-Sensei… gracias por sacarnos… -Hikari había ayudado a Madre y a Morfeo a salir de su… situación, la chica intentó explicarle a Hikari de su visión, pero aparentemente él ya lo había resuelto…
-No es nada Morfeo…
-Ahora… tengo miedo ¡De veras! Tengo miedo… mi visión de ella siendo consumida por las llamas era tan vívida…
-Cálmate Morfeo, Hikari dijo que ya selló a Kikenna, entonces no hay peligro. –Madre acariciaba la cabeza de Morfeo para calmarla, pero ella se negaba a quedarse calmada del todo.
-Lo único que podemos hacer por el momento es cuidarla y esperar a la siguiente, no creo que Yami vaya a por ella ahora que está sellada… no tendría sentido, así que sería mejor mantenerla sin entrar en su forma espíritu.
-¿Ya consideraste la idea del doble sello? Digo… si Shidou-san y tú sellan a la misma chica…
-Madre, sabes que es una idea tonta, porque es imposible que una chica ame a dos personas, de cualquier forma, gracias por intentar ayudar, por el momento es mejor que me vaya, ¿Sí? –Hikari se despidió con un beso en las mejillas a ambas y desapareció de la base donde estaban, para volver a casa.
-¡Hikari!
-¿Tohka?
-¡Tengo hambre! –Hikari suspiró y caminó hacia la cocina, con Tohka a sus espaldas dando brincos de alegría.
-¿Algún deseo en especial?
-¡Carne!
-Eh… sí, pero… ¿Algún platillo? –Hikari la miraba algo… acostumbrado a esa respuesta.
-¡Carne!
-Olvídalo… -Hikari comenzó a cocinar, Shidou había tenido mucho trabajo atrasado del colegio y se había estado poniendo al día, este fue un motivo por el cual seguía dormido, de todas formas, el olor de la comida comenzó a atraer a las chicas… eso y que también ya se acercaba la hora de comer…
-¿Y bien?
-¿Y bien qué, Kotori?
-Ya sabes, Kikenna no se quiso mudar a un cuarto de la residencia de espíritus… Asumo que durmió contigo. –Hikari asintió. -¿En tu cuarto? –Él volvió a asentir. -¿Contigo en la cama?
-Nope, le di mi cama y yo dormí en una bolsa para dormir, fue… cómodo la verdad, aunque tuve que dormir de espaldas a ella, porque ella no dejaba de mirarme y cuando le hacía caso, ella trataba de devolverme la cama…
-Es comprensible, después de todo, tú la sellaste.
-Además, de que fue reciente, luego de otra cita más… -Apoyo Kaguya al cometario de Miku.
-Sí… es una suerte que Yami no haya aparecido en esa cita, ¿no?
-Tienes razón Kurumi, creo que ella aceptó que perdió, al menos esta vez, asumo que tiene honor… o cuando menos un código personal, de todas formas… averiguaré quién es ella en realidad… -Hikari terminó de cocinar y sirvió las comidas.
-A todo esto… queremos decirte que no volveremos a meternos en tus asuntos, dejaremos que te encargues, porque… solo estorbamos…
-Chicas… saben que no es así… siempre ayuda… -Sonó la alarma del reloj de Hikari, Kikenna apareció en el comedor y lo miró fijamente.
-Bien, tengo que ir, es en París, bueno, chicas se cuidan, Kikenna… quédate aquí por favor.
-No.
-Sí.
-No.
-Sí.
-¡No!
-Te quedas por tu seguridad, seamos realistas, en nuestra segunda cita, Yami no apareció porque teníamos a todo el mundo vigilando, Anti-Espíritus, Híbridos, Asisto-Bots, Hechiceras, todos estaban ahí… pero esta vez no es así… entonces, no vayas. –Ella se quedó mirándolo por unos instantes y desvió la mirada, entonces Hikari desapareció.
-Cuídate…
Hikari apareció en una azotea, como era su costumbre, se acercó y miró desde allí, en frente de donde estaba había una enorme galería de arte, allí, una jovencita de bello vestido entró con un cuadro, que tuviese un bello vestido no la hacía una espíritu potencial… sino el brillo singular que este tenía… y la leve energía que emanaba, Hikari entonces bajó haciéndose invisible y apareciendo detrás de un pilar y entró a la galería.
