: Sentimientos de Lucía hacia Lian
El grupo. Después de una intensa batalla, finalmente pudieron encontrar un tranquilo lugar donde descansar y reponer fuerzas. Mientras sus compañeros dormían plácidamente, Lucía se encontraba absorta en sus pensamientos, sintiendo una extraña agitación en su interior.
Durante todo el camino, Lucía había sentido una conexión especial con Lian, el valiente y apuesto espadachín. Cada vez que su mirada se cruzaba con la suya, su corazón se aceleraba y una corriente eléctrica recorría su cuerpo. Sin embargo, nunca había atrevido a confesarle lo que sentía.
En ese momento de soledad, Lucía se permitió revivir todas las conversaciones, miradas y gestos que había compartido con Lian a lo largo de su viaje. Recordó cómo el caballero siempre estaba dispuesto a protegerla y cómo sus ojos brillaban cuando sonreía. Era imposible negar que Lian despertaba en ella emociones que nunca había experimentado antes.
Mientras Lucía reflexionaba sobre la impactante realidad de sus sentimientos, se dio cuenta de que había dejado de ser solo una simple atracción física. Había descubierto que se había enamorado de Lian, profundamente, intensamente. Pero no podía decirle a nadie. Temía que sus compañeros la juzgaran o que Lian no correspondiera a sus sentimientos.
Con el amanecer, Lucía decidió guardar su secreto en lo más profundo de su corazón. Sabía que mantener en silencio su amor sería difícil, pero también entendía que había un tiempo y un lugar adecuados para compartirlo. No estaba dispuesta a arriesgar su amistad con Lian ni a poner en peligro la armonía del grupo.
Así pues, Lucía se levantó del suave césped en el que había pasado la noche y se preparó para continuar con la próxima etapa de su aventura. Aunque su corazón latía con la melodía del amor, estaba decidida a mantenerlo oculto. Comenzó a caminar junto a sus compañeros, sabiendo que, por ahora, el secreto de su amor solo pertenecería a su corazón.