Alfa Denzel regresó del entrenamiento e inmediatamente fue a la habitación del Alfa Lawn, llamando a la puerta.
—Papá, soy Denzel.
La puerta se abrió con Alfa Lawn vestido de manera informal. Parecía que se había despertado hace poco y ya se había duchado.
Su voz transmitía calidez al ver a Denzel. Estar solo en la casa de la manada era suficiente para restaurar su energía. —Denzel, ¿ya terminó el entrenamiento? ¿Dónde están Valerie y Ashley?
—El entrenamiento terminó y Valerie está conversando con Ashley. Papá, bajemos y yo cocinaré para ti.
Denzel guió al hombre de mediana edad con orgullo. Con Alfa Lawn y Luna Fernanda en su vida junto a Ídris y Ashley, se sentía como si tuviera una familia de nuevo.
La presencia de Ashley y Alfa Lawn era suficiente para devolver la alegría a la casa de la manada una vez más.
—¿Sabes cocinar? —preguntó Alfa Lawn por detrás de Denzel, sorprendido de que alguien como él pudiera ser útil en la cocina.