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95.82% Re: zero arco 3, 4, 5. / Chapter 482: Ciudad en Guerra.

章節 482: Ciudad en Guerra.

_Subaru: —¡¡Comprueba si su corazón está latiendo!! 

La intuición fue el impulso que había despertado la consciencia de Subaru.

Él no estaba absolutamente convencido, ni tenía una base para pensar así. Lo único que podía pensar era que ese pensamiento tenía algún significado.

Los Arzobispos del Pecado, los nombres de las estrellas, el país de Kararagi que tenía influencias de su mundo original y aquellas personas —aparte de Subaru— que también fueron convocadas aquí.

Había marcas de eso en el mundo. Si el Culto de la Bruja también tenía una marca de eso, entonces no se debería ignorar los nombres de las estrellas y sus correspondientes mitos en los que había pensado Subaru.

Si el poder de Regulus Corneas no podía ser tratado como una simple "Invencibilidad", entonces Subaru tendría que pensar más allá de lo ordinario; y así surgió una idea en su mente.

Y por eso, Subaru rezó para que no tuviera razón.

Y al momento siguiente,

_Subaru: …

Una nociva sensación de opresión llegó, provocando que a Subaru le pareciera que el sol había desaparecido de repente.

El aire estaba lleno de contaminación. Se le hacía difícil encontrar palabras con las que expresar esta incomodidad, este asco.

El asco de la descamación de una costra, la incomodidad de un hedor exhalado directamente a la cara, la aversión de una lengua pegajosa sobre la piel desnuda.

El origen de este aire turbio, era el villano de cabello blanco que había girado la cabeza para mirar hacia atrás.

En el instante en que sus miradas se cruzaron, el cuerpo de Subaru comenzó a temblar involuntariamente.

Como una maldición, esos ojos sin expresión y vacíos se clavaron profundamente en su alma. Incluso sus pulmones y su corazón estaban congelados por el terror, como si hubieran sido perforados por una aguja oxidada.

Sin embargo, mientras Subaru se encontraba inmóvil y abrumado por tales sentimientos—

_Reinhard: No mires a ningún sitio innecesario. ¡Tu oponente soy yo! 

Girar para mirar a Subaru significaba darle la espalda al Santo de la Espada.

Levantando sus manos, Reinhard sujetaba lo que sólo podía describirse como una señal de tránsito convertida en metal retorcido. Tales materiales ahora sólo estaban destinados a ser desechos; pero, en las manos de Reinhard, no eran inferiores a un filo valioso.

Un largo filo moviéndose en el aire golpeó la parte posterior del traje de Regulus.

La onda de choque explosiva se expandió en el aire, dejando a su paso un triste sonido de la atmósfera asaltada, levantando vórtices en los grandes canales donde flotaban finos pedazos de hielo.

Esa fue la consecuencia del golpe de ese filo de metal retorcido. No habría sido una sorpresa si el villano hubiera quedado destrozado.

Sin embargo, tal desenlace aún estaba fuera de sus posibilidades.

_Regulus: No me malinterpretes, Santo de la Espada. Te he estado entreteniendo porque mi corazón es servicial y considerado. Sin embargo, incluso mi amable ser tiene límites. 

_Reinhard: …

Regulus palmeó ligeramente el lugar donde había sido golpeado por el filo y ladeó la cabeza.

Reinhard, alertado por este movimiento, tiró a un lado el metal retorcido que tenía en sus manos y se dispuso a saltar hacia atrás en un ángulo abierto— pero entonces, sus pies se quedaron rígidos en su lugar.

La intuición sobrehumana de Reinhard le informaba de amenazas graves e inminentes y también le ofrecía una detección preventiva de los ataques que se avecinaban. Su agudo instinto le dijo que no debía esquivar hacia atrás. Inmediatamente se enderezó y comenzó a buscar rutas alternativas.

_Regulus: El aire de allí… ya ha sido tocado por mí.

Debido a la agudización de sus sentidos que le impedían moverse de ese lugar, Reinhard se había quedado sin preparación en ese momento.

