—Oh, por dios ¿Es este uno de los anillos de esas ediciones limitadas de las joyas Corazón en Arte? Escuche que solo habían sacado cinco pares de este diseño. El señor Shen realmente supo elegir muy bien un anillo para usted.
—Lo amo. Me sorprendió que supiera qué elegirme —dijo Lu Xinyi tímidamente.
—Ah, sabe, que creo que ya sé cuál es el vestido perfecto para usted. Se supone que no va a estar a la venta hasta el mes que viene, pero dudo que al gerente le moleste si se lo lleva usted antes ¿Quiere verlo? —le propuso la vendedora. El entusiasmo que tenía por venderle a la esposa de Shen Yi era tan obvio.
—Me encantaría ¿Viene con un traje para mi esposo? A él realmente le gusta cuando nuestra ropa combina perfectamente —le dijo con una sonrisa de agradecimiento. Ya eran las cuatro de la tarde, pero todavía no había terminado la tarea. También debía preparar la cena de esa noche.
—Sí, viene con uno. Deme un minuto y se lo traeré del depósito.