—Estábamos planeando crear un camino con nuestro amigo aquí y también con el poder del padre —dijo Seadir—. Así que eso debería ayudar un poco. ¿Qué más?
—Después de cortar su ruta de escape, intentaremos negociar primero y exigir su rendición. Naturalmente, demandaremos matar a Joanis y a sus soldados —explicó Rain—. Tú puedes tener el placer de acabar con ellos en la improbable posibilidad de que se rindan. Si no, los atacaremos. Su barrera los protege de la magia y evita que se utilice magia en su interior, pero todo lo demás funciona. Los desgastaremos hasta que se rompan. Con tu gran amigo aquí, quizás podamos hacer que se rindan bastante pronto. Entraron en pánico cuando casi los hice hundirse en la tierra.
—... Me parece un plan suficientemente bueno para mí, pero a algunos de los generales y sus soldados puede que no les guste el hecho de que podemos pelear contra ellos por un tiempo —añadió Seadir—. Tampoco tenemos que completar la vía fluvial, y ellos manifestarán eso.