"Los Gusanos Excavadores habían sido movidos de su guarida anterior y plantados en ese ambiente desolado.
Luego, su número había sido reducido periódicamente para evitar que escaparan de la mazmorra, obligándolos a recurrir al canibalismo o a comer terreno.
La sangre de las bestias de hace dos mil años podría haberse perdido, diluida durante esa gran cantidad de tiempo, pero la voluntad que portaba permaneció.
Fue suficiente que una bestia comenzara a odiar, manchando su cuerpo con una emoción firme pero débil, para que se generara una reacción en cadena.
Esa bestia murió pero su sangre fue compartida entre la bestia que la comió, despertando una voluntad similar en ellas.
Lo mismo ocurrió con esas bestias que continuaron propagando esa sangre contaminada.
Entonces, llegaría la operación de limpieza, reduciendo su número y concentrando una vez más esa emoción en menos ejemplares, mientras se aumentaba ligeramente en poder.
Así, pasaron los años y ese ciclo se repitió.