Una vez que vuelvo, tengo un montón de cosas que explicar y hacer presentaciones.
A las que traigo del mundo de Overlord, tengo que enseñarles como es la vida en Edén.
A las residentes de Edén, les hago las presentaciones adecuadas y después les cuento a todas sobre la nueva mazmorra creada, que es todo el mundo de Yggdrasil, donde pueden entrenar para subir de nivel y ganar experiencia.
Las chicas que estaban en las camas después de haber estado conmigo en las sesiones de sexo empiezan a despertar y también las ayudo a integrarse en Edén.
Tengo que usar varios cientos de mis cuerpos para hacer los procesos de bienvenida.
Albedo, Rubedo, Nigredo, las demás guardianas de Nazarick y las demás mujeres poderosas de Overlord, están entusiasmadas con la idea de poder ser madres de mis hijas si logran vencer en el torneo y despierta en ellas el espíritu competitivo, casi no pueden esperar para irse a la mazmorra recién creada con el mundo de Yggdrasil.
Solamente mi promesa de hacerlas mis mujeres esta misma noche, las mantiene esperando sin irse a entrenar, sin despegarse de mi lado para que no se me olvide.
Puedo ver cómo las tres hermanas están temblando por la excitación, en especial las alas de Albedo.
Arche confirma que sus hermanas están bien y que además de ellas hay una gran cantidad de otras niñas, entre las que se encuentran mis propias hijas aunque son todavía muy jóvenes.
Tira, también se encuentra con sus dos hermanas Tina y Tia y veo que son prácticamente iguales, aunque yo con mi visión divina no tengo problemas para diferenciarlas.
Las sirvientas de Nazarick tienen una pequeña discusión con las elfas domésticas y se ven obligadas a olvidarse de las tareas de limpiezao cualquier otra tarea de cualquiera de las instalaciones de Edén.
Hablo con ellas, las 41 doncellas y les digo que pueden dedicar su nueva vida a lo que deseen hacer, y que no tienen que ser doncellas. Pueden entrenar, estudiar y hacer las mismas actividades que cualquier otra de mis mujeres en Edén, también pueden ir a las escuelas y cuidar de la gran cantidad de niñas.
Crusch Lulu está un poco perdida y preocupada desde su llegada a Edén, ya que ha sido la única de su especie en venir conmigo.
Los elfos, vampiros, y otras guardianas de Nazarick aunque no sean humanas, tienen apariencia humanoide, pero ella tiene más la apariencia de un reptil.
Al dar una vuelta de reconocimiento por Edén, puede ver a mujeres de diferentes razas, algunas con rasgos muy diferentes de los humanos, y esto la hace pensar que podría tener una relación conmigo.
Se acerca a mí y me pregunta si estoy interesado es ella como mujer y si quiero tener crías con ella.
Las mujeres a nuestro alrededor más veteranas, se ríen y le dicen que si no tuviera planes para ella, no la habría traído a Edén, que no hay problemas con las diferentes especies, que como puede ver hay diferente razas y con las que tengo hijos. (ejm las centaurides)
También le dicen que para poder tener crías, tenía que ganar el torneo o hacer algún acto excepcional que gane mi favor.
Su blanca piel se pone bastante sonrojada y empieza a golpear el suelo con su cola.
Por la noche, con un poco de magia temporal para darle a cada una su momento de intimidad, tomo las virginidades de todas las dispuestas e interesadas que cumplen con los requisitos de edad para dichas actividades.
Es una noche realmente intensa y emocionante para muchas, para mí también es muy divertida, descubro el lado lascivo de las mujeres de Nazarick.
También dedico tiempo con miles de mis cuerpos para amar y satisfacer a mis demás mujeres.
Crusch Lulú asociaba el sexo con la reproducción, pero durante esta noche le enseño que también se puede tener sexo por puro placer, para satisfacerla adecuadamente adopto la forma de un hombre de su especie.
Como el viaje ha sido corto y la vez anterior que realicé la invocación fue una invocación múltiple, aún no tengo la opción disponible en el sistema.
Casi todas las recién llegadas que tienen edad suficiente, se han convertido oficialmente en mis mujeres en cuerpo y alma.
Todas sin excepción han pasado por el proceso de bienvenida y salvo algunas excepciones que tienen que permanecer un tiempo en reclusión, hasta que aprendan a vivir en comunidad, la mayoría ha empezado a vivir en Edén y hacer uso de las diferentes instalaciones.
Es muy divertido enseñar a las que nunca han visto un cuarto de baño moderno, las virtudes de un jacuzzi o una ducha de hidromasaje.
Las que peor la han llevado, son las mujeres que provienen de la Teocracia, ya que tienen muy arraigada la idea de la supremacía humana y la discriminación a las demás especies y razas.
Paso un mes entero sin notificaciones, ni tampoco ninguna misión, simplemente disfrutando de la vida en Edén, mis primeras hijas han empezado a decir sus primeras palabras y se me ha caído la baba literalmente cuando las escucho decir papá en lugar de mamá, por mucho que sus madres y las otras madres les piden que digan mamá.
Me ha emocionado tanto que organizo una gran fiesta para celebrar el acontecimiento.
La fiesta ha durado todo el día y por la noche una vez que se acostaron todas las niñas y mando a la cama a todas las menores de edad, (las que aún no tienen edad para sexo) da comienzo la segunda parte de la fiesta, con una orgia a gran escala que prácticamente incluye a todas las mujeres de Edén, de todas las razas.
Las chicas que tienen familia o amigos en Beta, van allí de vez en cuando para verlos cruzando los portales permanentes entre los dos mundos, aunque solamente las mujeres pueden usarlos, si alguien que no es de Edén trata de entrar, no lo consigue, sale nuevamente por el portal que ha entrado.
Después de este mes de vida reflejada y feliz, tengo activa nuevamente la invocación.
Voy a la zona especialmente diseñada para este propósito y activo la invocación normal.
Se abre la grieta espacial de costumbre y únicamente veo aparecer a una mujer desnuda.
Tiene el pelo moreno y un cuerpo muy bien dotado, en especial la parte delantera, se aprecia que tiene un cuerpo bien tonificado, con abdominales marcados, y algunos músculos en brazos y piernas, de haber practicado algún tipo de deporte o entrenamiento.
Su cuerpo ya ha pasado su mejor momento y su edad está más cerca de los 50 que de los 40, al ver sus detalles con una mirada divina, veo que ciertamente tiene 46 años, aunque bien mantenidos.
Su nombre es Shannon Claire Spruill, aunque a su lado aparece su nombre artístico, 'Daffney Unger' y su profesión aparece como luchadora profesional.
Al encontrarse en un lugar que no conoce, frente a un desconocido y totalmente desnuda, no se sorprende ni se asusta, ni siquiera se cubre.
Recuerda perfectamente que se ha suicidado y asume que a llegado al cielo o a algún lugar de la otra vida.
"¿Eres dios?, eres más guapo de lo que me imaginaba y más joven. Pensé que serias un viejo amable con una larga barba blanca y una túnica blanca." (Daffney)
"Ciertamente soy un dios, pero creo que la imagen que tienes en mente se corresponde más con Gandalf o con Dumbledore, que con cualquier dios que conozco." (yo)
Al darse cuenta de que puedo leer sus pensamientos, me pide perdón porque estaba pensando en varias cosas que le han venido a la mente al verme y hacerle efecto mi encanto.
