—Está bien, está bien —dijo Leiah—. No tienes que ser tan tímido. Rain heredó mi buena apariencia, y también es confiable, así que es comprensible.
—La confiabilidad la sacó de mí, ¿verdad? —preguntó Roan—. No hay otra explicación aparte del hecho de que le enseñé a ser confiable.
—No sabría decir —Leiah se encogió de hombros.
—Oye —protestó Roan.
—Ustedes están pensando demasiado en esto, y yo no soy ninguna criminal como para estar interesada en chicos de catorce años —dijo Terra.
—... Hubiera sido bastante vergonzoso si Rain hubiera escuchado todo esto —Asche se llevó la mano a la cara.
—Está bien. Ya está durmiendo —dijo Dana—. Él me enseñó cómo encontrar la ubicación de los demás con magia de la tierra. También me enseñó a sentir incluso sus latidos con lo mismo... es un poco agotador ya que requiere mucha concentración.
—...Se siente como si Rain estuviera convirtiendo a sus hermanitas en súper soldados —dijo Jori mostrando una expresión complicada.