Lucas Donovan no dijo nada, pero le pasó el teléfono a Bella y luego sacó un sobre blanco de su bolsillo y lo colocó sobre la mesa.
—Bella, ya firmé los papeles. Por favor, cuida de tu madre por mí —dijo Lucas mientras se levantaba de su asiento.
—Mi hija, te prometo que no me presentaré ante ti o tu madre en el futuro. Adiós, Bella. Y muchas gracias por permitirme conocer a mi nieto... —Terminó sus palabras y se marchó.
Bella se quedó inmóvil, viendo a su padre desaparecer de su vista. No sabía por qué, pero sintió lágrimas mojando sus mejillas mientras él se desvanecía.
Su corazón dolía al presenciar a su padre llorando por primera vez. Él no expresó ira ni objeciones; simplemente se fue.
—Bella, ¿tu padre realmente se fue? —La voz de Natalie llegó a través del altavoz.
Bella miró la pantalla, dándose cuenta de que la llamada todavía estaba conectada. Después de limpiarse las lágrimas, respondió: