Ya tenía 8 años de edad y eran tan astuta como mi abuela y había sacado algunas mañas de mi padre, de mi madre herede la desconfianza de alguien que fuera 2 caras, pero nunca pude saber si podía confiarme de mis 3 hermanos ya que mi hermana mayor siempre pasaba de mi y como ya era adulta simplemente me ignoraba, Leandro cuando no estaba en compañía de Marcelo era tranquilo y soñador pero los 2 juntos eran algo crueles y inventaba cosas extrañas, un día llegaron varias cartas y Marcelo se hizo cargo de recibirlas, yo leía algunos libros de mamá y no note que ambos me miraban con una risa curiosa, por el rabillo del ojo vi que eso leyeron una carta, quería preguntar pero opte por ignorarlos y seguir con la lectura; Ya que este libro de "flores medicinales" me daba curiosidad.
Pasaron las semanas y los gemelos hacían lo mismo, hasta que un día le pidieron a mamá permiso por que iban a pasear y querían llevarme a un lugar nuevo donde había una hermosa fuente; al principio mi madre se opuso ya que no quería que nada malo nos pasará a los 3, pero de tanta insistencia accedió y al siguiente día decidimos salir, me puse un lindo vestido la parte de arriba es beige y el vestido es amarillo claro, y con ese juego un sombrero beige oscuro con la cinta amarilla tipo lazo y mis zapatos negros, ellos vestían con unos pantalones negros con camisa crema y una chaqueta negra igual con sus zapatos negros.
Me dio curiosidad tanta elegancia por parte de ellos aunque no le di mucha importancia a ello, cuando ya estábamos retirados de la casa les oí hablar de chicas y se preguntaban de como sería su tía, ignore eso y sólo decidí ver las personas caminar a nuestro alrededor y a las chicas con sus hermosos vestidos y un lindo sombrero en la cabeza y sus zapatos algo altos, algunas con grandes chaquetas de cuero y sus guantes de cuero igual, me parecían tan elegantes y hermosas que pensé 'me encantaría ser como ellas', al llegar a la fuente era realmente hermosa veo como ellos se separan un poco de mi para ver una hermosa mujer de cabellos dorados hasta casi sus hombros estaba vestida con esas chaquetas largas negras y guantes blancos.
La mire fumar y ver como hablaba con mis hermanos hasta que Leandro me llamo, la mujer al verme note como su gesto cambio un poco de manera incomoda y luego parpadeando algo rápido dice
Mujer misteriosa: disculpa si te asuste es que me recordaste mucho a alguien.
Lógicamente mi curiosidad pudo más que yo y pregunte: ¿Puedo saber a quien?.
Mientras me mira fijamente dice en un tono de leve nostalgia: a mi madre.
Quise disculparme pero negó con la cabeza en señal de que no había problema alguno, esta mujer accedió a invitarme algo y conocerme mejor, siempre que preguntaba su nombre a mis hermanos optaban por cambiar el tema y eso me incomodaba mucho, pero no podía volver a casa sola.
La mujer que no me quitaba la vista pregunta: ¿Te incomoda algo?.
Cosa que tengo es que muestro muy fácilmente cuando algo no me da buena espina o me incomoda y eso pasaba con esta mujer, verla a ella era como ver que mi cuerpo me gritara "CORRE… ALEJATE DE ELLA" asentí y le dije
Yo: mis hermanos no me quieren decir tu nombre.
Ella para excusarlos me dice: puede que no te hallan oído nenita.
Cuando dijo esa última frase mi piel se eriza y me grita aún más que me aleje de ella, así que busco con la mirada a mis hermanos pero sin éxito, trato de calmarme y no entrar en pánico mientras me digo
Voz interior: 'cálmate Zafi, respira hondo ellos están cerca sólo que hay mucha gente'.
Eso hice respire hondo y fui buscando de nuevo sólo que está vez más lento y no tuve éxito, no me quedo de otra sino arriesgarme a irme sola, cosa que no era buena idea pero pedirle ayuda a esa mujer que a un no sabía ni su nombre era como tentar a la suerte.