"Hime, voy a visitar al Hokage, volveré un par de minutos". Naruto llego a la habitación de Kiba y con una sonrisa en su rostro le dijo a Hinata con voz suave.
Hinata y el grupo dejaron de hablar cuando vieron a Naruto abrir la puerta. Aunque Naruto tiene una sonrisa inocente en su labio, sus ojos eran tan frío como hielo que hizo que los presentes se asustaran un poco.
Hinata levanto su mirada y miro lo sonrisa de su enamorado, sintió un poco de tristeza en su corazón en pensar que este joven de cabello rubio no era el Naruto que conocía. Miro a su alrededor y se dio cuenta el miedo de su amigos contra Naruto.
Naruto miro la cara triste de Hinata y sabía más o menos lo que estaban hablando estos niños.
"Vuelve pronto". Dijo Hinata sin mirar a Naruto.
Naruto quedo en silencio por un momento y asiente con la cabeza.
"Bien, guíame hacia el Hokage". Ordeno Naruto sin emoción los dos Anbu detrás de él.
Los Anbu asienten con la cabeza y comienzan a caminar. Naruto solo suspiro y cerró la puerta si no antes de mirar a Hinata.
Al salir del hospital, Naruto no se apresuro sino camino con tranquilidad a la Torre del Kage que estaba a cincos minutos a pies desde el hospital.
"Entonces… ¿Eres de la rama principal o la secundaria?". Pregunto Naruto mientras caminaban hacia la torre del Kage.
El Anbu que tiene la máscara del Tigre respondió: "De la rama principal".
"Ehh… ¿Me odias por liberar a la segunda Rama de tu clan?". Naruto sabía que los miembros principales del Clan Hyuga le odian a muerte a excepción de algunos miembros más liberales.
El Anbu no miró a Naruto y siguió caminado hacia la torre pero su voz ronca se escuchó: "¿Qué pasaría si no hubiéramos negado?".
La pregunta de Anbu sorprendió un poco a Naruto y una sonrisa se dibujo en sus labios: "¿Qué piensa que pasaría?"
Un silencio muerto lleno el lugar, el otro Anbu sudaba debajo de la máscara mirando a su compañero y el niño que puso patas arriba la aldea ayer.
"Nos mataría, ¿verdad?". Respondió el Anbu sin mirar a Naruto mientras apretaba sus puños con fuerza.
Naruto sonrió un poco y dijo con felicidad: "Si, tienes razón. Mataría a todas la rama principal a excepción de los niños y las herederas del Clan. Soy una persona amante de la paz y la libertad que no busca la destrucción de mi gente, me sentir un poco aliviado que el líder y los ancianos no alzaron sus armas contra mí".
Naruto dejo de caminar y miró la montaña de los Hokage: "Pero si el día de mañana la rama principal y la aldea alzara su martillo de guerra contra mi o chantajearme con la vida de Hinata, esta pequeña aldea no volverá ver el amanecer de este mundo".
Una gran presión cayó sobre los dos Anbu, Los Anbus respiraban con dificultar y miraron los ojos fría de Naruto, él nos observó, con sus aterradores ojos, era como si un gato estuviera observando a un ratón lamentable a punto de morir.
Naruto suspiro un poco y miró la torre de los Hokage que estaba a unos metros en donde estaban ellos. Naruto se pegunto quien diseño este edificio horrible, lo que vio fue una estructura de 3 pisos de forma semi-cónicas de color rojo, algo horrible a la vista. Incluso pensó que las infraestructuras de las tierras barbarás eran mejores que esta torre.
"Que mal gusto". Susurro Naruto con el ceño fruncido.
Los Anbu dejaron de sentir la presión sobre sus hombros y escucharon los susurros de Naruto, se sintieron infelices al escuchar el insulto de Naruto pero no podía hacer nada.
"Entremos, el Hokage te está esperando". Ordenó el Anbu con la máscara de Halcón.
Naruto solo asiente con la cabeza en silencio y camina a la torre.
Al entrar al edificio Naruto vio una secretaria en la recepción y detrás de ellas unas decenas de habitaciones cerradas. No había decoraciones, muebles u otra cosa para decolar el primer piso.
La mujer e cabello negro vio a las tres personas y sus ojos castaños se posaron al niño de cabello rubio con ojos azules frio.
"Entonces fue él". Pensó la mujer con sorpresa miró a los dos Anbu y dijo: "El Hokage se encuentra en la sala del concejo esperándolo".
"¿Sala del Consejo?". Naruto pregunto con una ceja levantada y una frialdad salió de sus ojos azules.
