Vivian miró a Leonard con la cara cubierta de sorpresa. ¿Se iban a casar? ella sólo le había transmitido lo que le habían dicho, que mantuviera su castidad hasta casarse. Olvidando cuán impulsivo podía ser a veces para resolver asuntos, ella no había pensado que él se acercaría a la iglesia en medio de la noche para solucionar el problema.
—Creo que el matrimonio es algo en lo que ambas partes deberían estar de acuerdo —comentó la hermana Isabelle mirando la desconcertada mirada de Vivian.
Leonard volvió la cara para preguntarle a Vivian. —¿No quieres casarte conmigo, Vivi? —cuando salieron de la mansión, nunca se le ocurrió que vendrían a la iglesia y menos a casarse. Fue demasiado repentino para ella entender lo que Leo había propuesto. Su primer pensamiento fue que estaba bromeando, pero no lo estaba.