo, el pelirrojo miro a Jon con gran sorpresa.
-¿Aun sigues vivo prisionero?...Bien no te alejes de mi si quieres seguir así-dijo el Pelirrojo y Jon no tuvo mas opción que seguirle pues el hombre tenia razón, si quería salir vivo de aquí tendría que seguirle-¡Gunner cuida de los civiles, tengo que encontrar a la capitana y unirme a la defensa-ordeno el pelirrojo a sus camaradas quienes continuaron sacando a los civiles de la ciudad
-¡Que los dioses te guíen Hadvard!-grito uno de los soldados y Hadvard asintió para luego mirar a Jon.
-¡Sigamos prisionero!-así los dos comenzaron a correr por la ciudad esquivando a la multitud que corría despavorida, llegaron al muro y los dos se apegaron a este respirando agitados por el cansancio de correr tanto-Permanezcamos cerca del muro, del lado este se encuentra la capitana y una puerta para que puedas escapara-dijo Hadvard a Jon quien asintió continuando así pegados al muro hasta llegar a una mayor concentración del ejercito de la ciudad quienes trataba de repeler el ataque del Dragón. Mas las flechas que impactaban en el rebotaban y solo provocaban mas su furia.
-¡Retirada, todos retirada!-en un corcel blanco, el general Tulio apareció dando ordenes de retirada, Hadvard y Jon miraron como todo el ejercito se desorganizaba y cada uno tomaba su camino. Así que sin mas Hadvard guio a Jon dentro de los cuarteles generales de Helgen donde podrían estar mas a salvo.
Dentro del cuartel general, Hadvard como Jon terminaron a salvo del ataque del Dragon recuperando aire tras esa espantosa experiencia que acababan de vivir.
-Te encuentras bien-pregunto Hadvard a Jon quien asintió a la pregunta del hombre-Bien, acércate para quitarte esas ataduras-Jon camino hacia Hadvard quien con un cuchillo desato a Jon el cual acaricio sus muñecas para aliviar la sensación de las ataduras-Ya esta, mira hecha un vistazo al rededor, debería haber equipo de sobra entre el que elegir, voy a ver si encuentro algo para esa quemaduras en tus muñecas-dijo Hadvard dejando a Jon solo quien paso para mirar el salón encontrandose otra sala donde guardaban ropa, armaduras y armas,
Jon tomo algo de ropa y se cambio, luego una espada que ato a su cintura para poder defenderse de cualquier ataque-Muy bien aquí tienes, no te curara de tus heridas pero aliviara el dolor-Hadvard se acerco y le entrego una cuenco con al de crema que Jon froto rápidamente en sus muñecas
-Gracias-Hadvard asintio
-Sigamos debemos encontrar una salida-así Hadvard llego a una puerta abriéndola, Jon pudo ver que el camino llevaba a los subterráneos del cuartel.
Caminaron por unos minutos en silencio hasta llegar a una compuerta la cual solo se abría con una palanca, pero antes de abrirla unas voces se escucharon dentro de ese salón, Hadvard se asomo de reojo y pudo ver a dos hombres armados chasqueando su lengua-Capas de la tormenta...tal vez podamos llegar a un acuerdo con ellos-sugirió Hadvard a Jon quien lo pensó unos momentos.
-Deberíamos preparar las armas por si las cosas no toman el rumbo que deseas-Le dijo Jon a lo que Hadvard asintió desenvainando sus espadas y abriendo la compuerta, entrando para ver a dos capas de la tormenta tomar sus armas igualmente.
-Esperen, solo queremos...-Hadvard fue interrumpido
-¡No nos interesa!-Los capas de la tormenta no escucharon y en un grito de batalla se abalanzaron hacia ellos. Hadvard fue envestido por uno y Jon rápidamente bloqueo el corte del otro, golpeando con su pierna la rodilla del nórdico que callo al suelo y con un tajo certero lo decapito limpiamente. Mientras Hardvard arrinconaba al capa de la tormenta contra la pared sacando su cuchillo perforando su pecho, luego lo dejo caer al suelo.
Hadvard suspiro, guardando su arma-Déjame ver si podemos salir de aquí -Hadvard llego a la otra puerta y con una llave la abrió-Ven esto nos llevara a los subterráneos-así los dos continuaron bajando unas escaleras llegando a la parte baja del cuartel. Pero el rugido del dragón volvió a escucharse y gracias a ese gran estruendo un derrumbe se produjo provocando que la salida principal se cerrara-¡Ese dragón no se rinde para nada!...sigamos por esa puerta-dijo Hadvard entrando al almacén principal encontrándose con mas capas de la tormenta.
-¡Sabandijas!-grito en furia uno de ellos corriendo hacia Hadvard.
