—¿Artem?
—¿Sí? —respondió él—. Él seguía sonriendo, aunque habían pasado varios minutos. Obviamente estaba feliz.
—¿Qué es una marca?
—¿Oh, aún no hemos explicado esa parte? Lo siento mucho, Estrella. —parecía realmente entristecido por ese hecho—. Una marca también se conoce como una marca de pareja. Muestra a otros lobos y seres sobrenaturales como nosotros que tienes una pareja, que estás ocupada. En cierto sentido les muestra a todos que no deben meterte con. Además, es un vínculo entre nosotros. Si estás en problemas, debería saberlo por la marca que puse en ti.
—Pero, los hombres normalmente no reciben marcas, ¿verdad? Eso es lo que dijiste.
—No, no suele suceder, pero estoy feliz de tener una. Es un signo de mi amor y devoción hacia ti y siempre estaré feliz de tener esta marca. —Amé su sincera bondad.
—¿Cómo es mi marca? Vi la tuya, pero ¿cómo es la mía? —volvió a sonreír mientras miraba en dirección a mi marca.
—Es idéntica a la mía. Coinciden completamente.