—¿Milord? —Clutch la miró con cautela y Altea cruzó los brazos mientras lo observaba.
Estaba temblando un poco, claramente intimidado. Sus cejas se fruncieron.
—¿Doy miedo?
—Yo... no, sí...
—¿Qué?
—Lo que mi Señor diga es correcto.
—Trátame con naturalidad. Me enojaré si la gente se entera de mí por tu actitud —ella lo dijo con una seriedad fingida. Lo que no esperaba era que él pareciera a punto de llorar en el momento en que lo dijo.
Sus ojos titilaron, sin detenerse más en el tema. Obviamente, el estatus del Señor en este mundo era relativamente alto, lo que en su mayoría era un alivio. Otra cosa interesante era que ¿los PNJs parecían hablar otro idioma? Sin embargo, ella podía entenderlo claramente, como si hubiera una traducción automática en su cabeza.
Por supuesto, su forma de hablar era un poco diferente, pero su cerebro podía traducirlo de una manera que ellos entenderían fácilmente. Ella miró al hombre que todavía miraba hacia abajo, sin encontrar su mirada.