-Vaya… arte… ¿Hace cuánto tiempo que no trato de pintar?
-Señor… ¿Usted pinta? –Le preguntó un… ¿Guardia? ¿Encargado?... Hikari no sabía quién era.
-A-Ah, eso… sí, yo… aprendí a pintar un poco… le parecerá curioso que fue durante un curso intensivo de cocina…pero, ese es otro tema.
-Vaya, sin duda una historia interesante, hoy tenemos artistas de diversos orígenes, ¿eh? ¿No habrá traído con usted una obra suya para exponer? ¿O sí? –Hikari lo miró confuso, pero negó.
-No, para nada, no vine con esas intenciones.
-Es una lástima, porque hace unos segundos, entró una señorita afirmando ser una artista magnífica que de la nada, había abierto los ojos… y pintó, me mostró la pintura que traía, oh ángeles… ¡Qué arte! Una obra de arte del estilo romántico sin duda alguna… pero… con matices de realismo, porque juraría que vi la estatua del lienzo, pero se veía idéntica, casi calcada, con una familia a sus pies… aunque… je, se notaba lo romántico de la chica por retratarse dentro de él… como sea, disfrute su estancia.
-Gracias… -Hikari entró en la enorme galería con todo lo que el señor le había dicho en mente… tal vez, él mismo ya descubría poco a poco, esta nueva pintura… el señor al pararse en la puerta saludaba cortésmente a la gente que entraba.
-Buenos días, que disfrute nuestras obras.
-Oh, buenos días… "No se preocupe… estoy segura de que las voy a encontrar…. ¡Divertidas! Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja".
-Bien… veamos, vestido algo brilloso… pinta de chica nueva… pero con el valor de entrar a este lugar en su primer día… bueno, supongo que tendré que buscar a una chica con… ¿Apariencia segura…?
-Este… Este… ¿D-Dónde l-lo cuelgo…?
-"O tal vez no…" –Hikari siguió el origen de la voz y se encontró con la chica que había visto, ella no lo había notado y cuando Hikari tocó su hombro, ella dio un salto y soltó un gritito.
-¡HYA!
-¡? E-Eh… p-perdona, pensé que me sentiste…
-N-No… no lo hice… perdóname… ¿Trabajas aquí? –Hikari la miró confuso, ella pareció notar esto y rió un poco. –Creo que no, ¿verdad? Perdona… pensé que me ayudarías a poner mi cuadro… no sé cómo hacerlo…
-Oh, eso… no debería ser tan difícil… -Hikari miró a otro lado con su prótesis ocular y escaneó la posición y la ubicación de cada cuadro, calculó medios de colocación para los mismos, luego giró hacia la chica y subió el cuadro agarrándolo desde abajo y logró colocarlo en su muro de exhibición.
-¡Wow! ¡Increíble! ¿Supiste eso de solo mirar el resto? ¡Solo tardaste un segundo!
-Je, solo fue lógica amiga mía, de todas formas, bello cuadro, me parece único, parece una fotografía hecha a mano… -La chica se sonrojó al oírlo, pero se paró orgullosa frente al cuadro.
-¡Gracias! ¡Algún día seré reconocida como lo más grande pintora del mundo!
-¿Oh? ¿Ese es tu sueño? Entonces diré orgulloso que te conocí a tus inicios… ¿Tu nombre? –Ella lo miró y sonrió.
-¡Kaiga! ¡Me llamo Kaiga!
-"¡Maravilloso, Senpai! No pierdes tu tiempo, eres interesante, pero… esta vez es algo más personal… la anterior vez lograste llevarte todas las fichas a tu lado del tablero… pero en esta ronda de cartas, te aseguro que ganaré… y además recuperaré las fichas perdidas, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja." –Yami miraba de reojo a la distancia, mientras fingía estar interesada por un cuadro. –Disculpe… ¿Cuánto cuesta el cuadro?
-¿Ese? Mucho me temo señorita mía, que no podría pagarlo… cuesta más de siete millones de dólares… -Se había acercado el encargado, Yami lo miró, sonrió y le dio unas palmaditas en el hombro.