"No tienes que disculparte, en primer lugar me gustaría presentarme. Mi nombre es Pedro, soy un dios y soy el dueño de este mundo, llamado Edén, que será tu hogar desde ahora." (yo)
"Si eres un dios, supongo que ya sabes todo sobre mí, mi vida y mis circunstancias, así que no se si necesitas que me presente o algo así." (Daffney)
"Es cierto que conozco parte de tu existencia, aunque no en detalle, ya que no soy tu dios creador y tampoco estoy pendiente de todo lo que sucede en los infinitos universos, así que me gustaría escuchar directamente de ti." (yo)
"¿Hay más dioses aparte de ti?" (Daffney)
"Si los hay, aunque no todos son igual de poderosos, tampoco conozco a todos, aunque hay unas cuantas diosas viviendo en Edén y pronto las conocerás." (yo)
"Estoy deseando hacerlo, aunque espero poder llevarme bien con ellas." (Daffney)
"No tengo muy claro, si prefieres que te llame por tu nombre de pila o por tu nombre artístico, lo dejo a tu elección. Se que te preocupa el pasado o lo que pasó en tu otro mundo, pero te aseguro que para mí y las demás habitantes de Edén, lo importante es que seas feliz desde ahora y como quieres vivir a partir de ahora." (yo)
"Daffney está bien, ya que empiezo una nueva vida y no importa el pasado, prefiero usar ese nombre." (Daffney)
La entrego una poción de bienvenida y la llevo a una de las habitaciones preparadas para que el proceso sea lo menos desagradable posible.
Después de terminar, la limpio y la pongo mi anillo en su dedo anular.
Justo en ese momento ha visto su reflejo en un espejo y puede ver cómo ha recuperado su juventud.
Salta sobre mí y usando sus técnicas de lucha me intenta inmovilizar mientras me da las gracias y al mismo tiempo trata de quitarme la ropa.
La termino Inmovilizando yo contra la pared del cuarto en el que estamos y le digo al oído.
"Ya eres mi mujer, desde el momento que llegaste a mi mundo, si quieres tener sexo conmigo, solamente tienes que pedirlo, aunque también me gusta este lado salvaje." (yo)
Mi ropa desaparece y restauro su cuerpo antes de empezar a follarla contra la pared con gran ferocidad.
Está encantada de este sexo duro y sin ningún tipo de delicadeza o piedad.
Cualquiera que nos viera ahora pensaría que la estoy violando, al menos hasta que viera su cara de gozo y escuchara sus gritos pidiendo más, más fuerte y más rápido.
La follo por delante, por detrás disfrutando de sus regordetas nalgas, Follamos a cuatro patas, y de todas las formas que se nos ocurren.
Su estrecho culo tampoco se libra de mi ataque, aunque parece no ser un problema para ella.
Durante casi tres horas tenemos sexo, que podría confundirse con algún tipo de lucha libre sexual.
Mientras descansa de la 'pelea' le cuento un poco sobre Edén, sus hermanas, las distintas posibilidades que tiene de formación o entretenimiento y también acerca de mis habilidades, entre las que se encuentra el sistema de niveles al que ahora está vinculada para hacerse más fuerte si quiere.
Una vez que ha descansado suficiente, esta limpia y vestida, la llevo a dar una vuelta por su nuevo hogar y presentarle a su nueva familia numerosa.
La invocación del huevo aún no está disponible, le faltan unos días para estar completamente cargado, supongo que voy a hacer un pequeño viaje y después ya haré esa invocación.
Se que hay bastantes mujeres que quieren venir conmigo a mis viajes, pero por el momento voy a irme yo solo, no se muy bien a que mundo voy a ir, ya que me ha gustado la opción de ir a un mundo aleatorio.
Aún con mi pensamiento de ir solo, veo correr en mi dirección a una de las tres Alice Cullen a toda velocidad con una sonrisa en su rostro.
Es realmente impresionante la capacidad que tienen de ver el futuro.
Espero a que llegue a mi lado antes de cruzar el portal que acaba de abrirse ante mí.
Me agarra el brazo entre sus pechos y me sonríe diciendo.
"Sabía qué me esperarías, pero gracias de todas formas." (Alice)
Cruzamos el portal y aparecemos en medio de una ciudad de mediados del siglo XVIII, el mapa nos ubica en París.
El mal olor nos invade las fosas nasales inmediatamente, lo que soluciono creando una pequeña barrera de aire a nuestro alrededor, con un ligero aroma floral.
Se puede ver en las calles atestadas de gente, una clara falta de higiene.
Alice casi vomita antes de crear la pequeña barrera de aire a nuestro alrededor.
No estoy seguro de que mundo es nos encontramos en la actualidad, pero hasta que lo descubra vamos dando un paseo por las calles de la ciudad.
En un primer momento, viene a mi cabeza cierto musical llamado 'Los Miserable' pero buscando con mi percepción no encuentro a nadie del elenco protagonista y si no me equivoco, nos encontramos en un momento histórico un poco más avanzado, aunque no demasiado, sólo un par de décadas.
Paseamos por la ciudad sin descubrir que mundo es, durante un par de horas e incluso hemos eliminado a varios idiotas que tienen malas intenciones para Alice o para los dos.
Durante este tiempo en el que Alice siente que está en una cita romántica, aprovecho para esclavizar y llevar a Edén a varios cientos de niñas y mujeres jóvenes que considero hermosas, que ciertamente habrían tenido un destino trágico en este mundo.
En la sociedad actual la información es mucho más lenta y las desapariciones pasan bastante inadvertidas, hasta cierto punto.
Como hay mujeres de familias ricas, nobles y aristocracia implicadas en las desapariciones, la guardia de la ciudad se movilizará pronto.
Cuando voy a llevarme a Edén a una mujer joven, que tiene el pelo pelirrojo rizado y lleva una cesta con ciruelas, me doy cuenta del mundo en el que estamos.
Detrás de la joven mujer, hay un chico de unos quince años, siguiéndola por su aroma, se trata de Jean Baptiste Grenouille, el asesino psicópata obsesionado con hacer un perfume con las esencias de las mujeres que mata.
Estamos en el mundo de <El Perfume> de 2006 aunque su nombre original es <Perfume: The Story of a Murderer>.
Realmente compadezco a este chico de 15 años, es un chico que ha vivido sin afecto o amor toda su vida y su don de oler todas las cosas, solamente lo ha aislado más en la sociedad, haciendo que sea una persona fría y sin sentimientos, que no le importa matar para obtener lo que quiere.
No voy a ser hipócrita, ya que también mato o hago cosas peores para obtener lo que quiero, yo tengo sentimientos y soy plenamente consciente de lo que hago y tengo mis motivos, pero este chico tiene mala suerte toda la vida.
Me compadezco un poco de su pasado y aunque creo que es una molestia para el futuro voy a darle una oportunidad.
Le seguimos hasta que llega a donde está la mujer de las ciruelas y después que ella le descubre oliendo su cuerpo, grita.
Él le tapa la boca y la nariz con las manos. Es mucho más fuerte que la chica, ya que lleva trabajando como un esclavo en la curtiduría de pieles, durante años y tiene una buena musculatura para su edad.
Antes de que la asfixie, Alice y yo nos acercamos y le digo con voz autoritaria.
"Suéltala." (yo)
Veo que la chica que se llama Nadine y tiene un brillo de esperanza en los ojos, al darse cuenta de que alguien ha venido a ayudarla en este momento que su vida está en juego.
Asustado de haber sido descubierto y sin notar nuestro olor gracias a la barrera de aire que nos rodea, Grenouille aprieta aún más la cara de la joven Nadine.
Doy un paso rápido que me pone frente a él y le doy un golpe en el cuello, lo que le hace caer al suelo desplomado junto con Nadine a la que sostenía y casi asfixia.
Lo elimino de una manera indolora, aunque no me olvido de usar la habilidad de depredador sobre él, mejorando mi sentido del olfato.
