El grupo fue guiado a una habitación dentro de la base, y cuando Quinn posó sus ojos en cierta máquina, supo al instante cuál sería el juego. Estaba bastante familiarizado con él y también había jugado algunas veces en el pasado.
—El juego al que los retamos es Bloque, Bloque, —dijo Mantis, señalando la máquina.
Mirar aquella cosa le traía malos recuerdos a Dennis. Empezó a frotarse los brazos en ciertos lugares que le dolían un poco, aunque sus heridas habían ocurrido hace tiempo y ya habían sanado. Era más un daño mental que físico.
Reacio a rendirse, intentó jugar el juego repetidas veces y perdió en cada intento.
Bloque, Bloque. Era un juego en el que se utilizaba un objeto cilíndrico tan grande y grueso como un hombre adulto. El poste se dividía en seis segmentos diferentes. En cada segmento, había dos postes que sobresalían hacia el exterior.