Su oponente lo tenía atrapado en una invisible pero presente envoltura. El juicio de Reinhard le dijo que se deslizara por la fuerza hacia donde se encontraba Regulus; pero, para ello, se vería obligado a hacer un ataque defensivo.

_Reinhard: ¡Haa! 

El golpe que dio tenía suficiente fuerza para atravesar piedra maciza.

La empuñadura de la Espada del Dragón golpeó el pecho de Regulus, pero el villano la atrapó fácilmente.

_Regulus: Es un esfuerzo inútil, pero gracias por molestarte. Sólo reza para que no resultes muy herido. 

_Reinhard: Como dijo Subaru, tu corazón no parece latir.

_Regulus: ¡——!

La sonrisa relajada de Regulus se endureció, mientras miraba su pecho.

La empuñadura que estaba clavada en su pecho; y Reinhard, quien estaba forzando sus agudos sentidos, captaría cualquier señal de vida, sin importar lo sutil que fuera.

Habiendo recibido ese golpe, Regulus saltó en el aire, agitado.

Hubo un golpe directo que recordaba a una escena anterior: cuando Reinhard bloqueó la patada con la funda de la Espada del Dragón y su cuerpo salió volando debido al impacto.

Sin embargo, lo que ocurrió a continuación fue diferente.

_Subaru: ¡Reinhard!

Como se había mencionado antes, el aire detrás de Reinhard estaba lleno de innumerables trampas de aliento puestas por Regulus.

Siendo lanzado contra ellas en su estado de indefensión, los resultados no fueron difíciles de imaginar.

Todo el cuerpo de Reinhard estaba desgarrado, sus ropas blancas estaban manchadas de sangre. Era difícil saber cuánto podría mitigar sus heridas. Al ser enterrado en escombros de nuevo, Reinhard amplificó el colapso de la ciudad, haciendo imposible estimar su estado.

Pero lo que se podía determinar con certeza era la respuesta de Reinhard.

_Subaru: ¡Buen trabajo, Reinhard!

_Emilia: ¡Subaru!

_Subaru: ¡Está bien! ¡Reinhard probablemente está bien! ¡Así que preocúpate por él más tarde!

_Emilia: ¡Eso ya lo sé! Yo… ¿qué necesitas que haga?

Subaru pensó que Emilia ante todo estaría preocupada por el bienestar de Reinhard, pero su respuesta le sorprendió. La Emilia que veía a Subaru estaba atenta y comprendía perfectamente dónde tenía que estar en este campo de batalla.

Había una gran confianza en Reinhard y tal vez una confianza en Subaru.

_Emilia: Reinhard también pasó por todo eso porque confía en ti. Te has dado cuenta de algo de Regulus, ¿verdad? Dime. 

Gran confianza. Grandes expectativas. La realidad de esa creencia era demasiado dura, lo suficiente para despertar el espíritu de lucha de Subaru.

Sin duda, también tendría que dar a Reinhard la gratitud adecuada.

Definitivamente, recuperaría sus huesos más tarde.

_Regulus: Ustedes dos, siempre murmurando; pero, ¿no sería más fácil actuar con sencillez en su desesperación? Su despreciable y malvado comportamiento me ha enfurecido, por lo que deben ser castigados, ¿no es así? ¿Sí? ¿Acaso me equivoco? La mala educación, la infidelidad, no importa cuál, son actos rebeldes dignos de diez mil ejecuciones.

Después de haber mandado a volar a Reinhard con su patada, Regulus se rio.

Al otro lado del canal de agua, la presión que desprendía el villano comenzó a crecer y, en verdad, Subaru casi no podía soportar enfrentarse a él.

Sin embargo, huir ahora mismo no era una opción.

Natsuki Subaru sería incapaz de compensarles por eso a Emilia y Reinhard van Astrea.

_Subaru: Ella es una heroína pura, de las que ya no existen en este siglo. Sospechar que ella es infiel te convierte a ti en la puta, idiota. 

_Regulus: ¿¿Eh??