Antes de que Nadine caiga al suelo, la sostengo entre mis brazos.
Esta tosiendo y recuperándose de la falta de aire que casi la mata hace unos instantes.
El cuerpo sin vida del protagonista de este mundo yace en el suelo junto a nosotros pero no me afecta en absoluto.
Una vez que parece haberse recuperado un poco Nadine, la dejo bajar de mis brazos mientras me da las gracias.
Doy una pequeña voz llamando a la guardia que esta en las calles cercanas y junto a una pareja que acaba de salir el edificio de encima, se acerca a ver que ha pasado y por qué motivo llamo a la guardia de la ciudad.
Al ver mis ropas limpias y las de Alice que también están limpias, los guardias nos toman por nobles o ricos y nos tratan con respeto.
Les informo de lo sucedido, que este joven estaba agrediendo a la señorita pelirroja, que iba a matarla asfixiándola y cuando lo traté de detenerlo, le golpeé en el cuello y creo haberlo matado.
Le preguntan a Nadine, ya que es la persona implicada si eso es lo que ha ocurrido y también le preguntan a la pareja que ha visto los últimos momentos de Jean Baptiste Grenouille.
Nadine y la pareja les dicen que es cierto lo que digo y que ha sido así como ha pasado.
Los guardias rápidamente se llevan el cadáver, sin muchas preguntas, debe ser bastante normal encontrar cadáveres y la pareja se marcha a seguir con sus ocupaciones, dejándonos a los tres allí.
Nadine ahora recuperada nos da las gracias por haberla salvado y trata de ofrecernos lo poco que tiene en gratitud.
Le acepto una ciruela como pago y después Alice y yo vamos a retirarnos, pero antes de irnos fuera de la visita, me paro, me doy la vuelta y la digo.
"Me gustaría que me acompañara señorita. Si esta interesada en seguirme, puedo garantizar su seguridad y su sustento, aunque la paga no es muy alta, tampoco voy a obligarla a hacer nada que no quiera." (yo)
Durante unos instantes no responde, esta pensando en lo que puede pasar tanto si acepta mi oferta como si no.
Está mirando a Alice de arriba a abajo y también a mí, con gran atención a nuestras miradas y expresiones.
Ver que Alice es una belleza y que no la estamos mirando con desprecio o lujuria, la hace pensar que hoy puede ser un gran día de suerte, a pesar de que casi muere hace un rato.
"Bienvenida, te aseguro que no te arrepentirás de esta decisión." (Alice)
"Es un honor estar a su servicio, mi nombre es Nadine, me esforzaré toda la vida para mostrar mi gratitud." (Nadine)
Alice la atrapa un brazo y rápidamente la sujeta con gran familiaridad, como si fuera una amiga de toda la vida y se pone a hablar con ella.
"Soy Alice y el hombre que te ha salvado es Pedro, no tienes que preocuparte por nada, ahora que has decidido venir con nosotros, todos tus problemas y preocupaciones se han terminado, puedes considerar que eres parte de nuestra familia." (Alice)
Me acerco al lugar en el que estaba antes Nadine y agarro su cesta de ciruelas.
Las dos me miran para ver que hago.
"Sería un desperdicio dejar esto aquí, además estoy seguro que tu fruta es jugosa y deliciosa, sin haberla probado todavía." (yo)
Alice se ríe por mi comentario, ya que sabe que me refiero a otra fruta y Nadine que siendo inocente, me responde.
"Son simplemente ciruelas normales, aunque están jugosas y son deliciosas en esta época." (Nadine)
"Tienes razón Nadine, es el momento perfecto de recolección, la fruta ha madurado perfectamente." (yo)
Ya es un poco tarde y debemos buscar un lugar donde dormir.
Durante unos minutos andamos por la ciudad y Nadine nos pregunta por nuestros antecedentes.
Decido decirle la verdad desde el principio pero poco a poco.
"¿Crees en dios y en los milagros? (yo)
Un poco asustada por mi pregunta, piensa que soy parte de la iglesia o algo así y que puedo estar probando su fe.
"Creo en la existencia de dios, aunque nunca vi un milagro como los que dice el obispo y las personas de la iglesia." (Nadine)
Me acerco a su oído despacio y le digo en un susurro.
"Quiero que no te asustes y que mantengas esto que te voy a decir en secreto. Yo soy dios, aunque no el dios que crees que existe o el que dice la iglesia." (yo)
En este momento, Nadine se detiene y se tapa la boca, no sabe cómo reaccionar a mis palabras.
Para demostrar que soy un dios, la ciruela que me dio antes y está en mi mano, se la muestro y ante sus ojos se empieza a multiplicar, primero en dos, luego en cuatro, en ocho y así hasta llenar la cesta que recuperé antes.
Está a punto de arrodillarse, pero Alice la detiene y le dice que no es necesario.
Vamos a una posada cercana, aunque Nadine está todavía asimilando en lo que se ha metido, con incredulidad, de hecho, de vez en cuando la veo pellizcarse el brazo para confirmar que no es un sueño.
Justo después de esos momentos, le sostengo el brazo y la restauro totalmente para eliminar cualquier afección de su cuerpo, incluyendo el dolor de pellizcarse.
La posada en la que entramos, es supuestamente la mejor de la zona, aunque deja mucho que desear, la atención es pésima, las habitaciones son pequeñas, huelen mal y las camas están sucias y llenas de piojos entre otros seres vivos desagradables.
Tengo miedo de hacer un área de limpieza, ya que podría desaparecer la ciudad literalmente si lo hago del tamaño adecuado, pero lo que estoy seguro, es que la posada lo hará.
Antes de usar cualquiera de los muebles de la habitación que hemos reservado, les digo a las dos que no vamos a pasar ni un solo instante más en este lugar y que nos vamos a las afueras de la ciudad.
Hago un portal en medio de la habitación, Alice lo cruza sin miedo, pero Nadine se queda paralizada.
Agarro a Nadine, la sostengo como una princesa en mis brazos antes de cruzar también el portal.
Hemos aparecido cerca de la ciudad de Grasse, al sur de Francia, la ciudad principal de la historia de este mundo. Aunque ya no está el protagonista, creo que voy a visitar a las mujeres que habría visitado en el futuro para obtener su esencia.
Saco de la tienda una cabaña nueva, para vivir en este mundo, con todos los lujos y comodidades incorporadas.
Dejo que sea Alice la que muestre a Nadine los pequeños lujos y beneficios de la vida moderna, en especial en el aseo y el cuarto de baño.
Preparo una buena cena mientras las dos están hablando en privado.
Nadine ya estaba esclavizada antes de nuestra reunión, ya que tenía intención de llevarla a Edén cuando descubrí cual era el mundo en que estamos.
También su cuerpo está restaurado y libre de cualquier enfermedad o dolencias que tenía en el pasado, únicamente le falta una correcta higiene para estar deslumbrante.
Una vez que descubre guiada de Alice, los usos y posibilidades del cuarto de baño, las dos tardan casi dos horas en volver.
Durante este tiempo, se han dado un relajante baño en el jacuzzi, se han peinado y se han vestido con un par de hermosos vestidos de noche antes de venir a cenar.
Alice igual que siempre está preciosa y detrás de ella viene un poco avergonzada Nadine, que su cara está tan roja como su pelo.
Aún no ha tenido su proceso de bienvenida y su belleza no llega al nivel de Alice, es otro tipo de belleza más humana.
Las tomo de la mano y las ayudo a sentarse a la mesa para cenar, una a cada lado.
Se disculpa por hacerme esperar y me da las gracias por todo lo que hemos hecho por ella hasta ahora.
Es una cena normal para nosotros, pero para ella es un banquete mágico y maravilloso, lleno de sabores que no conoce y también es la más deliciosa y abundante que ha tenido hasta ahora en su vida.
