Después de dar el último golpe a la bestia de nivel rey y completar la misión, Quinn no tuvo mucho tiempo para revisar las recompensas ni ver lo que había obtenido.
Estaba el problema con Fex, y poco después también aparecieron los viajeros.
Parecía que el grupo tenía un problema tras otro. Poco después de ver a los viajeros, supo al instante cómo reaccionarían al ver a Fex. Era difícil para ellos siquiera explicarse fuera de la situación, ya que Fex los estaba atacando también en ese momento.
Sin embargo, Quinn sintió que tenía una forma de resolver su problema actual, solo que no tenía mucho tiempo para actuar. Durante la pelea con la bestia de nivel rey, no había hecho esta acción porque necesitaban a Fex en la forma de chupasangre. Pero Quinn todavía tenía el frasco que Fex le había dado.