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La vida en la familia shimura no se parecía en nada a lo que izuku vivía. El día tras día de izuku era despertar, mirarse al espejo y desear que ese día no sea tan malo como ayer y que mañana no sea tan malo como ese día. Despues el desayunaba agua y arroz para irse directo a estudiar.
Nunca había nada asombroso en su vida como en su hogar pero, la casa de los Shimura estaba llena de sorpresas y cosas asombrosas.
De esto se fue dando cuenta Izuku durante el rato que estuvo caminando por la casa de los Shimura en lo que la cena estaba lista.
Tenko era muy buen anfitrión y sin mencionar a los padres de este que lo trataban como si fuera su propio hijo.
Tan solo fue un rato y parecía que la señora Shimura fuera su madre.
Incluso, cuando la cena estuvo lista y todos estuvieran en la mesa, izuku no espero ver grandes raciones de comida. Jamás había visto tanta comida despues de la UA. Y cuando izuku probo el katsudon por primera vez en su vida supo al mero instante que esa seria su comida favorita de toda la vida habida y por haber.
La hora de la cena fue muy gratificante y cómoda para izuku pero hubo bastantes dudas y una de ellas era el hecho de que la joven Shimura, Hanna, la hermana de Tenko no se presento para cenar si no que a ella se le llevo la cena al jardín y como izuku no quería sonar entrometido lo paso por alto.
Al señor Shimura le gusto mucho tener a izuku al lado en la hora de la cena pues le preguntaba muchas cosas de los héroes ya que al enterarse de que este tenía un diario de anotaciones de todos los héroes, le termino fascinando este hobbies del chico.
―¡Increíble! ―decía, cuando izuku le explicaba como funcionaba el quirk del héroe Yoroi Musha―. Es un hombre ingenioso de verdad, las cosas que hace con su armadura para ser un top hero, eso es apañársela de verdad.
Al final, cuando la cena termino y toda el hambre estuvo saciada, la señora Shimura se puso de pie llevando todo a la cocina comenzando a limpiar mientras que Kotaró, Tenko eh izuku se quedaron en la mesa hablando un poco más.
Izuku se sentía como en… familia.
Risas, sentimientos mutuos y tranquilidad, algo que el chico había querido y sin saber desde hace mucho tiempo.
Fue una noche encantadora.
Pero… tenia que hacerse aquella pregunta.
―Papá ―dijo tenko.
―¿Sucede algo? ―pregunto dejando su vaso de agua sobre la mesa mientras miraba a su hijo.
Izuku noto la seriedad en la voz de tenko quien sin alguna expresión sobresaltada, pregunto tranquilamente lo siguiente.
―¿Podemos hablar sobre el One For All?
El silencio que se formo a partir de la pregunta podría asimilarse al del espacio. Ni si quiera un jadeo o suspiro se pudo escuchar, ni si quiera los latidos de los cuerpos de cualquiera de los tres.
Kotaró había bajado poco a poco la mirada cuando su sonrisa desapareció he izuku solo pudo mirara a su amigo con una mirada conmocionada.
―Tenko
―Midoriya sabe algo del One For All ―interrumpió al notar las intenciones de su padre al intentar callarlo. Pero al momento de que este escucho esto, de golpe dejo caer sus ojos sobre izuku quien no tuvo tiempo de volver su mirada hacia él.
―¿Qué?
―¡Shimura-San! ―exclamo Izuku levantándose de la mesa al igual que Kotaró.
Ambos encontraron sus miradas y cuando izuku pudo ver el semblante del padre de Tenko se encontró con unos ojos esperanzados.
Hubo algo que le provoco una dura punzada en el pecho pues sintió una gran y dura temperatura crecer en su pecho.
Por un instante, izuku juraría haber visto de pequeño al padre de tenko, como si fuera un niño en su memoria lo que lo llevo a limpiar su vista volviéndolo a ver en su forma de adulto.
―¿E-es enserio? Midoriya… ¿Tu?
