—Nadie estuvo en desacuerdo. ¡Después de todo, el resultado del sorteo fue demasiado malo! ¡Fue mucho peor de lo que todos anticipaban! —Zhou Moyan no esperaba que sacaran el número 6, justo un número antes del Departamento Clínico representado por Jiang Xianrou. Una rara expresión de autoreproche apareció en su rostro apuesto, y sus dedos se presionaron entre sus cejas. Miró a Qiao Nian y dijo:
— Song Tian tiene razón. Reportamos un baile en solitario. ¿Por qué no la dejas ir sola? Es mejor tener una persona menos.
—Se comportó de una manera que reflejaba su buena familia. Era culto y sus intenciones eran muy reservadas.
Sin embargo, su significado todavía era claro: era mejor tener una persona menos pasando vergüenzas.
—Sí, Qiao Nian, no vayas —Song Tian se sentía miserable. Tendría que bailar sola.
Tendría que enfrentar sola las burlas de todos si Qiao Nian no subía al escenario con ella.