Después de cenar, vamos al salón, nos sentamos a ver una película en un cómodo sofá y Alice se tumba poniendo la cabeza en mi regazo como si fuera un gatito.
Nadine se sienta a mi otro lado y juntos vemos la película, El Perfume, en la que ella misma se ve morir a manos de Jean Baptiste, también ve la larga y dura vida del hombre y el asesinato de muchas otras mujeres.
Ahora está firmemente convencida que soy dios y que hemos venido desde el cielo para salvar su vida.
Después de ver la película, Alice me dice que no la haga esperar demasiado y me llevo en brazos a una muy avergonzada Nadine al dormitorio.
La dejo suavemente sobre la cama y detengo el tiempo fuera de la habitación, para que Alice no tenga que esperar.
Le quito lentamente el vestido y le beso en los labios mientras acarició sus tiernas y pequeñas tetas.
Cuando tenga el proceso de bienvenida, estoy seguro que crecerán un poco y también ganará algo más de masa corporal, ya que actualmente está algo desnutrida.
Sin muchos juegos previos y ella totalmente preparada para este momento, me abre las piernas y me ofrece con devoción su delicada y deliciosa fruta prohibida.
Hago el amor con ella durante más de una hora, después la dejo dormir, antes de limpiar la habitación y devolver el tiempo a la normalidad para que Alice venga a dormir a nuestro lado.
Por la mañana, la dejo seguir durmiendo hasta que ella misma se despierte de forma natural.
Alice tampoco está dormida, siendo un vampiro no necesita dormir, pero pasar la noche junto a mí es más agradable.
Los dos nos levantamos y dejamos a Nadine sola en la cama.
Preparamos el desayuno y hablamos durante un rato, mientras esperamos a que se despierte la bella durmiente con los primeros rayos de sol de la mañana.
Nadine se despierta en una cama suave y desconocida, con un techo que no le resulta familiar.
Se pregunta dónde está, pero poco a poco llegan a su memoria todo lo que sucedió ayer, en especial lo último que ocurrió antes de dormir.
Al ver que está sola en la cama, se asusta pensando que le hemos dejado atrás y nos hemos marchado sin ella.
Sale de la cama, se pone algo de ropa y sale de la habitación para buscarnos.
Nos encuentra en el salón hablando, esperando a que venga para desayunar todos juntos.
Suelta un suspiro de alivio y arreglando un poco la ropa que lleva puesta, se sienta con nosotros a la mesa para desayunar.
Se disculpa por hacernos esperar, lo que hace que Alice se ría y le diga que no tiene importancia.
Después de desayunar, le explico sobre el proceso de bienvenida, con todo lo que supone y sus efectos inmediatos.
Sin poder esperar y preguntándome porque no lo hice ayer, me lleva a rastras hasta el cuatro de baño.
Después de todo el proceso, la limpio y le pongo el anillo en su dedo, haciendo que sea una mujer muy feliz.
La empujo contra la pared y tenemos sexo otra vez.
Esta vez aguanta bastante mejor que anoche y su agujero anal también es expandido y abusado hasta que se adapta totalmente a mi pene.
No dejo a Alice esperando, con otro cuerpo la llevo hasta el sofá, donde también tengo sexo con ella, aunque mucho más salvaje y desenfrenado.
Durante el sexo con Alice, aprovecha para morder mi cuello y beber mi sangre, lo que la hace entrar en frenesí.
Pasado el medio día, estamos los tres desnudos tumbados sobre el sofá del salón, disfrutando del placer de la compañía y el contacto de nuestros cuerpos.
Se que algunos hombres se están acercando a nuestra cabaña, que ha aparecido en medio del campo cerca de la ciudad.
Estamos el los límites del campo de flores moradas muy fragantes llamada lavanda, no estamos encima del campo de flores, pero estamos justo en el límite.
Los campos están compuestos de hileras ordenadas de arbustos de flores moradas, es una vista muy bonita y el aroma es muy agradable.
Llegan tres hombres a caballo frente a la cabaña para investigar, ya que ayer no estaba ahí.
Intentan entrar pero no lo consiguen y por los cristales sólo se ve una ilusión, que muestra una cabaña de madera vacía por dentro.
Las chicas se levantan, limpio el área y las visto usando mis poderes con vestuario noble de la época y también me visto yo mismo con un elegante traje noble.
Cuando los tres hombres están apunto de marcharse para informar que la cabaña está vacía, los tres salimos y se asustan al vernos.
Piensan que somos fantasmas o algo similar.
Me presento como Pedro God un noble extranjero y presento a las dos como mis acompañantes.
Mientras me presento dejo salir una millonésima parte de mi aura lo que hace que se postren ante mí en una reverencia un poco forzada.
Con los tres hombres asustados como escolta, vamos hacia la ciudad, que está a menos de una hora andando.
Los tres nos han ofrecido sus caballos y son ellos los que van andando delante de nosotros mientras que nosotros vamos sobre sus caballos.
Los caballos están encantados de llevarnos a nosotros en lugar de a sus habituales jinetes y van felices moviendo sus colas.
Llegamos a la ciudad y somos escoltados hasta lo que podría considerar el consejo de gobierno de la ciudad.
Aunque las mujeres tienen que esperar fuera de la sala principal, no hay ningún problema y Alice se queda fuera acompañando a Nadine.
Entro en el salón donde hay dos docenas de hombres reunidos, la mayoría viejos con pelucas, pero también hay algunos más jóvenes.
Me preguntan quién soy y yo les respondo que soy un noble de otro país bastante lejos más allá de Europa y Asia.
Como su conocimiento de geografía es bastante escaso lo aceptan enseguida sin demasiados problemas.
Me preguntan que planeo hacer en su ciudad y les digo que simplemente planeo estar aquí durante una temporada de vacaciones, disfrutando del hermoso paisaje y de la tranquilidad de la ciudad.
Saco del bolsillo interior de mi chaqueta unos papeles que certifican mi pasaporte y mientras lo saco, también se mi cae de forma totalmente premeditada pero haciendo que parezca un accidente una cartera de piel de elaboración exquisita, de la que sobresalen cientos de billetes de banco y se escucha el tintineo de monedas.
Una moneda de oro traviesa, incluso se escapa y sale rodando por la habitación en el momento que la cartera toca el suelo.
Todos parecen encantados de mi presencia en su ciudad y me desean una feliz estancia.
Algunos de ellos, incluso me preguntan si tengo un lugar donde alojarme, invitándome a vivir en sus casas.
Uno de ellos viendo que los hombres a su alrededor, son como sanguijuelas en busca de mi dinero, me ofrece su hogar de forma totalmente honesta y desinteresada. Este hombre es Antoine Richis, el padre de Laura Richis, la última mujer a la que mata Jean Baptiste en la obra original.
Viendo su sinceridad, acepto su oferta, pero antes le informo que no viajo solo y que dos señoritas viajan conmigo.
Me dice que no es un problema, que él tiene una hija y seguramente puedan ser amigas.
Creo que ha malentendido totalmente la relación que mantengo con ellas, pero no me importa.
Veo que piensa que nos unen lazos familiares, aunque no son los que él cree. Piensa que los tres somos primos o algo así.
Después de terminar la reunión nos despedimos del alcalde y todo el consejo reunido.
Cuando salimos les presento a las dos, que para reforzar su creencia, las presento como Alice God y Nadine God.
Vamos en un carruaje hasta su residencia, que es un palacio con grandes jardines.
Durante el camino hablamos un poco y el nos habla de lo fantástico que es esta tierra y su gente.
Una vez que llegamos a su residencia, su hija viene, junto con algunos asistentes, vienen a recibirlo.