―E-espere… s-se equivoca yo…
―Midoriya, está bien ―interrumpió tenko quien se puso poco a poco de pie hasta estar a la misma altura que ellos, claro, un poco mas alto debido a su altura.
―Papá, por favor.
Con aquella voz tan seria la cual no era usual en su hijo le dio a entender en automático que lo que dijo con anterioridad era cierto.
No entendía por qué ahora había pasado esto. Kotaró pensó que su hijo de alguna forma le conto sobre el One For All a su izuku pero también pensaba que algo no cuadraba. ¿Por qué lo haría? Pero entonces recordó lo que su hijo le conto sobre izuku, sobre un chico de su clase que tenía doble peculiaridad la cual le daba superfuerza.
―E-esta bien… ―dijo derrotado Kotaró quien suspiro y separo sus palmas de la mesa―. Pero no hablaremos aquí, iremos a mi estudio si les parece claro.
Dicho esto, izuku miro a tenko quien asintió y sin saber que le depararía, los tres salieron del comedor cuando justo unos momentos despues entraría la madre de tenko con unos pastelillos.
―¿Huh?
Sin saber a donde habían ido, los pastelillos se quedarían en medio de la mesa.
…
Aquella casa que el construyo alberga lo que significo el amor de su madre hacia él. Un fuerte sentimiento que trasciende la muerte y aun se alberga en su corazón. Una casa que se formo con los ideales que ella le dejo tras su partida.
Esa casa que el construyo para cuidar el recuerdo de su madre.
―Ella es… Shimura Nana ―delante de los tres, una gran foto enmarcada en la pared la cual tenia grabada en ella una escena de una madre en traje de héroe abrazando a su hijo―. Mi madre ―termino de decir mientras acariciaba la foto de aquella bella mujer de cabello oscuro y gran sonrisa con un lunar por debajo de sus labios.
Cuando escucho el nombre de Shimura Nana, izuku sintió un sentimiento que se compararía a remordimiento nacer en su pecho. Pudo sentir culpa avivarse entre su corazón.
―Ella era una heroína antes de que muriera ―explico Kotaró ―Siempre hubo muchos secretos que nunca quiso contarme, pero tras la muerte de mi padre, tu abuelo tenko quien tenia tu mismo nombre… ella simplemente se derrumbo y me dijo la verdad.
―Midoriya ―hablo tenko hacia su amigo―. Justo despues de que despertaras, cuando usaste Decay… ¿Tuviste ese mismo sentimiento hacia mí, no? Una punzada parecida a ser electrocutado directo en el pecho.
―Tenko, ¿Tu…? ―Kotaró se noto extrañado con la actuación de su hijo quien dio un paso hacia delante acercándose a la foto de su abuela.
―El One For All es un poder heredado de persona a persona con un objetivo, derrotar a alguien, ¿No, papa?
Kotaró asintió.
―Cuando papá murió, mi madre, Nana… ella y yo huimos pero en el poco tiempo que estuvimos juntos muchas cosas pasaron y ella tuvo que contarme la verdad. Aunque era muy pequeño y no entendía muchas cosas se sincero conmigo y no tuve más opción que entender ―Kotaró tomo un poco de aire―. Mi madre era perseguida por un hombre, un villano el cual dijo que quería su poder, One For All.
Nuevamente ese sentimiento de culpa creció como la flama de un fosforo a convertirse en una antorcha dentro suya.
Un golpeteo desde su interior lo hizo reaccionar.
―La séptima portadora…
Tenko y Kotaró se miraron.
―Lo llevamos pensando un tiempo, yo mas que él claro. Dinos, Midoriya… ¿All Might…? ―Kotaró cerro los ojos y volvió a tomar un gran respiro recuperándose. Al reabrir sus ojos encontró su mirada con la del peliverde―. ¿El tiene el One For All?
Izuku se encontró directamente con una contradicción. No sabía si debía de asentir y confirmarles la pregunta o no. Despues de todo, all might le había confiado un secreto y uno muy importante para él pero, la familia Shimura quizás sabia mas del One For All que lo que all might le haya dicho de él.