_Subaru: ¿No es grosero enumerar todas las razones por las que deberíamos tener miedo ahora? Intenta, aunque sea un poco, redirigir esa mente vacía tuya.

Al oír la repentina fuerza de su discurso, Regulus abrió los ojos.

Subaru se golpeó la cabeza con los dedos, como si estuviera presumiendo.

_Subaru: No sé cuánto de una vida encantadora y tranquila has tenido hasta ahora, ni quiero saberlo. Pero, ¿te has dado cuenta ya? Ahora estás en jaque, ¿sabes?

_Regulus: ¿En jaque? Eres tan vago que no puedo ni reírme. ¿Qué estás tratando de decir? No, espera,también está la posibilidad de que seas incapaz de explicarte en un lenguaje comprensible. Bueno, no hay necesidad de forzarte a decir cosas irrelevantes, ¿no es así?

_Subaru: Eh, no digas eso; después de todo, tienes derecho a escuchar, es tu derecho favorito.

_Regulus: ¿Mi derecho?

Regulus frunció el ceño, y Subaru, con una ligera y ridícula sonrisa, continuó:

_Subaru: Sí, después de todo… Perder sin saber cómo fue que perdiste sin duda te dejaría con arrepentimiento.

_Regulus: ¡—Suficiente de ti! ¡¡Desaparece!!

El encogimiento de hombros de Subaru se convirtió en una chispa que enfureció a Regulus, quien saltó desde el borde del canal. Al no tener suficiente fuerza de salto, su cuerpo se sumergió en el agua; sin embargo, sus movimientos no se vieron afectados por eso, se encontró sin resistencia ni nada.

Inmediatamente después de confirmar que había entrado al agua, Subaru le dio una palmadita en los hombros a Emilia.

_Subaru: ¡Emilia, ahora!

_Emilia: ¡Ul Hyuma! 

Al recibir la instrucción de Subaru, Emilia reunió magia para liberar varios carámbanos.

Tan enormes que había que mirar hacia arriba para verlas en su totalidad, las lanzas de hielo fueron lanzadas directamente hacía Regulus, formando una jaula de hielo que lo rodeaba mientras salía a la superficie.

_Regulus: ¡En realidad pensé que intentarían algo, pero no importa lo que hagan, es inútil, parece que no importa cuántas veces les enseñen, nunca aprenderán! ¡¿Qué?! ¡¿Acaso piensan seguir con sus errores?! ¡Sin siquiera un mínimo grado de sabiduría, repitiendo lo mismo una y otra vez! ¡¿Siempre tratan a los demás con tanta inutilidad mientras los desprecian?! ¡No se dejen llevar, qué incompletos! 

Regulus enseñó los dientes, cortó la fila de estacas de hielo, con una fuerza abrumadora, la hizo añicos. La barrera se derrumbó con facilidad y a pesar de sus mejores esfuerzos, la magia de Emilia no pudo sostener la jaula de hielo.

Pero fue suficiente. Eso estuvo bien.

_Emilia: No… Como me temía, ni siquiera pude ganar tiempo.

_Subaru: Eso no es verdad, Emilia-tan.

Al ver la ineficacia de su poder, Emilia puso una expresión sombría, pero Subaru negó con la cabeza.

Había que mirarlo desde otra perspectiva. Esto había sido suficiente para lograr el propósito de Subaru.

_Subaru: El carácter de ese hombre es insidioso. Él no puede evitar aplastar lo que desprecia. Incluso si no es necesario destruir cualquier obstáculo al que se enfrente, no puede sentir que ha ganado sin destruirlo completamente.

Regulus, quien afirmaba ser completo y hablaba de estar satisfecho.

La naturaleza lamentable de su corazón, la escasez de su tolerancia y el volumen de su vanidad eran evidentes.

_Subaru: En primer lugar, no había necesidad de que él rompiera el obstáculo. Pero tomó esa acción excesiva. Incluso un segundo, incluso un milisegundo, es el resultado.

_Emilia: Con ese segundo, ¿puedes derrotar a Regulus?