Parece que en este mundo, el efecto de la estadística encanto es más fuerte, incluso influye en la gente de alrededor.
Laura que venía a saludar a su padre, al verme bajar del carruaje, se queda paralizada y su cara empieza a tomar algún sonrojo.
Al ver que ayudo a bajar del carruaje a dos señoritas, por algún motivo y sin siquiera conocerme, siente un poco de envidia de las dos.
Saluda a su padre con un rapidez e inmediatamente le pregunta por mi identidad y el motivo por el que venimos a su casa.
Le explica brevemente lo que cree saber de nosotros y Laura parece entusiasmada con lo que escucha.
Antoine nos presenta a su hija Laura, aunque su presentación hace que Alice suelte una pequeña risita y que Nadine se sorprenda, ya que las presenta como mis primas.
Entramos en el hogar de los Richis y Laura insiste en que las dos vayan con ella, seguro que quiere saber sobre mi y hablar de temas de mujeres con ellas.
Yo me quedo hablando con Antoine sobre otros temas más aburridos.
Hablamos principalmente de la ciudad de Grasse, donde nos encontramos y sus perfumes.
Me han preparado una habitación para que use durante mi estancia en la ciudad y a las chicas las han acomodado en la misma habitación que a Laura por insistencia de ella.
Laura se ha enterado rápidamente por un descuido de Nadine, que no son mis primas realmente y ahora cree que son mis protegidas y que las adopte en la familia aunque no haya lazos sanguíneos.
Es bastante inocente, aún no ha cumplido 15 años, le falta una aproximadamente diez días para el feliz acontecimiento.
Siempre ha estado muy protegida por su padre, más aún desde que su madre murió hace algunos años, por causa de una enfermedad.
Lo primero que hago nada más entrar a la habitación que me han preparado es un área de limpieza y sustituir los muebles por otros iguales sacados de la tienda del sistema, en especial la cama.
La cama la cambio totalmente, pero la pongo un encantamiento para que si alguien la ve, piense que es la misma que había antes.
Me niego a dormir en una cama de esta época, aunque sea de la mejor calidad que disponen.
Durante la cena, padre e hija nos preguntan por nuestro equipaje y les respondo que hemos llegado antes que nuestro equipaje y que debería llegar mañana al amanecer a las puertas de la ciudad.
El señor Richis se ofrece para mandar a alguien a buscar a los que transportan nuestro equipaje a primera hora y le estoy muy agradecido, mientras tanto también me ofrece cualquier cosa que podamos necesitar.
Alice me pide mediante comunicación mental, que también haga modificaciones en sus camas y en su habitación.
Me burlo un poco de ella y le pregunto si tiene miedo de que le saquen la sangre los piojos.
Me dice que no tiene miedo, pero que le da mucho asco que su cama tenga vida.
Detengo el tiempo y voy a su habitación, cambio todos los muebles y las camas por otras exactamente iguales, pero nuevo y sin moradores indeseables.
Sus camas no les hago modificaciones como a la mía, porque seguramente Laura se tumbe o se siente encima de ellas en algún momento.
Durante la noche, las tres hablan hasta que a Laura le puede el sueño y se duerme.
Hablan sobre todo de mí y de su vida a mi lado.
Después de enterarse de como salvé a Nadine, la mente de Laura que solo tiene 14 años para cumplir 15, me ve como un héroe y un caballero andante como los de los cuentos de fantasía.
Durante la noche sueña que ella es una princesa y que vengo a rescatarla sobre un caballo blanco.
Por la mañana, soy el primero en despertar y ya tengo preparado con otro de mis cuerpos un carro que transporta una gran cantidad de equipaje, digno de un noble de la época.
Alice tampoco está dormida pero tiene que quedarse en la cama, ya que las otras dos han invadido su cama por la noche y la están abrazando.
Habla conmigo mediante telepatía y yo me estoy riendo de su situación.
Voy hasta la terraza que da al jardín y allí me acomodo en una silla que hay mientras disfruto de las vistas y la conversación con Alice.
El siguiente en despertarse es el señor de la casa, que se sorprende de encontrarme despierto.
Enseguida organiza a varios hombres para ir a buscar mis pertenencias y poco después vienen escoltando el carro lleno de baúles y maletas.
El desayuno es bastante sencillo una vez que las chicas se despiertan y veo rastros de adoración en los ojos de Laura.
Durante los días siguientes, vienen al palacio varias familias nobles, altos cargos de la ciudad y dignatarios, para saciar su curiosidad y también aprovechan para presentarme a sus hijas.
Las que más llaman mi atención son dos gemelas, que también habrían sido víctimas del perfumista.
Se llaman Albine y François, nada más verme, se han presentado de forma muy educada y nerviosa y se llevan a rastras a Laura para que les cuente los detalles sobre mí.
Durante estos días también visito, marco y esclavizo a todas las niñas y mujeres hermosas de la ciudad, entre las que se encuentran las que habría matado Jean Baptiste para hacer el perfume.
Las gemelas han pedido a su familia quedarse en el hogar de los Richis con Laura hasta el día del cumpleaños de Laura.
Los padres se lo han permitido y Antoine no ha puesto ningún problema.
Las chicas han decidido trasladarse a una habitación más grande donde las cinco van a dormir juntas.
Han decidido juntar cinco camas en una habitación y hacer una única cama grande para las cinco.
Alice vuelve a pedirme que limpie la habitación y cambie las camas por unas nuevas.
Además en el equipaje que llegó, hay varios edredones nórdicos de plumas, con el que las chicas están encantadas por su suavidad y lo bien hecho que está.
Estos días también hemos recorrido la ciudad y sus alrededores, conociendo sus gentes y sus modos de vida.
Durante una de las comidas, los siete juntos en la mesa, me preguntan si estoy casado.
Les respondo que todavía no estoy casado en este mundo.
También dejo caer una pequeña bomba, diciendo que es habitual en mi tierra, que un hombre tenga varias esposas, mientras pueda mantenerlas adecuadamente y amarlas por igual.
Esto molesta un poco al señor Richis, ya que no está acorde a lo que dice su iglesia.
Pero también veo expectativas e interés en las tres jóvenes que aún no son mis mujeres.
Las chicas que están muy interesadas, me preguntan por lo que se considera adecuado para mantener una o varias mujeres.
Las digo que el marido debe mantenerlas felices, garantizar su bienestar, su seguridad, así cómo todo aquello que requieran, ya sea para su formación intelectual, como su ejercicio físico y entretenimiento.
Los ojos de las tres y del propio padre de Laura se abren de asombro cuando también les digo que se ha llegado a pagar de dote, el peso de la prometida en oro puro y que yo estaría dispuesto y encantado de entregar esa dote si mi futura o futuras mujeres así lo desean.
Antoine me dice que no diga eso demasiado alto o todos los hombres de Francia, harán fila para venderme a sus hijas o incluso a hermanas y sus mujeres.
Él solamente quiere un hombre que haga feliz a su hija y que cuide de ella.
El está pensando en un conde que ha mostrado su interés en ella, pero con mi llegada se lo está volviendo a plantear y ya no lo tiene tan claro.
Lo decidirá después del cumpleaños en un par de días.
Durante la puesta de sol, el día antes de su cumpleaños, me quedo solo por pura coincidencia con Laura en el jardín, mientras su padre ha ido a hacer algunos preparativos de última hora y las gemelas se han llevado a Alice y Nadine para hacerles algunas consultas de mujeres.
Al darse cuenta de que se ha quedado a solas conmigo por primera vez desde que llegué a esta casa, se ha puesto muy nerviosa.
Le pregunto para romper el hielo y así quitarle el miedo a hablar conmigo a solas.