―No…
A secas el respondió agotando las esperanzas de Kotaró quien bajo su mirada pero en cambio, tenko la mantuvo en alto como si esperara algo.
―No lo tiene All Might por que… ―izuku inhalo―. Por qué… ―exhalo.
El chico apreto sus puños y alzo su mirada y por un breve momento, al pronunciar las siguientes palabras, juraría que en su cabeza, su propia voz resonaría con el de una mujer.
―Por que el lo heredo en mí.
Kotaró levanto su mirada y sus ojos comenzaron a brillar, era señal de lágrimas.
Tenko como su padre se quedo con los ojos abiertos como dos pares de ventanales, incluso cuando el chico tenia sus dudas sobre si esto era verdad, escucharlo por viva voz de izuku fue más increíble de lo que esperaba.
―Hace ya mas de un año, All Might me ayudo y hace unos meses me lo heredo ―explico mientras que Kotaró lo miraba fijamente.
―Entonces, All Might si era el siguiente portador… ―comento con una risa escapada.
―¿Eh?
―Nunca pude entender su totalidad ese poder, nunca quise de verdad entender por qué aquel hombre quiso tenerlo en su poder, pero tras su muerte, tras los años de oscuridad que vivió japón y el regreso de All Might, aun con mis dudas pude entender algo ―el limpio un poco de lagrimas de sus ojos―. Todas esas cosas que no quise entender y que ahora quería saber, se hicieron realidad. Ahora puedo entender por qué ese pode era tan codiciado por ese tipo. Ahora entiendo por qué mi madre jamás se considero una legitima portador y el por que siempre me dijo que ella solo era un contenedor de espera.
Kotaró se dio la vuelta y camino hasta la foto encontrándose con al foto de él de niño y de su madre.
―Despues de su muerte, la humedad que quedaba tras la lluvia flotando en el aire perforaba mi piel como agujas. Siempre tuve esa picazón surgiendo desde mi estómago. Muchos años odie esto y odie a mi madre pero al final lo entendí… ahora puedo entenderlo ―el extendió su mano hacia la foto acariciando la cara de su madre.
―Ella, tu abuela Tenko, quien heredo su quirk en ti tras su legado. A pesar de luchar incansablemente jamás me abandono. Quizás fue egoísmo tenerme de su lado aun con ese peligro inminente pero, también soy egoísta, al agradecer poderme haber quedado con ella en sus últimos momentos ―Kotaró volvió su mirada hacia izuku―. Mi madre, la ultima vez que la vi fue el mismo día de esa fotografía Midoriya. Horas mas tarde ella se fue y a partir de ese día nunca la volvía a ver de nuevo ―con un poco de tristeza explico―. No hay mucho que yo pueda explicarte sobre el One For All más lo único que acabo de decirte. Mi madre tuvo ese poder por muchos años como ella me explico, lo tuvo incluso antes de que yo naciera y quizás esa es la razón del por que tenko pudo usar esa fuerza.
Tenko agacho la mirada observando su propia mano recordando aquel momento en la USJ.
―No espere que tu fueras tan parecido también a Tenko.
Ese «También» confundió a izuku.
―No puedo ayudarte mucho más, quizás All Might lo pueda hacer si le dices, si ambos le dicen lo que ahora saben. Bueno, quizás haya algo más, ¡Ya se…!
El sonido del teléfono resonó en la habitación.
La platica fue interrumpida.
―Disculpen.
Kotaró respondió tomando el teléfono y comenzando a hablar durante un par de minutos y al terminar se dirigió hacia su hijo eh izuku.
―Surgió algo muy importante, tengo que regresar rápido a la oficina pero no tardare… ¡Lo tengo! ¿Por qué no te quedas a dormir Midoriya? Así podrán esperarme sin preocupaciones de perder el ultimo tren de media noche. De esta forma poder contarles algo más.