-Envuélvalo para llevar, ¿Quiere? –Le da un cheque y se adentra en la galería, el señor lo toma a broma y revisa si el dinero le alcanzaba…
-I-Increíble… si quisiera… podría comprarse toda la galería… el edificio… demolerlo y hacer una mansión… ¿Q-Quién es ella…?
-"Oh… y lo haría… pero… ese cuadro de Julieta muerta en brazos de Romeo, me parece oportuno, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja."
-Mucho gusto Kaiga, ¿Eres nueva?
-¿¡E-Eh!? ¿T-T-Tanto se me… n-nota? –Hikari sonrió ante la actitud de la chica y negó con la cabeza.
-Nope, solo digamos que tengo una… habilidad especial para ver esas cosas.
-A-Ah…b-bueno… a decir verdad, supongo que… que se me debe ver algo nerviosa, ¿No? ¡E-Es normal! Es mi primera obra importante… ¿Sabes? Siempre quise poder… pintar la realidad como si fuese un espejo… -Hikari mira el cuadro.
-Y lo has logrado, parece que veo una foto en un cuadro, claro que las pinceladas me aclaran la naturaleza de lo que veo, es increíble tu arte.
-G-Gracias… es como si… como si atrapara en mi lienzo la realidad…
-"No me gusta cómo suena eso…" –Hikari chasqueó disimuladamente y envió a un clon a buscar una estatua parecida a la del lienzo en la vida real… no tardó mucho en encontrarla.
-"Ey, Original… no te va a gustar lo que te tengo que decir… encontré el lugar… pero… pareciera que la estatua hubiese sido arrancada de nuestra realidad… además hay un grupo de policías buscando a personas desaparecidas…"
-"Tch… entonces, sí atrapa la realidad… y a lo que sea que este en su cuadro… incluida personas…"
-¿Hmm? ¿Pasa algo…? –La chica lo miraba, él negó con una sonrisa. -¿S-Sabes…? No… no sé tu nombre…
-Hikari, Hikari Kusakariki.
-Kusakariki-san, mucho gusto. –Hikari negó y la miro, ella estaba confusa ante esta reacción.
-Hikari, dime Hikari.
-¡¿E-Eh!? –Ella retrocedió sorprendida, nerviosa y sonrojada, especialmente sonrojada, parecía un tomate.
-¿Oh? ¿Qué pasa?
-N-Nada… es solo… es solo que… acabamos de conocernos… y… y… -Ella juntaba y separaba los dedos al hablar.
-¿Y? Yo te digo Kaiga, ¿no? Sería correcto y justo que me llames Hikari. –Ella sin argumentos para su defensa, asintió sonrojada.
-Este… esto… este… H-Hikari-san…
-Hikari. –Corrigió el anti-espíritu.
-S-Sí… H-Hikari… ¿C-Cuánto tiempo te quedarás por aquí…? –Hikari la miró fingiendo estar algo ofendido, cosa que la chica detectó al instante. -¡N-No es que me moleste tu presencia! S-Solo quiero saber… p-porque cuando te vayas… estaré solita…
-¿Oh? No debería ser así, sabes que al lado de tu cuadro hay espacio para otro, ¿No podría la futura mejor pintora del mundo mostrarme cómo trabaja? –La chica ocultó la cara del rubor, pero asintió.
-C-Claro… Pero… ¿Sabes? No tengo más dinero para presentar mis obras…
-No hay problema, yo te lo pago, ahora, vamos. –Hikari comenzó a caminar, la chica se quedó parada ahí mirándolo
-"¿É-Él… esta… dispuesto a pagar… un lugar… para mí? ¿P-P-Por… por qué? Nos acabamos… de conocer… ¿¡Eh!? N-No será que él… s-se… s-se haya… en… enamora… No, no creo… ¿O sí?" -Después de reaccionar a la realidad, corrió para darle alcance a Hikari.
-¿Entonces? ¿Dónde vamos?
-N-No lo sé… e-elige tú, después de todo… tú pagarás la exposición… -Hikari la miró y comenzó a pensar…
-¿Puedo pedir dos?
-¿¡Dos!? P-Pero… solo hay un espacio en la exposición… -Hikari asintió, confundiendo a Kaiga.
-Lo sé, quiero uno para mí. –Ella se sorprendió aún más y se ruborizó mucho mientras asintió con vergüenza.
