—Has oído al hombre, hemos terminado aquí en los compartimientos de estasis vacíos, vamos a explorar los compartimentos del motor —Nico declaró, demasiado alegremente para la tranquilidad de Max.
No necesitaba ser un lector de mentes para saber que ella tenía la intención de encontrar una manera de volver a poner en línea los motores de la Nave Colonia para que pudieran viajar por el espacio con estilo.
—¿Estás pensando en algo extraño, verdad? —preguntó el Mayor Miller, pensando lo mismo que Max.
—¿Definir extraño? Se me ocurrió que si aún estamos en esta misión y no hemos entregado oficialmente la Nave Colonia cuando nuestro servicio termine, legalmente se nos permite quedárnosla —sugirió Nico con una ligera risita.