_Subaru: Mientras los acumule, definitivamente le haré morder el polvo. Le arrancaré la piel de su cuerpo a ese monstruo. 

Para ello, Reinhard había puesto los cimientos.

Comprobando el latido del corazón de Regulus y transmitiéndole a Subaru que no tenía pulso.

No había calor, ni latidos del corazón, ni respiración, ni ninguna influencia externa de su entorno.


創作者的想法
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Ya te llega la hora Regulus!!!

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章節 483: Ciudad en Guerra. Parte 2

No había calor, ni latidos del corazón, ni respiración, ni ninguna influencia externa de su entorno.

Aunque esto era indudablemente una "invencibilidad", su esencia no era invencible.

_Subaru: ¡Emilia, por aquí!

Subaru tomó la muñeca de Emilia y cruzó con ella los callejones destruidos. Ella mantuvo el ritmo de Subaru y luego se giró hacia atrás para atacar a Regulus con un carámbano.

Regulus, al verlos huir, se enojó cada vez más y los persiguió furiosamente.

_Regulus: ¡Incluso después de toda esa fanfarronería, ¿por qué diablos estás corriendo?! Llamar a alguien estúpido, proclamando que lo matarás… ¡¿Cuánto planeas burlarte de mí?! ¡¿Quién demonios te crees que eres?! ¡Cobarde! 

Dado que sus habilidades físicas no eran superiores, la velocidad a la que Regulus los perseguía era poco diferente a la de los fugitivos. Más bien, podría decirse que era más lento que Subaru.

Sin embargo, como fue bendecido con su implacable composición, el incesante perseguidor los alcanzaría tarde o temprano.

_Emilia: ¡Subaru! ¡¿A dónde corremos?!

_Subaru: ¡Nuestro destino es la catedral! ¡Nuestro objetivo son… las esposas de Regulus! Dentro de— 

Al oír la pregunta de Emilia, él respondió.

De repente, a la mitad de sus palabras, se dio cuenta que detrás—

_Regulus: — ¡Tú, deja de prestarle atención a cosas superfluas! 

_Subaru: ¡¿Uwaaaaa?! 

Al girar la cabeza, Regulus ya había aparecido frente a él, quien se preguntaba cómo había desaparecido sin dejar rastro la distancia que había existido hasta ahora entre ellos.

Forzando su distancia a tan sólo un solo paso, Regulus movió su mano hacia ellos, Subaru apenas apartó su cabeza del camino. Él sintió que su oponente ya le pisaba los talones, así que tomó a Emilia en sus brazos, se acercó a una pared cercana pisándola y avanzando en un solo movimiento.

_Emilia: Wa, wa, wa; eres increíble, Subaru.

_Subaru: ¡Emilia-tan, agárrate fuerte a mí! 

Emilia, aturdida por las acrobacias de Subaru, le abrazó el cuello y envolvió sus piernas alrededor de la cintura de él, ubicándose en su espalda. Suave y fragante, Subaru se motivó. Pateando con fuerza el borde, avanzaban sobre las paredes medio destrozadas.

Su práctica en el parkour dio resultados. Ganando distancia de esta manera:

_Regulus: Ya he dicho que los esfuerzos de ustedes plebeyos son inútiles.

Diciendo eso, Regulus tocó la parte inferior de la pared que Subaru estaba pisando con la palma de su mano.

Se escuchó el sonido de la roca resquebrajándose la pared de piedra colapsó como si fuera tofu. La pared perdió su apoyo y se derrumbó. A Subaru, que estaba corriendo sobre el muro, obviamente le pasó lo mismo.

_Subaru: ¡Uwah! 

Mientras caía, Subaru sacó su látigo y lo lanzó sin apuntar. La punta se enganchó a algo y él tiró con fuerza de su cuerpo hacia arriba.

Con un movimiento de su pie, dio una fuerte patada en el momento en que tocó la pared. Combinada con la fuerza de la reacción, la fuerza centrífuga generada por el látigo permitió que su cuerpo se moviera cada vez más lejos, logrando una asombrosa escalada con Emilia todavía sobre su espalda.