Jon se pose frente a el y intercepto a la mujer, Hadvard por otro lado bloqueo la espada del hombre y lo degolló rápidamente. Mientras que Jon cortaba el pecho de la mujer quien con dolor termino en el suelo
-¿Donde estamos?-Pregunto Jon guardando su espada mirando alrededor
-Esto es el almacén...toma lo que puedas será útil para el camino-dijo Hadvard mientras el buscaba suministros para el camino al igual que Jon-Dime algo Westerosi...¿En verdad estas de viaje cuando te capturaron?-pregunto Hadvard tomando una manzana, Jon por otro lado tomo un saco y comenzó a guardar varias frutas, panes y verduras
-Lo estaba-Solo eso respondió Jon mientras Hadvard mordia la manzana y miraba al pelinegro tranquilamente
-¿Y que incentivo tuviste para viajar tan lejos?-Jon dejo de guarda cosas un momento y recordó el motivo...Luego continuo normalmente, pero Hadvard se dio cuenta-¿Fuiste repudiado por tu familia?-
-No...yo solo quise alejarme-Jon se giro para mirar a Hadvard-Soy un bastardo, nacido de una madre diferente a mis hermanos-
-Entiendo...Tu padre es un señor importante-
-Lo es...El es guardián del norte la máxima autoridad después del Rey claro-Hadvard lo pensó unos momentos
-Entonces el es un Jarl-Jon lo miro curioso unos momentos
-¿Que es un Jarl?-
-Un Jarl es un señor que gobierna una región dentro del territorio de Skyrim y que presenta sus juramentos a el rey, son la máxima autoridad y regularmente gobierna sobre otros señores menores-
-Pues si mi padre entonces seria un Jarl a como los describes tienen la misma función que un guardián-Jon comenzo nuevamente a guardar suministros y después de unos minutos el y Hadvard siguieron bajando por el cuartel, pasando algunos salones hasta llegar a unas escaleras deteniéndose al escuchar el grito de una batalla abajo
-La sala de torturas, Dioses ojalan no la necesitáramos-dijo Hadvard caminando para ver que es lo que estaba sucediendo. Así junto a Jon entraron a la sala de torturas donde otros hombres luchaban contra los capas de la tormenta, los dos se unieron a la batalla y lograron derrotarlos fácilmente al ser superiores en numero.
-Compañeros vienen justo a tiempo. Estos chicos parecían un poco contrariados por la forma en la que e estado entreteniendo a su compatriotas-ante la poco decencia del hombre Jon frunció el seño y quiso acercarse a reclamarle, pero Hadvard lo detuvo negándole a pesar de que el sentía lo mismo.
-¿Te has enterado de lo que sucede? ¡Un dragón esta atacando Helgen!-le dijo Hadvard pero la expresión del hombre le indicaba que no le creía nada.
-¿Un dragón?. No digas tonterías-dijo el hombre divertido aunque luego dejo esa risa de lado-Aunque ahora que lo mencionas, si que e oído unos ruidos extraños de fuera-
-Diablos, ven con nosotros debemos salir de aquí-dijo Hadvard, se le notaba desesperado de sacar a cuan mayor numero de personas pudiera del ataque del Dragón.
-No tienes autoridad sobre mi muchacho, así que si quieres irte eres libre de hacerlo-dijo el hombre provocando la molestia de Hadvard quien sin mas decidió continuar su camino siendo seguido de Jon, dejando al torturado junto a sus compañeros
-Ese estúpido viejo-dijo con molestia Hadvard mientras continuaban por las celdas.
-No puedes hacer nada, no podrás ayudar a todas las personas que te encuentres en el camino-dijo Jon tratando de calmar a su guía.
-Lo se...quisiera que no fueran tan orgullosos y vieran el panorama de las cosas-así los dos siguieron el camino asta llegar a una parte del cuarte que no tenia un muro y que guiaba a una caverna de la cual podía sentirse una brisa-Es por aquí sigamos-así los dos continuaron por el camino encontrándose con algunas arañas gigantes que impedían el paso a la salida pero gracias a la destreza de los dos pudieron salir de esa cueva llegando al punto norte de la ciudad, la alegría llego a los dos pero al escuchar el rugido del dragón se agacharon rápidamente. El dragón que era negro como la noche sobrevoló sobre ellos y se perdió entre las montañas aliviando a los dos guerreros que se levantaron del suelo-Parece que al fin se a ido para no volver, pero no creo que tengamos que quedarnos para comprobarlo-dijo Hadvard en un tono de burla mirando a Jon-Bien el pueblo mas cercano es Cause Boscoso. Mi tío es el herrero de ahí estoy seguro que nos ayudara-
-¿Quieres que te acompañe? aun con la posibilidad de que tal ves sea un enemigo tuyo-pregunto Jon a Hadvard quien lo miro confundido.
-Me ayudaste mucho en esa cueva y no creo que alguien que sea el enemigo mate a sus propios camaradas. A pesar de la situación en la que te metiste para lo que a mi respecta ya te has ganado el perdón y mi gratitud por ayudarme a salir a salvo de esa cueva-dijo Hadvard extendiendo su mano sorprendiendo a Jon por la humildad del hombre frente a el estrechando su mano en forma de paz sellando así su estado de prisionero hacia Hadvard-Bien Jon sigamos. Si caminamos rápido llegaremos para el atardecer a Cause Boscoso-así los dos se dirigieron hacia el pueblo de Cause Boscoso para aliviar su cansancio y hambre después de esta experiencia fantástica como traumática.
Asi comienza la nueva aventura de Jon Snow en una tierra desconocida y con peligros que lo pondrán a prueba, lograra sobrevivir a caso a la tierra salvaje de Skyrim
FIN DEL PROLOGO.
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