-Bueno, entonces mmm… quiero un autorretrato tuyo y… veamos, ¿Te parece una estatua que vi en el centro?
-S-Sí… "¿¡Autorretrato!? E-Este… Esto…Este…Esto…" –Ella estaba muy rojita, tanto que soltaba algo de humo. Entonces se concentró en la realidad y acompañó a Hikari al centro, allí vio la estatua y comenzó a pintar. –Que los ángeles guíen mi mano…
-"Así que así llamas a tu ángel… algo cuanto menos curioso…" –A medida que la pintura era terminada, Hikari concentraba su atención en la estatua real, por el momento no pasaba nada con esta, entonces Kaiga comenzó a pintarse a sí misma en el cuadro, entonces Hikari comenzó a ver que partes minúsculas de la estatua real desaparecían.
-Oye, Kaiga, ¿Por qué siempre te pintas en tus cuadros?
-¿E-Eh? ¿N-No está bien…? Bueno… para dejar mi marca… mi… mi toque… -Hikari le sonrió y la miró.
-No está mal, es tu toque, pero… ¿Y si pones tu firma como los otros pintores?
-Sí quieres… lo hago en esta pintura… -Dejó de pintarse a ella misma y arregló la escena, donde comenzaba su retrato puso una pequeña mancha en la pared, colocando luego su nombre en forma de firma en una esquina, sobre el pie de la escultura, cuando terminó de poner su firma, Hikari vislumbró que en la pared real, antes intacta, ahora tenía aquella mancha del cuadro… y que se sentía algo raro en el pie de la escultura… como unas energías.
-"Así que sus cuadros pueden alterar la realidad… es… es bastante impresionante y peligroso"
-Ahora… m-mi… m-mi autorretrato… -Hikari la llevó a una tienda de ropa, donde había un espejo, ella se sonrojó y comenzó a pintarse, a medida que la pintura avanzaba… no pasaba nada con su cuerpo real, dado que solo se pintaba a ella y no al fondo, las cosas no desaparecían, entonces al finalizar, firmó con su nombre a la altura del vestido que llevaba puesto, entonces Hikari volvió a sentir energías raras en esa zona.
-Vaya, eres fantástica, ahora, vamos a la exposición, tenemos que dejar tu pintura de la estatua. –Finalmente dijo después de salir de la tienda.
-¿¡E-Estatua!? E-Entonces… ¿¡T-Tú te… te quedarás con el autorretrato!? –Hikari asintió, los labios de ella comenzaron a temblar, sus ojos denotaban mareo, aparentemente aunque ella se lo veía venir de cierta forma, no terminaba de creérselo.
-Pues señorita, déjeme que la lleve. –Hikari había ido detrás de un arbusto para crear la bicicleta, aunque Kaiga se creyó que esta misma siempre había estado detrás de aquellos arbustos. Hikari subió a la bicicleta y Kaiga subió detrás de él, con algo de vergüenza, se abrazó a él y comenzaron el regreso.
-Tan cálido…
-¿Eh? ¿Dijiste algo, Kaiga?
-¡N-Nada!
Llegaron a la exhibición donde Hikari dejó a Kaiga, antes de irse, ella lo miró por unos instantes y entró corriendo a la exhibición.
-"Necesito averiguar qué eran esas extrañas energías… no hay señales de Yami, así que… mejor me concentro en eso, si es algo peligroso, podría poner en riesgo a Kaiga…" –Hikari se tele-transportó a una azotea muy alta y comenzó a examinar el cuadro.
-Disculpe, señorita.
-¿Sí? –Kaiga se dio vuelta para ver a la chica que le hablaba.
-Verá, tengo un par de cosas que pedirle… espero no hacerle perder tiempo a una famosa pintora como usted
-"¿¡F-Famosa!? ¿¡Y-Ya soy famosa!?" N-No… no, está bien, ¿Qué desea? –La chica enredó sus dedos y la miró.
-Verá, tengo dos favores que pedirle, naturalmente no se los pediré a gratis, el primero… es que mi sobrinito pequeño quiere un cuadro de su cuarto, además… él tiene una afición peculiar por los volcanes… ¿Podrías pintar esas dos cosas para mí? ¡Te pagaré!