En una mirada más cercana, los dos se acercaban a un almacén que ya había perdido casi la mitad de su volumen.

Subaru se subió a un balcón que sobresalía del alero y se miró la palma.

_Subaru: ¡Wow, no esperaba lograr un escape por fuerza bruta! 

_Emilia: ¡Subaru! ¡En resumen, ¿sólo tenemos que llegar a la catedral?! ¡¿En qué dirección está?! 

Apartando la mirada de su palma abierta que le dolía débilmente, Subaru siguió la voz de Emilia para ver los alrededores. Afortunadamente, la altura del balcón permitió que, además de Regulus, todo se viera fácilmente.

Por allí, a lo lejos, podía ver la catedral que se derrumbó con el primer ataque de Reinhard. Por algún motivo, ahora se veía muy lejos.

_Subaru: ¡No! ¡Huimos en la dirección opuesta! ¿¡Ahora qué!?

_Emilia: ¿Está por ahí?

_Subaru: Está justo por ahí, ¿qué es lo que—? 

_Emilia: ¡—Entonces viajemos así! 

Al oír la respuesta de Subaru, Emilia aplaudió y se formó un puente desde el balcón.

El misterioso puente blanco-azulado comenzó desde el balcón y se conectaba hasta la catedral a través de los callejones, imitando un gran camino en el aire.

_Regulus: ¡¿Cómo?! 

Mirando hacia el puente de hielo Regulus, que había decidido que los dos caerían, se sorprendió. Subaru se decidió, embarcándose en el intento de Emilia de resolver el problema con fuerza bruta, y pisó los escalones que conducían al puente de hielo.

Sin embargo, el villano interrumpió la fuga de los dos desde abajo.

_Regulus: ¡¡¿Creían que les dejaría escapar?!! 

Regulus pasó por debajo del puente de hielo y arrojó contra él una piedra que recogió. El puente forjado se sacudió con fuerza por un solo golpe, y las grietas corrieron inmediatamente a través.

El puente se derrumbó en varios cristales de luz, aplastado por el terrible colapso. Después de verlo, Regulus se rio brutalmente.

Pero,

_Emilia: ¡Nos da igual que se rompa ese puente, porque usaremos este otro!

_Regulus: ¿Qu—? 

Brillantes fragmentos de hielo se dispersaron por todos lados, mientras Subaru se deslizaba hacia adelante en una estructura de hielo creada por Emilia.

Usando la pendiente del puente como plataforma de lanzamiento, como si de un salto de esquí se tratara, Emilia y Subaru pasaron por encima del canal de agua y la calle de un solo salto, y se dirigieron a la catedral dejando atrás a Regulus.

_Subaru: ¡Emilia-tan, te has vuelto muy ingeniosa!

_Emilia: Tal vez me llevaste por mal camino, Subaru. 

_Subaru: ¡Esa declaración no debe ser utilizada como respuesta a los elogios!

Aunque Regulus tenía un medio de ataque de largo alcance, sólo podía tocar lo que estaba al alcance de sus brazos.

Subaru y Emilia se mantuvieron bien alejados de su silueta delirando de rabia. Mirando cómo se estaban acercando a la catedral, los ojos de Subaru se entrecerraron.

_Emilia: ¿Qué debemos hacer cuando nos encontramos con las mujeres en la catedral? 

_Subaru: No sé si han sido amenazadas o si realmente lo admiran, pero… 

Ante la pregunta de Emilia, Subaru se llevó la mano a la barbilla, deteniéndose a mitad de su frase.

Lo que surgió en su mente fueron las mujeres, conmocionadas por las acciones de Regulus en la catedral. Subaru rezó por que el miedo que había visto entonces fuera genuino.

Pero, si hubiera sido una actuación—

_Subaru: No sólo la mente, sino que incluso sus corazones podrían haber sido robados. —Sus corazones en el sentido literal.

La altura de los carámbanos disminuía al acercarse a la catedral, mientras una ráfaga de viento soplaba contra sus rostros.

