Los ojos de las personas en la mesa brillaban, confundidos no sabiendo si estaban impresionados o celosos.
El hazmerreir hace unos segundos había ascendido a la esposa del Sr. Bolsas de Dinero. La ironía era repugnante en este drástico cambio.
—¡Me estoy quedando ciega mirando a tu novio, su hermosura quema mis ojos! —dijo una chica al otro lado de la mesa, cubriendo sus ojos en agonía.
—Oh mi Zhaoyang, tú y tu apuesto caballero, cuán afortunada eres. Aunque…mmm…Creo que lo he visto en algún lugar antes... —murmuró su compañera mientras miraba a Huo con su amiga, como un par de tigres hambrientos de su presa.
—Claro, muy familiar, pero no recuerdo de dónde.
Lu sintió que ya no podía resistir más, después de escuchar esa frase tan peligrosa.
A este ritmo, era solo cuestión de minutos hasta que Huo Yunting se convirtiera en la siguiente persona que apareciera como portada en las revistas de chismes.
Ella dejó sus palillos chinos y levantó a Huo con sus propios brazos. —Perdón, me tengo que ir. ¡Disfruten, bien, gracias, adiós!
Huo Yunting permaneció sorprendentemente colaborador como el gran encanto que era, dejando a su mujer arrastrarlo afuera. —Chicos, coman tanto como quieran, yo pagaré.
Los suspiros resonaron en el lugar.
—Sabía que era rico.
La comida en este lugar era cara por cierto. ¡Ellos incluso consideraron dividir la cuenta en cantidades iguales para cada uno!
—¡Sí señor, sí señor! ¡Tres platos llenos!
—¡Zhaoyang, tu esposo es el mejor!
—¡El chico de Zhaoyang nos hará ganar!
Lu no podía molestarse por esas palabras, a medida que se alejaba rápidamente.
Huo aprovechó el movimiento tomándola de su cintura, susurrando en sus oídos: —Seguro nuestra princesa está orgullosa esta noche, ¿qué tal una recompensa para su caballero?
La princesa le regresó una mirada asesina.
—¿Por qué estás aquí? —dijo Lu, después de dejar el lugar y aflojar su agarre, aunque su chico permanecía como un koala a su muñeca.
—Siempre hay tiempo para esto, pero ahora no. Más importante es, ¿quién es este "ex" novio tuyo? —preguntó haciendo énfasis en esa palabra.
Lu detuvo su paso, con un sombrío agrietamiento en su expresión. Ella intentó estar en calma. —Para comenzar, ¿podrías alejarte de mí? Eres una figura pública como mínimo. Y deja de jugar a este tira y afloja conmigo como si fueras un niño.
—Bueno, a diferencia de a-l-g-u-i-e-n, no tendría miedo de quien soy. Sabes que si lo averiguaran, no me importaría —dijo Huo burlonamente mientras se acercaba a Lu, sonriendo seductoramente.
Lu no podía parar a su hombre, así es que aceleró su paso.
El diablo la siguió rápidamente y agarró su paso exacto. —Y entonces, ¿quién es este ex? —preguntó Huo Li para investigar a este hombre, pero no consiguieron nada, probablemente porque el hombre podría no ser de esta ciudad, aunque el hecho de que permanecía completamente oculto sugirió que él podría ser un mandamás.
Qué curioso…
—¡Dios mío! Ven, mira por la ventana.
—¡Deja de comer, por amor de Dios! —gritaron las dos compañeras mientras se paraban cerca de la ventana, observando el auto que Huo abrió para Lu.
—¿Rolls-Royce? ¡Edición limitada también!
—¡¡¡Demonios!!!
La mujer gritó, en tanto la emoción y tensión no se podían sostener más.
Los compañeros se unieron a la muchedumbre cerca a la ventana también, mientras observaban un oscuro Rolls-Royce cerca del restaurant.
—¡Chicas, algún día seremos como ella! ¡Trabajemos duro para eso!
Las chicas no parecían sentirse bien con el gran "logro" de Lu, a diferencia de los chicos que admitían su destino de nunca poder conducir un Rolls-Royce siendo envidiosos, y regresaron a su asiento rápidamente.
Las chicas se estaban inquietando mientras la envidia se apoderaba de todo su cuerpo.
Pero, ¿qué podían hacer? ¡Lu Zhaoyang era hermosa como una princesa de Disney después de todo, ella merecía un príncipe en un caballo blanco!
Ella tuvo un guapísimo ex, entonces era obvio que tuviera un esposo igual de guapo.
