Chapter 6: Es como la Tierra

Al final, aunque era un poco agotador ya que consumía diez puntos de resistencia por segundo, Rain podía obtener un punto de experiencia para sus Habilidades Motoras Corporales. Nunca pensó que gatear pudiera ser tan cansado, pero la razón debe ser su cuerpo débil. Una vez que algunos parámetros aumenten, algunas actividades difíciles consumirán menos resistencia y, eventualmente, ninguna resistencia.

—Tengo algunos puntos libres, pero supongo que los guardaré para cuando realmente los necesite... subir de nivel en idioma empezará a ser difícil, así que debo centrarme en usar las Habilidades Motoras Corporales tanto como sea posible —pensó Rain.

El padre de Rain también se veía sorprendido y confundido cuando vio a su hijo gateando en círculos y decidió jugar con él. Él tenía una pelota de goma y se la lanzó a Rain.

—No soy un perro —pensó Rain.

Si eso hubiera sido hace tres meses, Rain habría arrojado la pelota fuera de la casa, pero ya no podía hacer eso. Su padre merecía algo de respeto... no tenía una buena relación con sus padres ya que era el hijo menor, y se había casado con una mujer de bajo nacimiento. Sin embargo, no dudó en inclinar su cabeza por el bien de su familia para conseguir un nuevo trabajo de ellos. No se quejaba mucho, pero estaba claro que no recibía buen trato de sus padres... merecía bastante respeto.

—Supongo que lo complaceré un poco —pensó Rain mientras devolvía la pelota a su padre.

Su padre trabajaba más de veinte horas al día. Roan no tenía mucho tiempo para pasar con su hijo, así que realmente disfrutaba pasar mucho tiempo con él. Desafortunadamente para él, eso no podía durar más de una hora. Después de la cena, el peor enemigo de Rain siempre aparecía y se mantenía victorioso en todas sus batallas... Hasta ahora, Rain ha perdido 135 veces contra el sueño después de la cena, y ha ganado cero veces. Para disfrutar de una segunda vida, no podía dejar que eso ocurriera para siempre.

Alrededor del tiempo en que Rain cumplió seis meses, vio a sus padres preparándose para algún tipo de evento. Trajeron ropa nueva para todos, el tipo de ropa que la gente rica en ese mundo usaría para fiestas.

—Parece que vamos a ir a algún lado pronto —pensó Rain.

Rain pensó que su padre sería desheredado, así que no tendría que participar en cosas elegantes. Sin embargo, recibieron una invitación a alguna fiesta, y pronto se dio cuenta de qué se trataba.

—El hijo de mi hermano mayor cumple cinco años esta semana y es bastante notable, así que invitó a toda la familia a la fiesta —explicó Roan mientras cenaban—. Parece que quiere presumir ante todos, incluso los parientes que viven lejos.

—¿No es eso algo bueno? —preguntó Leiah—. Yo haría lo mismo por Rain.

—Sí, es bueno... pero este tipo de eventos siempre me han molestado —dijo Roan y luego suspiró—. La gente dice cosas y actúa como si fuera muy importante, cuentan chistes que en realidad no son chistes solo para sentirse superiores a los demás... en mi familia, solo nos vemos como rivales. Yo y mis hermanos, lo que sea que hagamos, logremos o conquistemos, se lo mostramos a los demás para hacer que los otros se sientan celosos e inferiores.

—Ya veo... entonces es como en la Tierra —pensó Rain.

—Bueno, solo tenemos que soportar esto y luego quedarnos allí por un rato y en silencio —dijo Leiah.

—No nos lo pondrán fácil... —dijo Roan y luego suspiró—. Lo siento, pero perdimos casi todo lo que teníamos, y se asegurarán de hacérnoslo recordar varias veces durante la fiesta.

—Definitivamente como en la Tierra... ignorar a los matones no es suficiente; tienes que mostrar que no te importan en absoluto —pensó Rain.

—Está bien. Podemos empezar de nuevo tantas veces como sea necesario —sonrió Leiah—. Tenemos el uno al otro, y Rain también está con nosotros.

—Tienes razón —sonrió Roan.

—Ugh... consigan una habitación —pensó Rain—. Una que sea completamente insonorizada.

Varios días después, Rain y sus padres fueron a la fiesta. El evento tuvo lugar en una casa tan grande como la de sus abuelos, pero en el jardín que también era masivo... había mucha gente allí, cerca de doscientas de hecho.

Las mesas estaban cargadas con una abundante variedad de platillos que estimulaban los sentidos. Había bandejas de carnes asadas suculentas, tiernas y jugosas, condimentadas con hierbas y especias fragantes. Boles de ensaladas frescas y crujientes rebosaban de verdes vibrantes y vegetales coloridos, tentando a los invitados a saborear sus refrescantes sabores.

Una variedad de panes artesanales y bollos, todavía calientes del horno, estaban ordenadamente dispuestos en cestas, listos para ser disfrutados junto a una selección de quesos cremosos y patés sabrosos. Sopas y guisos fragantes se cocían lentamente en grandes ollas, desprendiendo sus consoladores aromas por el aire.

—Desearía tener suficientes dientes para comer todo esto —pensó Rain mientras se le hacía agua la boca.

Curiosamente, Roan fue medio obligado a dejar a su esposa e hijo porque sus hermanos estaban juntos también... tenía tres de ellos, y todos eran similares a él, altos, musculosos y molestos guapos. Parece que todos ellos obtuvieron los buenos genes de la familia. Aparentemente, su abuelo demasiado serio y la abuela impasible tenían suficientes genes de sobra.

En otra parte del jardín, Rain vio a un grupo de mujeres con vestidos de seda hablando entre sí mientras soltaban unas risas seriamente molestas. Había unos niños frente a ellas, y todos eran menores de cinco años.

—Supongo que el niño del cumpleaños es el mayor de mis primos —pensó Rain.

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