Detrás, Regulus estaba persiguiéndolos. Era incierto si Reinhard estaba a salvo. Las posibilidades de victoria eran escasas, pero el problema aun persistía.

¿Todos los demás estaban bien?

Claramente, él no tenía margen para reflexionar sobre estas cuestiones, pero no podía evitar pensar en ellas.

☆☆☆☆

Frente a la torre de control controlada por Glotonería, había comenzado la batalla entre Julius, Ricardo y Alphard.

_Julius: El Clausel. 

Con el poder de los cuasiespíritus de seis colores, un resplandor de color arco iris emanaba de la punta de la espada del caballero.

Lo que se desplegó fue un golpe apuntando directamente a la muerte de su oponente sin contemplaciones.

"Clausel" era una técnica mágica del mismo tipo que "Clarista" que había logrado dañar incluso el cuerpo de Petelgeuse; sin embargo, a diferencia de "Clarista", cuya destructiva luz brillante envuelve a la propia espada, "Clausel" era un ataque de largo alcance.

La impresión de los Arzobispos del Pecado aún era fuerte en la mente de Julius gracias a Petelgeuse.

La sensación que tuvo Julius al luchar contra el chiflado, el Arzobispo del Pecado de la Pereza, un gran pecador y alguien que había generado gran sufrimiento al mundo durante mucho tiempo, era completamente diferente de la situación actual. Es decir, que la lucha contra el enemigo actual era completamente diferente.

Julius Euclius, quien había obtenido el título de El más caballero de los Caballeros, a menudo malinterpretaba a la gente debido a su comportamiento, pero él creía que todas las personas eran, en el fondo, de naturaleza buena.

Él pensaba que había un motivo para todo comportamiento humano, que las fechorías eran debidas al ambiente que los rodeaba en vez de a ellos mismos. Para ser un humanista, era un punto de vista demasiado compasivo.

Por eso, para Julius, el Arzobispo del Pecado llamado Petelgeuse Romanee Conti, y sus autoconscientes marionetas —los Cultistas— eran demasiado abrumadores.

Alguien que no podía entender eso, que no tenía en cuenta el trabajo duro y los esfuerzos de los demás, se convertiría inevitablemente en un enemigo para él.

Para Julius, lo peor que le hizo el Culto de la Bruja fue dañar su caballerosidad.

No había trucos ocultos, ni había cartas de triunfo guardadas para el final.

Desde el principio, Julius no dudó en matar a esos demonios.

Una técnica extraordinaria que manejaba simultáneamente los seis atributos de la magia con la ayuda de seis cuasiespíritus.

No se permitía ni el más mínimo desajuste de poder mágico. Sólo podía lograrse con el vínculo de los cuasiespíritus y gracias a los esfuerzos y el talento del genio usuario de artes espirituales llamado Julius.

Esto no era exactamente lo mismo que lo que Roswaal L. Mathers podía hacer, quien estaba en la cima de la magia. Esto había sido creado por Julius y era exclusivo de Julius.

A primera vista, la magia no daba demasiado miedo, pero el oponente era desintegrado sin siquiera tener la oportunidad de pensar qué lo atacó.

Julius tenía una creencia en su pecho: que debía priorizar el destruir al enemigo en lugar de investigar la incompatibilidad entre ellos.

La luz destructiva extremadamente brillante destrozó el adoquinado y se acercó hacia los brazos de una pequeña silueta.

Largo cabello castaño oscuro, sucios harapos, dagas opacas, todo fue tragado por el brillo de la luz arco iris.

_Roy: Seguramente esto es algo que nii-sama no esperaba, tienes la debilidad de apartar tus ojos de lo que no quieres ver, ¿verdad? 

_Ricardo: ¡¿Qué?! 

La voz murmurante de Alphard sonó mientras descendía hacia el suelo. El blasfemo, con su larga lengua colgando fuera, pateó el suelo con una postura lo suficientemente baja como para casi decir que estaba tumbado sobre el adoquinado.


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