—¿Mañana?
—Sí. Rafa se irá al sur mañana en la mañana. Creo que sería la opción ideal.
Cati miró la expresión sombría del Señor, sus cejas ligeramente tensas.
—Pero no pertenezco a las clases que menciona, así que puedo quedarme, ¿no? —preguntó esperanzada.
No quería abandonar la mansión ni Valeria.
El Señor Alejandro caminó a su escritorio para buscar el pergamino del Concejo, que entregó a Cati.
—¿Qué es? —preguntó Cati al recibirlo.
—Los términos que creó el Concejo en cuanto al juicio de la división de las criaturas —explicó.
Cati procedió a leerlo:
Edicto del Concejo No. 352:
Tomando en consideración las actividades recientes que han trastornado a las ambas especies en nuestros territorios, el Concejo decide celebrar un periodo de prueba mediante una división temporal entre las especies, con una duración de un mes.