—¿Qué crees que sucedió? Lo estás mirando directamente —respondió Su Yu, orgulloso.
—No jodas, pregunté qué hay con esta foto. ¿No había alguien en el medio?
—Lo recorté, pegué la foto y luego lo arreglé con Photoshop.
—Ja ja ja, siempre pensé que eras un genio.
—¿Y ahora?
—Ahora sé que lo eres. Habrás sido un sastre en tu vida anterior, ¿cómo se te ocurrió esto?
—Solo yo soy capaz de pensar en algo así—dijo Su Yu con orgullo.
—¿Es realmente bueno para ti soñar así? No es mejor que lo real, deberías esforzarte más y algún día acostarte con la de verdad.
—Vamos, vamos, eso es demasiado sucio. No puedo hablar contigo. Ve a dormir.
—Guau, estás pretendiendo ser inocente conmigo. Sí que eres como un cachorro ahora.
Su Yu parecía haber encontrado a su primer amor. Aunque sus sentimientos por Huo Mian no fuesen reciprocados, siempre actuaba de manera misteriosa. Wei Liao no sabía qué decir.