—¡Quieto, quieto! ¡Ugh! —gruñó un compañero. El raciocinio no ayudó a alzar su estado de ánimo en absoluto.
(De nuevo en la residencia de Huo y Lu)
Mientras descansaba contra la espalda de su silla, Lu cerró sus ojos ante la pregunta de su esposo.
Su esposo Huo podía ver su depresión en su estado de ánimo, mientras la abrazaba con fuerza. —¿Es el pasado mejor que el presente que te mantiene pensando en eso todo el tiempo?
Ella estaba mostrando resistencia mientras intentaba salirse de su agarre, pero el intento era obviamente inútil así es que al final se detuvo.
—Huo Yunting, ¿tanto te gusta chismosear?
—No me importaría chismosear si se trata de ti —dijo suavemente mientras asaltaba su lóbulo y murmuraba—: Y entonces, ¿quién es este hombre?
El sentimiento de cosquilleo era tan abrumador que su cuerpo se inclinó a un lado, —Lo que pasó, pasó. Ya se quedó en el pasado, así que, ¿podrías por favor olvidar eso? ¿Estoy obligada a hablarte de cada uno de mis ex?
Ella se rehusó a seguir hablando de Chen, porque ese era su más profundo y oscuro secreto, el que nunca podía ser revelado a las personas.
—Bien —susurró a medida que se alejaba de su lóbulo—. No hablaré más de él, aunque no sepa quién es. Dejaré a los muertos descansar.
A pesar de que no tenía ninguna información de este hombre, al menos la respuesta que le dio Lu le alivió un poco.
Después de todo, ella es su esposa, su pertenencia, su propiedad. Él no querría que su propiedad estuviese pensando en otro hombre.
Lu pensó que estaría perdonada esa noche dado que ella estaba parcialmente bebida y Huo parecía piadoso. Sin embargo, respecto a la naturaleza y resistencia de su esposo, ella estaba equivocada, muy equivocada.
Esa noche fue otra noche "agitada".
A la mañana siguiente, Lu estaba medio muerta, tanto que casi necesitaba clips para sostener sus párpados mientras intentaba revisar los documentos.
Casi muerta como debería estarlo, ella aún se las arreglaba para percibir a Yu Man'er manipulando su teléfono, probablemente enviando reportes de nuevo.
«Esa puta mejor se comporta o me aseguraré de que ella no dure hasta el próximo mes en Thunderbolt Corp».
Yu Man'er había estado observando a la "hermana" del presidente por un buen rato. Ella sacó su teléfono de nuevo al ver a Lu Zhaoyang dejándole el lugar sin nada en mano.
«¡Sospechoso, muy sospechoso! ¡Necesito reportar esto!».
Unos pocos tipeos rápidos y el reporte salió.
Un rato después, Mo Shan respondió: —En Kyoto ahora. Déjala por el momento.
Yu Man'er mantuvo su celular al instante. Si Mo Shan decía que la dejaran, entonces ella la dejaría, después de todo, ella era la "hermana" simbólica del presidente. Podría causar problemas si Yu Man'er le hiciera algo raro a ella.
Más tarde en ese significativo día, era la hora de otra reunión, donde el presidente firmaría un contrato con Hai Shang Corp. Bajo el brillo de las luces de la sala de reuniones, Huo Yunting estaba girando su costoso lápiz oscuro en su mano mientras escuchaba al presidente de Hai Shang dando su ambicioso discurso.
—Esta vez el proyecto debería ser uno muy exitoso, te lo aseguro, Presidente Huo. Por supuesto, el proyecto no sería un éxito sin que nos hicieras un favor —dijo el presidente de Hai Shang, quien estaba en sus cincuenta, pero aun así con una temerosa cortesía hacia Huo Yunting como una persona en sus veinte años.
Hombre…habla de lo nuevo dejando a un lado lo viejo.
Ahora lo viejo está suplicando por misericordia. Es por eso que, nunca hay que meterse con nadie en todos los ámbitos de la vida pues podría resultar ser el gran mandamás frente al que uno se arrodille suplicando por un futuro.
—Está siendo demasiado cortés, señor. Realmente no quiero sobresalir en ese tipo de proyectos. Usted es quien me hace un favor —dijo mientras dejaba de dar vueltas a su lápiz.
Probablemente, la línea más larga que Huo Yunting haya dicho a alguien más, además de a su esposa, en los primeros 40 capítulos…
—Deja el cuchicheo para después. Firmemos este contrato.
Paragraph comment
Paragraph comment feature is now on the Web! Move mouse over any paragraph and click the icon to add your comment.
Also, you can always turn it off/on in Settings.
GOT IT