—Dijo que ninguna noticia era más importante que las de su hermana... Por eso le conté acerca de las gemelas antes de mencionar a lo del Joven Maestro Qiao.
—Eres tan tonto... —Lu Yan no dudó un momento más y volteó de inmediato el yate en dirección a la costa.
Lu Yan pudo contactarse con su padre con su padre mientras iba en un vuelo directo a Rusia.
—Papá, ¿sabía que hirieron a Qiao Fei?
—Sí. Su padre me llamó. Dijo que la cirugía iba a ser extremadamente difícil porque le dispararon cinco veces. Las heridas son todas en lugares críticos de su cuerpo por lo que será complicado sacar las balas... Me preguntó si podía ir a echar un vistazo.
—¿Entonces qué estás esperando? No puedes permitir que ese psicópata de Qiao muera... —a juzgar por su tono de voz, era obvio que estaba movilizada.