Kotaró rápidamente tomo un saco de la silla de escritorio en su oficina caminando hacia la puerta.
―E-espere, ¿Esta bien que me quede? ¡Y-yo…!
―No destruirás la casa ―interrumpió de golpe.
―¿Eh?
Kotaró se detuvo de golpe en el pomo de la puerta.
―Tenko nos habla mucho de ti y ahora entiendo todas las palabras que dijo sobre ti ―el hombre lo miro con una sonrisa―. Aunque sea un tonto, si el confía en ti, no hay razón por la cual no podamos confiar también nosotros.
Izuku no pudo ocultar su sentimiento de culpa y remordimiento por lo cual salto hacia delante.
―S-si sabe que yo…
―Eras un niño.
Apenas dijo esto regreso su mirada hacia el frente sin mirar a izuku y abriendo poco a poco la puerta.
―Yo odie mucho a mi madre por morir, todo porque pensé que era mejor herirme a mi que dejar de ayudar a los demás pero al final, despues de que Tenko naciera me di cuenta que un héroe esta dispuesto a todo y que mi odio egoísta era demasiado. Un héroe claro que puede herir a su familia por ayudar a otros pero, gracias a esto puede salvar vidas. Pensar en mi solamente es un deseo egoísta que no voy a tomar. Todo eso paso por que era un niño que no entendía nada.
El salio de la habitación y justo antes de cerrar la puerta él dijo unas últimas palabras.
―Un niño que no entiende nada, no debe ser culpado.
La puerta se cerró y Kotaró comenzo a caminar por el pasillo mientras se colocaba su saco. Al llegar a la recepción se encontró con su esposa.
―¿Paso algo, Kotaró?
―Nada en realidad querida. Iré rápido a la oficina por unos papeles y volveré en seguida. ¿No hay problema si el chico se queda a dormir, ¿Verdad?
―¡Para nada! Pero me hubieran avisado antes, iré en seguida a prepararle una habitación y una buena cama para que descanse bien.
Kotaró sonrió.
―Dile a Hanna que más tarde me gustaría hablar con ella, la esperare en mi estudio cuando llegue.
―Esta bien. Cuidate.
Con esto dicho, ambos se dieron un beso y el hombre salio de su hogar encamino a su automóvil donde al abrir la puerta poco a poco recordó algo.
"Lamento mucho todo esto Kotaró, sé que no deberías tener una vida así. Estar yendo de lugar en lugar, sin poder hacer amigos o tener una buena vida… soy una mala madre."
El subió a su coche encendiendo las luces de la parte delantera buscando algo en su compartimiento de un costado.
"Tu madre tiene que pelear con muchos chicos malos y eso podría ponerte en peligro pero…"
Lagrimas cayendo hacia el asiento.
"Yo…"
Kotaró empujo su rostro hacia el volante mientras sus lágrimas caían a cascadas.
"¡Yo no quiero abandonarte!"
Los llantos de un hombre adulto silenciados por los sonidos de la noche y el inaccesible zona muerta de su coche solo retumbaría en su corazón culpable.
"Lamento mucho no poder se una buena madre para ti y quizás si llego a dejarte terminaras odiándome por eso pero siempre… siempre quiero que sepas que te amare."
El niño caminaría hacia su madre quien lo sostendría en brazos.
"Te amo Kotaró, a ti y a ti padre siempre los amare así que espero que puedas vivir siempre con una sonrisa y feliz por que pase lo que tenga que pasar, siempre te cuidare este dónde este."
Ellos dos sonrieron frente a la cámara.
Los llantos de Kotaró se transformaron un risas llenas de felicidad mientras levantaba su rostro sabiendo algo.
"Construye… tu propia prosperidad."
El hombre estaba seguro que la memoria de su madre que habitaba en él ahora podría descansar tranquila.
Aquella casa donde su familia vivía, era el fruto del sacrificio de su madre y del amor que ella le tuvo a él.
Gracias a izuku el se dio cuenta de esto.
