Chapter 89: UNA LUZ AL FINAL DEL TÚNEL.

Hoy ha sido un bonito día estuvo lloviendo estos días y Ernesto solo pasa rápido saludando a Denia y le pasa dejando pan dulce que compra cuando sale de trabajar y la verdad es que yo no quiero que pase a la carrera, necesito que pase con tiempo y se quede conversando por un buen rato con Denia, la razón de mi interés es que el es una parte muy fundamental en mi negocio, pero que negocio han de pensar pues la verdad es qué el dibuja muy bonito, sus dibujos casi tienen vida, cuando el está con Denia yo llego y me siento en medio de ellos y él para estar a solas con mi hermana Denia y que yo no les arruine su momento feliz me dibuja animales como: pajaros, perritos, gatos, peces, osos, flores 💐 y muchas cosas más, las cuales me manda a colorear, situación que es necesaria para mi negocio el cual descubrí por accidente, un día para mandarme políticamente a ver si la marrana ya había puesto huevos, se le ocurrió la grandiosa idea de ocuparme en algo y me dibujo por primera vez dos dibujos muy bonitos en diferentes páginas y me mando a darles color y entonces yo toda emocionada caí en su trampa y me fui y los deje solos cuando termine de colorear los dibujos ya era hora que Ernesto se fuera, le di las gracias y le dije adiós, luego guarde su arte y el mio en mi mochila 🎒 🙂, pensando en la sorpresa que se llevarían mis amigos y bueno el día terminó, le dije buenas noches a todos y me fui a dormir 😴, al día siguiente me desperté y me aliste como siempre para la escuela y me fui, cuando llegó el momento del recreo saqué los dibujos para enseñarselos a mis amigos pero para mi sorpresa otros compañeros comenzaron a preguntar que si eran míos a lo que conteste que si y luego otro dijo me lo vendes para dárselo a una niña y otros empezaron a decir lo mismo y pues al final pudo más el negocio que el desear guardarlos y pues se los vendí al que más pagó, me sentí triste al principio pero luego cuando me pude ir a comprar al chalet una pupusa y saborear lo sabrosa que estaba, la tristeza desapareció y mi pequeño cerebro empezó a cranear en conseguir más dibujos y venderlos y ahorrar y llenar mi pancita también porque la verdad esas pupusas están sabrosas y fue así como mi negocio empezó, ahora no soy yo la que cae en la trampa de Ernesto, según él piensa que es muy inteligente pero la verdad es que no es así ahora soy yo la que lo manipula, voy y me siento en medio de los dos desde un principio para que el crea que tiene que eliminar el estorbo, forma en la que obtengo más dibujos y pues cada vez me hace más porque yo regreso rápido, forma en la que le hago creer que el ha ganado pero la verdad es que me esta ayudando en mi negocio, pero con estas lluvias ☔️, casi pierdo mi negocio porque no hay un producto que pueda ofrecer, espero que hoy venga a ver a mi hermana ya extraño tener en marcha mi negocio.