En ese momento, sonó el teléfono de Lin Che. Lo sostuvo y vio un número familiar. Era el número de la criada que cuidaba a la Abuela en el sur. La Abuela aún estaba allá, pero Lin Che estaba tan preocupada de que nadie la cuidara, que había enviado una criada. Las noticias sobre ella también se las iban comunicando cuando estaba libre.
Al ver que era ella, Lin Che contestó el teléfono.
ꟷEs muy tarde. ¿La Abuela necesita algo?
ꟷSeñorita, la señora... la señora está hospitalizada.
ꟷ¿Qué?
Lin Che se quedó atónita. Ella dijo:
ꟷSeñorita, ¿qué cree que debemos hacer? Su cuerpo no puede aguantar por mucho más tiempo. El doctor dijo que podría ser una falla orgánica, así que me temo que no le quedan muchos días.
El corazón de Lin Che se rompió. Inmediatamente le dijo a la criada:
ꟷEncárgate de la situación en el hospital. Me apresuraré a ir allí de inmediato.