-"Sí ella me paga… ¡Podré devolverle el dinero a Hikari cuando vuelva por aquí! Si vuelve claro… pero… pero… podría pagarle…" ¡Acepto! Aún tengo un par de minutos antes de que se abra el lugar… podría ir al cuarto y… -La chica negó y le mostró su celular.
-Aquí esta una foto.
-Vaya… no suelo trabajar así… pero bueno, trabajo es trabajo. –Kaiga comenzó a pintar el cuarto de la foto, conforme más lograba terminar el cuadro, la otra chica se veía más feliz, entonces logró acabarlo y comenzó a pintar el volcán de la otra foto… las fotos se veían tan realistas, que parecían tomadas desde el celular y no sacadas de una página de fotografía.
-Ya… terminé, como pidió solo firmé y no me puse en ella…
-¡Ah! ¡Espléndido! ¡Magnífico! –La chica le dio el dinero y comenzó a alejarse con los cuadros.
-Disculpe… ¿Podría saber su nombre?
-Yami, Akarui Yami… -La chica se alejó sonriente, Kaiga la miró con mucha desconfianza, esa sonrisa… ocultaba cosas…
-"Esto es… No… no creo…" –Hikari intentó meter su mano en el autorretrato de Kaiga, como si un reflejo de estanque se tratara, pero no pudo… entonces lo volvió a intentar pero por la firma de ella, entonces fue succionado por el cuadro y apareció detrás de Kaiga.
-¡KYA! ¡Hikari! ¡Torpe! ¡Me sorprendiste!
-"¡Yo me sorprendí más! Así que sus cuadros firmados pueden ser usados como portales…" P-Perdóname… pensé que me sentiste…
-¡Oh vamos! ¿De nuevo con eso? M-Me asusté… Ah, me olvidaba, que bueno que viniste, te podré pagar el dinero que gastaste… -Hikari la miró confuso, ella lo notó y sonrió. –Una chica me pagó por hacerle unos cuadros…
-¿Ah, sí? Vaya, ya eres famosa.
-Lo mismo me dijo Akarui-san. –La mirada de Hikari se llenó de miedo…
-¿A-Akarui-san? ¿Sabes… su nombre completo?
-¿Eh? ¿Por qué te pones así? Se llamaba Akarui Yami… -Hikari se heló del susto.
-¿Y-Y qué cuadros te pidió…?
-Ah, eso… mejor te los muestro… con las prisas se dejó el celular conmigo, traté de buscarla, pero había desaparecido… -Le mostró el celular.
-"¿¡Es la habitación de Shidou!? ¿Por qué…? ¡No será que ella…! Descubrió que puede transportarse ahí… pero… ¿Para qué quiere ir a la habitación de Shidou…? A no ser que no quiera ir a la habitación de Shidou… sino… a su casa… para… Oh no… ¡Kikenna!"
Ese preciso instante, de un chasquido hizo que el dueño del lugar llamase a Kaiga, aprovechando la distracción creada para tele-transportarse a casa de Shidou, fue un movimiento tan desesperado que no logró controlarse y causó un pequeño temblor, Kotori, que estaba en casa subió corriendo al cuarto de Shidou.
-¿¡Hikari!? ¿¡Qué pasa!?
-K-Kikenna… ¿D-Dónde… está…? –Hikari se sujetaba el estómago y se esforzaba por respirar correctamente.
-¿K-Kikenna? B-Bueno… v-verás… Ella sintió energías extrañas hace unos instantes en este cuarto… Entonces… D-Desapareció…
-¿¡Desapareció!? ¿¡Cómo!? –Hikari miró por todos lados de la habitación y encontró un punto que desprendía las mismas energías que… que el vestido de Kaiga después de colocar su firma en su autorretrato, se acercó a él y… entonces de la nada aparecieron flamas ahí.
-¿¡EH!?
-Cálmate Kotori… veamos… analicemos esto… ¿Por qué ardió de la nada…? Diablos… los dibujos de Kaiga alteran la realidad… entonces… ¿¡Si se altera el cuadro!? Demonios… alguien debió quemar el cuadro de este cuarto… ¿Por qué…? Además desapareció Kikenna… Oh no…
-Hikari… no te entiendo nada… -Kotori se había esforzado lo más que pudo en entenderlo.