La mujer y los Anbu miraron a Naruto, es como si estuviera diciendo, porque demonio debo presentarme delante de personas sin importancia e insignificantes.
La mujer trago un poco y dijo con voz asustada: "Son ordenes del Hokage, Por favor suban al segundo piso".
Naruto miró a esta tía asustada y sonrió con amargura. "Espero que no seas una pérdida de tiempo, estaba muy feliz estando con Hinata".
Los Anbu asienten con la cabeza y le indica a Naruto que los siga hacia la sala del concejo.
La mujer suspiro un poco viendo como el joven desaparecer de su vista, miro su mano y se dio cuenta que estaba temblando de miedo.
"Una sola mirada fue más que suficiente para asustarme". Sonrió con amargura la mujer.
Al llegar al segundo piso las tres personas se detuvieron en una enorme puerta de madera con la insignia del país del fuego en ella.
"Hokage-sama, el joven Naruto está presente". Grito uno de los Anbu.
"Gracias, se pueden retirar". Vino la voz de un viejo al otro lado de la puerta.
"Hai". Los Anbu se inclinaron ligeramente y desaparecieron con un estallido de humo.
La puerta se abrió mostrando una habitación casi iluminada.
"Naruto, puedes pasar". Ordenó la voz.
Naruto frunció el ceño y entro a la habitación casi oscura, solo vio una enorme mesa con varias personas sentadas. A Naruto le vino a la cabeza que esta habitación se parecía a las habitaciones de la Tokko donde se hacen las interrogaciones a los criminales de alto nivel.
La mirada de Naruto se posó hacia el viejo con la túnica de Hokage que lo estaba mirando sin emoción en su rostro.
"Bien, señor Sarutobi, ¿Para que me llamo?". Preguntó Naruto sin mirar a nadie más.
El viejo Kage suspiró y miró a Naruto un poco triste: "Es sobre las demandas que hiciste ayer".
EL Kage tiro una placa de madera hacia Naruto.
Naruto detuvo la placa y la miró, solo era un pedazo de Madera con el símbolo de la hoja en ella.
"¿Esto es?". Naruto levantó una ceja.
"Con eso puede entrar a la habitación en donde se guardan nuestro documentos clasificado. Hay una base Anbu en la montaña Kage, si muestra eso ellos te llevaran a la bodega en donde se encuentra los documentos secretas de la aldea". Dijo el viejo mirando a Naruto con ojos aburridos.
"Oh". Naruto asiente con la cabeza y guarda la placa en uno de sus bolsillos.
"Por favor, sé que no me llamaron solo para entrégame un pedazo de madera. Hoy estoy de humor, pregunta lo que quieras, sé muy bien que mi pequeña charla que tuve con el clan Hyuga llegaron a sus oídos". Naruto mira de reojo al líder del Clan Hyuga y sonrió un poco.
"¿Este no es Naruto, porque paso esto?". Pensó el viejo Kage mirando el niño de cabello rubio y ajos azules. Hiruzen recordó el informe que le dio el líder del Clan Hyuga sobre este nuevo Naruto y su mundo. No puede tratar a este joven como un niño sino a un hombre nacido para gobernar todo sobre los cielos.
"Por lo que escuche, en tu mundo hubo una guerra en donde moriste. Nos puede decir, ¿Por qué sucedió el conflicto?". Hiruzen pregunto sin miedo.
Naruto dejo de sonreír y miró a todos los presentes, solo había poco más de una docenas de líderes de Clanes Shinobi y algunos civiles de alto rango de la aldea en la sala. No vio a los Uzumaki, Uchiha, Senju, Kuza, Fujitora y entre otros que existía en su mundo.
"La Guerra civil lo comenzó mi padre Minato y mi hermano menor Daisuke con la ayuda de los Clanes shinobi y las otras aldea ninja, con la excusa de mantener las tradiciones shinobi y la unificación del continente elemental. Tales actos, violan las leyes y la paz del continente que ha perdurado más de 300 años".
Naruto miro al viejo con ojos fríos: "La guerra con los pueblos shinobi no sería un problema para los gobiernos de Su Majestad y del ejércitos imperiales así como el Clan Namikaze y sus aliados. Pero, las potencias extranjeras no lo tomaron con buenos ojos".
"¿Por qué?". Preguntó el líder del Clan Nara un poco curioso.
Naruto sonrió un poco y señaló su estómago: "En mi mundo las bestia con colas son consideradas bestias sagradas y protegidas por las leyes internacionales. Y algunas personas como mis padres querían su poder para su propio beneficio provocando la ira de las potencias extranjeras. Cabe decir que el precio que pago el continente fue muy alto para detener una intervención hacia mi continente".
