—¡Apúrense todos! —Thoram, el Comandante de la Fortaleza de Norria, lideró la carga hacia la Aldea Hoja.
Detrás de él, más de quinientos Jinetes de Norria montaban sus confiables Cabras. La Aldea Hoja había sonado el nivel más alto de alarma posible, lo que significaba que no estaban lidiando solo con un Brote de Monstruos ordinario.
Boreas, uno de sus Capitanes más confiables, había sido estacionado para cuidar de la aldea. Con él allí, ningún Brote de Monstruos ordinario podría posiblemente superarlo. Sin embargo, se había sonado la Campana de la Calamidad de la Aldea Hoja, lo que significaba que el problema al que se enfrentaban podría potencialmente borrar la aldea entera de la faz del mundo.
Desde lejos, podía ver nubes oscuras cubriendo la totalidad de la aldea. Todos los Jinetes de Norria observaban cómo los rayos caían del cielo, seguidos por un trueno retumbante que se extendía por todo el territorio de Norria.