"Si se te diera la oportunidad de pedir un deseo a dios y supieras que te lo va a conceder, ¿Qué pedirías?, si no te da vergüenza decirlo." (yo)
Se me queda mirando por la pregunta extraña que acabo de hacerle, pero después de unos minutos de silencio, me responde.
Seguramente le pediría que me traiga a mi madre Thérèse de vuelta, la echo mucho de menos.
"Es realmente curioso, me agrada mucho tu deseo, y por ser mañana tu cumpleaños, te voy a contar un secreto, pero no sé lo puedes decir a nadie." (yo)
"Lo prometo, no se lo contaré a nadie jamás." (Laura)
"Soy un dios y voy a cumplir tu deseo." (yo)
Se enfadada porque cree que me estoy riendo de ella cuando ella está hablando en serio y en ese momento, hago un viaje al pasado para buscar a su madre con otro de mis cuerpos y la traigo al presente justo delante de sus narices.
Me aseguro de sanar su enfermedad para que no vuelva a morirse, restaurando su cuerpo casi completamente.
Es una mujer promedio, que no cumple exactamente con mis expectativas de belleza, así que no la voy a llevar a Edén como mi mujer, pero les ofreceré a los Richis que vengan a Beta, mientras que me llevaré a Laura a Edén.
Le explico lo que acaba de ocurrir a las dos y dejo que las dos se abracen y tengan un emotivo encuentro.
Cuando veo que se está acercando su padre de vuelta, les digo a las dos que el tiempo se ha terminado por el momento y que más adelante podrán volver a verse y tras una rápida despedida, capturo a Thérèse y un momento después llega Antoine para avisarnos que la cena ya está preparada y las demás ya están esperando.
Nos disculpamos por hacerles esperar, mientras Laura no me quita los ojos de encima.
Tiene muchas preguntas y que yo sea un dios, la pone especialmente nerviosa.
También se pregunta si Alice y Nadine lo saben o no, pero no puede preguntárselo sin incumplir su promesa.
Todos durante la cena, notan sus nervios y la forma extraña en la que me mira durante la cena.
No me mira con miedo, más bien con adoración y expectativas, por lo que su padre no se preocupa demasiado, cree que su hija se ha enamorado de mí.
También está mirando a Alice y a Nadine para intentar sacar algo de información sobre mí, pero no logra nada.
Por la noche, antes de irse a la cama, le digo a Alice que le diga algo, ya que esta muy nerviosa y no va a poder dormir.
Alice le dice algo y se pone tan roja como su cabello, pero parece más tranquila.
Las dos gemelas al ver cómo reacciona, se sienten muy curiosas y van a interrogarlas durante toda la noche.
Es la noche antes de su cumpleaños, así que van a tomarlo como si fuera una fiesta.
Al final le doy permiso para que les cuente a las tres quien soy, y que voy a pedirles a sus padres su mano en matrimonio, dando como dote sus pesos en oro.
Las cinco pasan la noche hablando y por la mañana veo que las tres más jóvenes tienen algunas ojeras de no haber dormido en toda la noche.
Le entrego a Alice durante el desayuno tres pociones de bienvenida para que se las dé a las tres, para que se preparen antes de la fiesta.
Las tres ven que se lo estoy dando y están ansiosas de pasar por el proceso de purificación, ya que han escuchado los efectos durante la noche.
Solamente están algo preocupadas por la expulsión de las impurezas.
Alice y Nadine se las llevan al aseo y las tranquiliza diciéndolas que yo me encargo de todo aunque no esté presente.
Las tres pasan por el proceso y cuando terminan, las limpio, aunque no de forma remota como dice Alice, ya que estoy presente siendo invisible en el mismo lugar viendo como reaccionan.
Alice al ver que quedan limpias sin necesidad de decirme nada, lo sospecha, pero no está totalmente segura, ya que cualquier rastro mía está oculto.
Las tres que pasan por el proceso de bienvenida, están encantadas, su piel es más suave que nunca, aunque como son muy jóvenes no hay cambios demasiado aparentes, como la eliminación de arrugas.
Aprovecho para restaurar sus cuerpos totalmente, aunque las tres son vírgenes, no esta de más, eliminar cualquier tipo dolencia que pueda tener el cuerpo.
Han visto que Alice tiene algunos vestidos muy bonitos y que la ropa interior que usa es mucho mejor, más cómoda y más bonita que la que usan ellas y le han pedido a ver si puedo hacer algo para ellas, pero les da vergüenza pedírmelo a mí directamente.
Sin necesidad que me lo pida, hago aparecer frente a cada una de las cinco, un juego completo de ropa y también una pequeña botella de perfume, algunas joyas, collares, pendientes y pulseras.
Las gemelas van completamente iguales salvo el color de las joyas.
Las cinco parecen princesas de cuento de hadas, van a hacer a los hombre babear y a las mujeres tener mucha envidia.
Una vez que se han vestido, aparezco frente a las tres con tres anillos flotando en el aire y dando vueltas, sobre mi mano abierta.
"¿Señoritas, queréis ser mis esposas para toda la eternidad?" (yo)
Las tres sueltan in grito agudo que se escucha en todo el palacio, mezcla de sorpresa, susto, vergüenza y alegría por lo que acabo de proponer.
Me hago invisible justo un momento después.
Antoine alarmado por el grito, se acerca corriendo con varios miembros del personal de la casa. Entra corriendo en el cuarto de baño con su espada desenvainada.
Las chicas les hacen salir diciendo que se han asustado y que realmente no pasa nada.
Cuando han salido el padre y los miembros del personal, les digo las chicas con ironía como si me hubiera ofendido.
"Si no queréis solamente tenéis que negaros y me iré de este mundo sin molestar, no hace falta que gritéis así al verme, no soy tan feo." (yo)
Para completar mis palabras hago que también se vuelvan invisibles Alice y Nadine, así cómo poner una barrera acústica a su alrededor para que no las escuchen si dicen algo.
Durante cinco minutos las dejo sufrir, haciéndolas pensar que nos hemos ido.
Antes de que Laura empiece a llorar lamentando que me haya ido por un mal entendido, hago que Alice y Nadine vuelvan a ser visibles.
Yo voy a hablar con Antoine y los padres de las gemelas que ya han llegado para la fiesta.
Tengo preparados 150 kilos de oro para la dote de las tres.
Las ropas que llevo puestas en estos momentos, son dignas de un rey, aunque no son demasiado llamativas como suele ser el caso en la época actual.
Como encuentro en el mismo lugar a Antoine Richis y a los padres de las gemelas, aprovecho para dejar caer la bomba después de saludar adecuadamente.
Les pilla un poco de sorpresa, pero al decirles lo que les ofrezco de dote, la madre de las dos hermanas, decide aceptar sin esperar a ver que dice su marido.
Antoine ya se lo esperaba y me hace prometer que cuidaré siempre de ella y que no la haré sufrir.
Les llevo a mi habitación y allí les muestro los tres pequeños cofres llenos de monedas de oro para que se repartan.
Parece más una transacción de ganado en el mercado que una petición de bodas.
Le digo a Antoine al oído que tengo que hablar con él en privado y después de unos minutos y ayudar a que los padres de las gemelas se lleven dos de los cofres de oro. Los dos nos quedamos solos en una habitación.
Me dice que sea breve, ya que tiene que atender y recibir a un montón de invitados y terminar unos cuantos preparativos.
Le digo que todo eso puede esperar, pero tengo que contarle un secreto.
Me mira sorprendido, para ver con qué clase de persona ha aceptado casar a su hija.
