Punto de vista de Theodora
Aquí tienes el texto revisado con las modificaciones solicitadas:
Aeolus estaba a unos días de distancia. Hasta entonces, pasaría mi tiempo libre en el puente o compartiendo bebidas con mi hermano. Cualquier cosa para mantenerme alejada de los dos hombres a quienes besé el otro día. Mis dedos rozaron el costado de mi cuello donde Javier me mordió. Aún podía sentirlo a pesar de que las marcas habían desaparecido. Mi cuerpo se retorció ante el recuerdo. No puedo creer que me mordió. Lo más increíble fue que me proporcionó una intensa experiencia cuando se alimentó de mí. Nunca pensé que sería el tipo de persona que disfrutaría de eso, pero ahí estaba yo, gimiendo como si me estuvieran recompensando, mientras él tomaba mi sangre. Absolutamente absurdo.