"¿Cuál fue ese precio?". Preguntó un anciano que tiene vendado un ojo y un brazo.
"Algunas razas desean las tierras del continentes elemental, no solo mis tierras si no también la posición geográfica que posee esta misma que está en la mitad del mundo, Crees que esas potencia dejaran perder esta oportunidad para invadirnos para proteger sus intereses. Crees que un grupo de shinobi que solo lanza algunos Ninjutsu puede amenazar el poder de los Namikaze y los ejércitos imperiales del continentes".
"Fácilmente mi clan y el ejército puede aniquilar la alianza shinobi en un par de días. Pero el idiota de mi padre secuestró y asesinó a los 8 jinchuriki repartido por todo el mundo y para evitar una guerra mucho más grandes, las potencias pidieron mi vida a cambio de no invadir el continente". Naruto tuvo que mover muchos hilos para evitar la intervención extrajera, algo como el asesinato de los jinchuriki era imperdonable y siendo el protector del continente tuvo que tomar la responsabilidad y dar su vida a cambio para que el continente elemental estuviera a salvo.
Naruto no tuvo problema de hablar de esto, la información que dijo solo lo sabia un par de decenas de personas, desde los Emperadores de los cincos países, los altos mando del estado mayor hasta la Nueva Canciller y la heredera del Clan Namikaze que es su hija. La alianza Shinobi no tenía ni idea del desastre que desataron en los bajos fondo del mundo y ese fue el precio que tuve que pagar para evitar una Coalición mundial contra su continente.
"Entonces, ¿Tu muerte solo fue un faro, para salvar a tu gente?", Preguntó Hiruzen.
"Si, salvar la vida del continente es mi trabajo y si no lo hiciera rompería uno de los pilares del Clan Namikaze y no tendría la cara para enfrentarme a mis antepasados". Dijo Naruto con un tono de burla. "Ya que cumplir mi promesa el único problema que nos quedan seria los rebeldes, en un par de días después de mi muerte, la alianza y las aldeas shinobi ya no existirá en mi mundo".
"¿Cómo está seguro de eso?". Pregunto Hiashi con el ceño fruncido.
Naruto sonrió fríamente: "Crees que un par de Shinobi con algo de poder puedan vencer a los Namikaze, están completamente equivocados. Los Namikaze son los más fuerte del continente y en nuestras espaldas tenemos al ejércitos imperial, Clanes, los civiles, la tecnología y mucho dinero como apoyo. Las aldeas Shinobi solo son sapos en el poso que desean tomar el cielo con las manos sin medir la consecuencia de su actos".
"Ya saben porque odio los Shinobi y la causa de mi muerte. En caso que empiecen a molestarme a mí o a Hinata, no tendré piedad de desenvainar mi espada y matare a todos los idiotas que interponga en mi camino". Naruto sonrió un poco y un aire frío lleno la oscura habitación.
"Si eso es todo, ahora me retiro". Sin esperar respuesta Naruto sale de la habitación en silencio.
Un silencio mortal impregnó la sala, los líderes del consejo miraron la espalda recta de Naruto cuando salía de la habitación.
"Parece que el Naruto que conocemos ya no estar con nosotros, ahora debemos tomar varias medidas para que este Naruto no se vaya de la aldea. ¿Algunas sugerencias?". Los Ojos del viejo Kage miraron al líder del Clan Hyuga.
"Debemos arrestarlo de inmediato". Dijo el anciano vendando.
"Y comprometer a los Civiles, el niño no es idiota, usará a los civiles como escudo en caso en una batalla dentro de la aldea". Reprocho una mujer del aspecto salvaje.
"Además, parece que tiene algunas cartas ocultas en caso si lo enfrentamos. No conocemos muchos de sus habilidades". Dijo un hombre con anteojos negros.
"Casi mata una funcionaria y un Gennin, esto violan las leyes de la aldea". Una mujer mayor habló en voz alta.
"Debemos recordar que el niño es el Jinchuriki del Kyubi, la bestia más poderosa que existe y según sus palabras esas bestias son considerados sagradas en su mundo". El Nara inclinó su silla y miro el techo.
"¿Qué quieres decir, Shikaku?". Pregunto el Kage a su comandante.
"Estoy seguro que ese Naruto hablara con la bestia en su interior y liberarla al mundo exterior". Dijo Shikaku con un suspiro.
Un silencio muerto llenó la habitación, sabían en su mente que muy probable eso sucedería y no quería imaginar el desastre que sería eso.
Notas: Gracias por leer este capítulo, por favor dejen sus comentarios y críticas para mejorar. Hasta la próxima.
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