"No soy realmente quien crees que soy, aunque todo lo que digo sobre cansarme con tu hija y mis intenciones con ella es cierto. Soy un dios y quiero que vengas a mi mundo, a uno de ellos, junto con tu esposa para que puedas ver a tu hija de vez en cuando. Se que es difícil de creer, pero esto te lo hará más sencillo." (yo)
Me mira como si fuera un loco, pero cuando ve aparecer a su esposa muerta frente a él, cae de rodillas al suelo y la abraza por la cintura, dando las gracias y diciendo que hará lo que le pida muy agradecido y llorando de felicidad.
"No me gustaría que esta información se hiciera pública, así que me gustaría que el asunto de su regreso a la vida se mantenga en secreto hasta que nos vayamos." (yo)
Les dejo algo de tiempo y de intimidad para que hablen y vuelvo a ir con las chicas, que están hablando entre ellas muy ansiosas.
Las informo a las tres que sus padres han estado de acuerdo, aunque no me ha gustado la actitud de los padres de las gemelas.
Les digo que han tomado el oro y han salido corriendo como si hubieran vendido un animal en el mercado y tuvieran miedo de que se lo quisieran devolver, por ese motivo no voy a llevarlos a Beta, pero si que voy a llevar a los padres de Laura.
No parece sorprender a las dos gemelas, que ya saben cuál es la mentalidad de sus padres.
Les ofrezco nuevamente los anillos y las tres me ofrecen sus manos para que se los ponga.
Una vez que cada una de ellas lo tiene, se las ve muy felices.
Le digo a Laura que vaya a hablar con sus padres y entendiendo mis palabras en plural sale corriendo para ver nuevamente a su madre y su padre reunidos nuevamente.
Además de enseñarles el anillo en su dedo, que mantengo en modo visible para que puedan presumir de él.
Empieza la fiesta un poco más tarde de lo previsto, la madre de Laura se ha tenido que poner algo de ropa diferente y menos llamativa, y mantenerse un poco al margen para no llamar la atención.
El marqués que estaba interesado en Laura y quiere casarse con ella, va a llevarse una gran decepción.
Ya está un poco molesto porque ha tenido que esperar un rato a que lo recibieran y la bienvenida no ha sido tan buena y cortés como se esperaba.
La tarta de cumpleaños con rosas hechas de chocolate está bien hecha para la época y los medios de que disponen, además deja ver lo mucho que su padre se ha dedicado a los preparativos del cumpleaños.
El momento incómodo llega unos minutos después, cuando marqués le ofrece a Laura un collar bastante tosco, y que Laura en vez de pedir permiso a su padre como sería de esperar, me lo pide a mí.
Esto molesta mucho al Marqués, que pide una explicación.
A lo que yo mismo dando un paso al frente, le respondo con gran placer.
"Es normal que una joven prometida, le pida permiso a su futuro esposo antes de aceptar un regalo de otro hombre." (yo)
Igual que si hubiera caído un rayo frente a la multitud, se hace el silencio antes de empezar los murmullos.
El marqués con gran enojo y como si se le hubiera ofendido gravemente, mira a Antoine y le pide una explicación sobre este asunto.
"Es tal y como el señor God ha mencionado marques, los dos están enamorados, y ya hemos acordado ese matrimonio. También se ha entregado la dote, que por cierto es muy generosa y se han intercambiado los anillos." (Antoine)
Laura muestra su anillo con entusiasmo a los asistentes, con una sonrisa en la cara, viendo que es muy feliz.
Pensando que ha sido insultado y su honor a sido manchado, me desafía a un duelo a muerte.
Pone la fecha a mañana por la mañana a primera hora.
Aunque acepto su desafío, le digo que luchar en mi contra es una sentencia de muerte segura y que se retracte, que sin duda alguna morirá si se enfrenta a mí.
Se marcha muy ofendido y el ambiente de la fiesta se ha apagado.
Hago que se lancen al cielo varios fuegos artificiales, con muchas formas y colores diferentes.
En especial varias imágenes con las caras de Laura y de las gemelas también hago que aparezcan letras en el cielo que digan 'Felicidades'.
Tenemos el mismo momento de jugar al escondite por los jardines y consigo encontrar a las cinco sin problemas.
Durante este tiempo de fiesta, con mis otros cuerpos en este mundo, también estoy cazando a las demás niñas y jóvenes hermosas de la ciudad.
Como soy un cabrón y me molesta que haya estropeado el ambiente en la fiesta, dejo pistas en todos los lugares de las desapariciones, que señalan al marqués como responsable.
Entre las que llevo a Edén, están las más de veinte mujeres que hubiera matado Jean Baptiste Grenouille.
Además de todas las demás mujeres hermosas y niñas también hermosas de la ciudad, incluyendo monjas.
Yo tengo la coartada perfecta y todas las pistas señalan al marqués.
Una vez que el juego termina ya que se está haciendo tarde, Antoine despide a los invitados y nos reunimos en el salón.
Les cuento que mañana después del duelo, que dudo mucho que tenga lugar, nos iremos a mi mundo y que Antoine y Thérèse irán a Beta y yo iré con las chicas a Edén.
Les cuento un poco sobre los dos mundos y todos parecen satisfechos. Las chicas se van a su habitación, pero le guiño un ojo a Alice que ya sabe lo que va a suceder esta noche.
Las tres inocentes chicas, van hablando entre ellas, pensando en cómo será su vida desde ahora y como será su noche de bodas con un dios nada menos.
En cuanto llegan a su habitación de chicas, ven a Alice reírse con picardía y saben que sabe algo que ellas no.
La interrogan y les dice que ya están casadas conmigo desde el momento que les puse el anillo y que esta misma noche sabrán lo que es dormir con un dios.
Las tres se ponen nerviosas y se alarman, pensando que puedo aparecer como un fantasma detrás de ellas en cualquier momento para comerlas.
Las primeras en notar que algo no es normal, son las gemelas, Albine y François, que ven que las demás han dejado de moverse y hablar, como si fueran estatuas y que las ventanas y la puerta no se abren, ni siquiera se mueven ligeramente, igual que si fueran parte de la pared.
En ese momento me hago visible detrás de ellas y antes de que me vean les susurro al oído.
"¿Estáis listas para ser mis mujeres en cuerpo y alma?" (yo)
Dan un grito y saltan como si fueran un gato al que le han pisado la cola.
Rodeo sus pequeñas cinturas con mis brazos y llevo a las dos a la cama, donde nos besamos y nos quitamos la ropa, al tiempo que disfrutamos de tocar y sentir el roce de nuestros cuerpos entrelazados.
Son muy jóvenes, pero son adultas para la mayoría de edad en Edén. (Más de 14 años)
No tienen experiencia, pero son muy activas y abiertas a cualquier cosa que les digo y propongo, además les gusta participar activamente.
Desde intentar hacer una garganta profunda aunque sin éxito, una rusa o un beso negro.
Mientras una chupa mi polla totalmente firme, la otra está sentada sobre mi cara y la hago sentir el cielo con mi lengua.
Pierden sus virginidades casi al mismo tiempo, ya que las follo mientras están las dos en una torre con sus coños expuestos, y las follo de forma alterna, metiendo la polla primero en una dirande unos minutos y luego en la otra.
Delante de ellas me divido en dos, con cada uno de los cuerpos agarro a una de ellas, la cargo sobre mi y la pongo espalda con espalda con su hermana para que se apoyen mientras las follo como si las hubiera apoyado contra una pared.
Así sienten los empujones de mi polla entrando en su apretada vagina y también sienten los que le meto a su hermana justo detrás de ellas.
Es todo un espectáculo digno de una gran película porno, con temática de época.
En sus cuerpos lo único que queda puesto es el anillo y las joyas que les entregué antes de la fiesta.
