El contorno del rostro detrás del velo de la mujer flotante era confuso y la gente promedio no sería capaz de ver su apariencia. Pero los agudos ojos de Tang Xiu penetraron directamente el velo y vieron su rostro claramente.
¡Era verdaderamente una belleza con una belleza cautivadora!
Una belleza tan conmovedora no era algo raro de ver para Tang Xiu, pero debía admitir que ésta estaba ligeramente por encima de las raras bellezas que había conocido. Su encantador y pequeño cuerpo mostraba completamente su figura perfecta mientras sus ojos se ondulaban como una marea primaveral. Su sonrisa estaba llena de santidad y provocaba un poderoso encantamiento magnético, pero emitía una vibra extremadamente atractiva.
"Hola, 72. Qué descarado y audaz eres".
La dulce voz no produjo ningún efecto hechizante, aún así, la esencia de su voz hizo que los corazones de quien la escuchara latieran más rápido.