La sorpresa de Rain se profundizó al observar la rápida evasión del enemigo y el subsiguiente cambio en su aura. El cambio de un aura oscura a una roja y ardiente tomó a Rain desprevenido una vez más. Se hacía cada vez más evidente que estos adversarios estaban reteniendo algunas de sus técnicas, revelando su verdadera fuerza solo cuando era necesario.
La transformación en el aura parecía significar un cambio en el enfoque del enemigo, una advertencia de que estaba preparado para intensificar la batalla. Rain no pudo evitar reconocer la pericia y adaptabilidad del enemigo en tácticas de combate, haciendo que fuera aún más cauteloso sobre la batalla que tenía por delante.
«Su presencia entera pareció mucho más poderosa de repente... aparte de la magia de curación de alto nivel, ¿pueden hacer esto?», pensó Rain.