Mientras sigo follando a François con mi otro cuerpo, con el cuerpo principal, se la saco del coño a Albine y se la meto por el agujero del culo.
Aunque da un grito de sorpresa al sentir el repentino cambio de agujero no hace demasiado escándalo ya que no siente dolor, aunque si que siente una sensación de invasión diferente a la anterior, aunque también placentera de algún modo.
François siente que su hermana tiene un ritmo diferente además de haber cambiado el tono y la frecuencia de los gemidos y se gira para ver qué ha ocurrido.
Al ver a su hermana siendo tomada por el culo, se lleva una gran sorpresa, y también empieza a apretar e más en su vagina por la emoción y la excitación que siente.
Le susurro al oído que su turno llegará pronto y me abraza con más fuerza mientras que me pregunta si la dolerá.
La pregunto en respuesta si esta viendo sufrir o quejarse a su hermana y solamente obtengo una sonrisa entre sus gemidos de ser folladas tontamente.
Cuando ya pinto el interior del culo de Albine de blanco con mi semen, hago un jutsu de sustitución con mis dos cuerpos y empiezo a follar el culo de François.
Pero sin dejar que ninguna de ellas de acostumbre y pensando que vuelven a tener a su hermana a su espalda como antes, me pongo con dos cuerpos más detrás de cada una de ellas y se la meto a las dos por ambos agujeros al mismo tiempo teniendo dos doble penetraciones y haciendo que las dos lleguen al clímax en un momento al sentir todo su interior relleno y extendido.
Las llevo a la cama mientras continuo follando a las dos por sus dos agujeros con dos de mis cuerpos me tumbó en el borde, a ellas las empujó haciendo que queden sobre mí mientras continuo follándolas y mis cuerpos que quedan en pie detrás suyas las follo el trasero sin piedad haciendo que las dos pierdan el sentido rápidamente y se dejen llevar únicamente por la lujuria y el desenfreno.
No cuento las veces que me corro en su interior o las que ella también se han corrido, simplemente las curo y las repongo energía hasta que yo estoy satisfecho y ellas han llegado al colapso mental.
Limpio la escena y las dejo descansar en la cama con grandes sonrías en las caras y como única prueba de lo que ha pasado, son sus agujeros enrojecidos, abultados y abiertos, de los cuales una sustancia blanca espesa sale chorreando lentamente de su interior, aunque esto está oculto adecuadamente bajo las sábanas, dando la impresión de que están dormidas inocentemente.
Una vez que las gemelas están descansando, le llega el turno a Laura, que sale del bloqueo temporal y se encuentra parada frente a mí cuerpo completamente desnudo y detrás de mí a las dos gemelas dormidas bajo las sábanas.
Va a dar un paso atrás, pero desaparezco de su vista y el paso que da hacia atrás choca directamente contra mí, ya que me muevo allí a propósito.
Se asusta y se da la vuelta para ver con qué ha chocado y al darse la vuelta, le robo los labios en un beso.
Mientras nos besamos le quito lentamente el vestido hasta dejarla en ropa interior.
La acarició la espalda y mis manos llegan a sus nalgas, las cuales amaso y aprieto a placer.
Son tiernas y regordetas, da mucho gusto masajearlas.
Mis dedos empiezan a avanzar un poco más y juegan con su ano y con su coño que empieza a estar mojado.
El beso continúa, aunque con algunos gemidos que salen de su boca.
Levanto una de sus piernas con mis manos, dejándola únicamente con una pierna y a mi como sus puntos de apoyo.
Al subir una de sus piernas, sus muslos se han separado y han dejado el camino a su precioso tesoro completamente libre de obstáculos, salvo la delgada capa de tela de sus bragas de encaje.
Con la maestría de la experiencia, las retiro a un lado con gran habilidad y mi pene se desliza suavemente, invadiendo su coño igual que un tren atraviesa un túnel.
La única muestra de su virtud es un delgado hilo de sangre que recorre su muslo interno, proveniente de la ruptura de su himen en mi entrada.
Un fuerte gemido interrumpe nuestro beso, cuando mi pene ha invadido su útero completamente y ha hecho que tenga un fuerte orgasmo por primera vez en su vida.
Le digo al oído que la amo y después empiezo a moverme y ganar velocidad.
Después de una ronda rápida, la recuesto sobre la cama y paso directamente al sexo anal teniendo sus piernas completamente alzadas y apoyadas sobre mis hombros.
No se da cuenta de donde la voy a meter hasta que ya estoy empujando y es demasiado tarda para cualquier protesta o acción evasiva.
Durante todo el sexo anal, además de algunos gemidos disimulados, de su boca sale una única frase que repite muchas veces.
"Ay dios mío, me la esta metiendo por el culo." (Laura)
Me hace gracia y una vez que vacío el contenido de mis pelotas en su interior, le digo que, voy a sentirme celoso si llama a otro dios mientras estamos estamos haciéndolo.
No me responde pero puedo ver que ha notado que me estoy riendo un poco a su cuenta.
Vuelvo a follar con ella en su coño y cuando se descuida, la pongo sobre mí en la cama.
Ella se cree que es para que ella tome la iniciativa y se mueva, pero la atraigo sobre mi. La beso y abrazo presionando su cuerpo contra el mío, aplastando un poco sus tetas sobre mi pecho.
Cuando nota sobre su espalda y que alguien le susurra al oído que la ama y le supla un poco sobre el cuello.
Antes de que pueda darse la vuelta, también se la estoy metiendo por el culo al mismo tiempo que ya la tenía rellena el coño con mi cuerpo principal.
Somos un sándwich con su cuerpo siendo sostenido y retenido entre mis dos cuerpos.
Empiezo a moverme pero alternando la entrada y la salida de los dos cuerpos y de vez en cuando metiendo los dos de golpe, coincidiendo con las eyaculaciones y sus orgasmos consecutivos.
Cuando está en el mismo estado que las gemelas, vuelvo a limpiar el desastre y la tumbo a su lado.
Después desbloqueo a Nadine y a Alice a las cuales no tengo problemas de darles tanta intimidad como las que han tenido su primera vez, aunque siempre dándolas totalmente la importancia y dedicación que se merecen.
Cuando termino con ellas, las cinco están durmiendo como angelitos en la cama.
Devuelvo el tiempo a la normalidad y me tumbo entre ellas en la cama.
Durante el resto de la noche, veo el espectáculo de la detención del marqués, el cuál sin saberlo tiene en su palacio en varios baúles algunos objetos personales de las chicas desaparecidas en la ciudad.
No creo que le dejen venir al duelo por la mañana.
De todos modos, antes del amanecer me levanto de la cama, el señor y la señora Richis ya están levantados o debería decir que no se han acostado, han estado hablando toda la noche.
Después de todo, ambos tienen muchas cosas de las que hablar y tienen toda la eternidad para otras cosas.
No creo que a ellos les deje ver la película de lo que hubiera pasado sin que yo llegara para cambiar su destino, era demasiado lamentable su final en la historia original.
Antoine se ofrece a ser mi testigo y ambos vamos al lugar acordado para el duelo.
Esperamos sin que nadie aparezca a la hora acordada.
Después los dos volvemos al palacio y Antoine les da el día libre a todos los trabajadores de la casa a petición mía, así como un mes de adelanto en el salario.
Una vez que todos los criados y doncellas que ninguna de ellas es hermosa, se han marchado de la casa a otras ocupaciones, nos reunimos con las chicas que ya se han levantado un poco tambaleantes y están hablando Thérèse en el salón.
Preparo un delicioso desayuno para todos y después de terminar y despedirnos hasta pronto, nos transporto a Edén y a los padres de Laura con palacio incluido, a Beta.