…
Ambos chicos se encontraban en el balcón de la habitación de Tenko mirando el cielo estrellado. Ambos estaban sostenidos del barandal, izuku estaba recargado con sus antebrazos en el y con su mentón sobre estos.
―Es mucho por procesar ―comento izuku abatido.
―Justo así lo creo ―afirmo tenko quien estaba con sus ojos perdidos.
―Pero hay algo que no entiendo de todo esto, Shimura-San
―¿Qué pasa?
Izuku levanto el mentón sin separar su mirada del frente.
―Entiendo que ahora tu padre piense que somos parecidos y todo eso pero no entendí por qué dijo, "También" ―inquirió.
―Supongo que lo dice por el quirk de mi hermana ―respondió sin chistar.
Izuku se quedo con los ojos abiertos los cuales poco a poco dirigió hacia tenko.
―¿Qué?
―Hanna tiene un quirk parecido a ti.
Tenko parecía estar metido en las nubes pero sus ojos reflejaban algo más. Poco a poco cayeron hacia abajo donde en el jardín avistaron algo más.
―¿Ah? ¿Qué dices? ―Izuku no pudo ocultar su sorpresa. El aire en sus pulmones salio de golpe mientras sus manos dejaron el barandal del balcón dando un pequeño giro hacia su amigo de cabello oscuro quien aún mantuvo su mirada sobre su… hermana. Quien yacía en el jardín cuidando aquel árbol verde con adornos de flores de todos los colores y tipos alrededor suyo―. L-lo que dices… no, no, ¿No es verdad, cierto? ―pedante como un reloj rechinando a las 12 P.M, izuku se mantuvo perplejo a la revelación.
―One For All no es lo único que nos conecto Midoriya. Y si el día de mañana logramos confirmar todo lo que intuimos y hablamos con nuestro padre con All Might puede que haya algo mas oculto detrás de todo esto. Respecto a ese hombre que busco a mi abuela. Ese algo de lo que necesitamos ser conscientes ahora mas que nunca…― aun con los mechones de su largo cabello cayendo a su costado ocultando su mirada de izuku, este chico azabache tenia un semblante bañado en miedo mientras que en sus pupilas se reflejaba su hermana quien sostenía una flor roja anaranjado entre sus dedos los cuales estaban cubiertos por sus guantes.
Tenko se dio la vuelta y separo sus manos del barandal.
―Tu quirk, deterioro destruye todo lo que la vida construyo… ―el chico conecto sus ojos oscuros como la noche con los verdes como esmeralda de izuku―. Mi hermana, el quirk de mi hermana es capaz de destruir lo que significa la vida.
―¿Por qué no me lo dijiste antes? Tu… ―izuku se cubrió la boca.
―Puede que suene muy egoísta y avaricioso de mi parte pero al final, creo que pude entender algo sobre ti Midoriya, ese dolor tuyo. Pero tampoco pecare de arrogante. Despues de todo la única persona que podría entenderte completamente esta allá abajo ―dijo apuntando a su hermana con su mirada―. Esos guantes que seguramente viste cuando te la encontrase por primera vez no es para que ella no se dañe, es para que ella no dañe ―suspiro―. Esto era de lo primero que quería hablar contigo pero el One For All surgió entonces supongo que esto quedo como segundo plano así que… ―tenko aparto su mirada de izuku y dio un paso hacia el frente sosteniéndose del barandal una vez mas mientras que izuku reflejo en sus pupilas a la hermana de Tenko.
―El quirk de mi hermana, Midoriya ―el chico cerro sus ojos―, su quirk se llama… ―al reabrir sus ojos, las manos de aquella chica estaban reflejándose en sus azabaches esferas luminiscentes.
Aquello que en la mano portaba Hanna era una flor que simulaba el nacimiento de una mariposa de su capullo.
Una flor de un color anaranjado que se abre hacia todos lados como un remolino… escarlata.[El quirk de Hanna Shimura es…
[Podredumbre.]
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