-Ji, ji, ji, Oh, mi niña… mi dulce, dulce niña… Cómo pasa el tiempo, ¿Verdad? –Kikenna abrió los ojos con inmenso terror en sus ojos.
-Y-Yami…
-Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ¡Mi niña! ¡Esto será muy divertido! –Se escucharon unos ruidos raros… los segundos pasaron, Yami salió de aquel lugar donde estaba con Kikenna… el baño de aquella galería…
-Oh… ¿A dónde habrá ido Hikari…? –Kaiga caminaba por la galería buscando a Hikari, entonces… Yami sonrió y se acercó a ella.
-Cariño.
-¿Eh? ¡Oh! Es Usted… ¿Qué tal le fue con su sobrinito? –Yami sonrió y la abrazó… de forma incomoda, al menos para Kaiga.
-Déjame contarte… lindura.
Hikari volaba a toda la velocidad que podía, usar el tele-transporte a una distancia tan larga había sido mortal… luchaba contra su cuerpo, todo se le nublaba… parecía que se desmayaría en cualquier instante, pero… no importaba…
-"K-Kikenna…. K-Kaiga….A-Aguanten… V-Vivan….." –La velocidad a la que iba era impresionante, Kotori había empezado a movilizarse, llamando a todas las espíritus y tratando de enviarlas a la ubicación de Kaiga… lamentablemente… "Algo" había destruido ese sector del Fraxinus… y dejó una sonrisa rasgada en la pared….
Hikari llegó, causando un sonido similar a un trueno, su cuerpo estaba desfalleciendo, estaba en sus límites, la galería y sus inmediaciones estaban totalmente desiertas, Hikari entró a la galería, casi muriéndose.
-Oh, oh, querido amigo, finalmente llegaste, me cansaba de esperar, ji, ji, ji, Podemos empezar finalmente… -Yami se paró enfrente de él y lanzó centenares de semillas, que en medio aire comenzaron a crecer y cambiar… volviéndose plantas, Hikari, apenas logró crear una esfera de fuego, pero… antes de impactar esas plantas… estas se desvanecieron en el aire… Yami dio un paso hacia la izquierda…. Y la esfera impactó un cuadro… un cuadro… interesante…
-E-Ese….
-Oh, que violeto Hikari-Senpai… ¿No te diste cuenta? Los cuadros tienen dos funciones, pueden servir de portales… o también de…. Bueno, cárceles…. Donde fácilmente puedes encerrar a personas dentro… o a Espíritus… fu, fu, fu… ahora… si destruyo uno de los cuadros/portales…. Simplemente el portal desaparecerá… pero…. Si destruyo uno de los cuadros/cárceles… con… je, je, je… Personas dentro…. Bueno, compartirán ese destino… -Hikari abrió los ojos sumamente aterrado, miró el cuadro… era el cuadro de un volcán… con Kikenna… Kaiga…. Y el cuadro se combustionó por culpa… de su ataque….
El suelo tembló… la energía oscura rodeó a Hikari… Yami esbozó una enorme y fría sonrisa… y desapareció en risas….
-¿Cuándo despertará mi hermanito, Kotori? –Shidou y Kotori hablaban en un pasillo de una base subterránea de Ratatoskr…
-No lo sabemos Shidou…Liberó una explosión de energía oscura tan atroz y poderosa…. La prensa de ese país lo reportó como un atentado terrorista… aparentemente todo el sector estaba completamente vacío… porque Akarui Yami fue la que reportó la presencia de una bomba ahí…
-¿Ella? ¿Por qué se preocuparía ella por que mueran inocentes…? Cada vez entiendo menos a esa chica…
-Ese Hikari… ¡No vino a nuestra casa! –Soruto caminaba de un lado a otro de su cuarto, Fujiko estaba echada en la cama… pensando lo mismo.
-Me envió un mensaje… de que se le habían complicado las cosas…
-¡Aun así! ¡Debió venir! –Entonces un fuerte golpe ocurrió en la ventana, ambas se asustaron y fueron hacia la misma… la abrieron… pero no vieron nada, la cerraron, se miraron y luego rieron.
-Asustarnos por una ventana… ja, ja, ja… -Entonces las luces se apagaron… sonaron ruidos y cuando las luces se prendieron nuevamente… el cuarto estaba vacío.