—¡Thud!
La larga pierna golpeó directamente el hombro de Ren Feifan. Zhu Xiaolin inicialmente pensó que Ren Feifan caería al suelo de cara, pero para su sorpresa, ¡su pierna se detuvo en el aire!
Se sentía como si hubiera golpeado una roca, incapaz de moverse en absoluto.
De repente, Ren Feifan se movió. Atrapó las caderas de Zhu Xiaolin con ambas manos, se giró y la presionó con fuerza contra la pared.
Con la pierna de Zhu Xiaolin aún bien abierta, toda la escena comenzó a parecer un poco ambigua.
Una sonrisa misteriosa apareció en la esquina de la boca de Ren Feifan mientras se movía lentamente hacia los labios de Zhu Xiaolin.
En ese momento, el corazón de Zhu Xiaolin latía descontroladamente, nunca había estado tan cerca de un hombre antes.
—¿Me va a besar?
—¿Cómo se atreve? —¿Pero por qué en el fondo no quiero resistirme?