```
Dora yacía detrás de Neriah, sus manos sobre su pecho. Ella se acurrucó junto a él, repasando los eventos de lo que había sucedido antes entre ellos.
—¿Estás bien?
—Estoy bien —susurró ella.
Él acarició su cabello, —entonces... eh... —se sonrojó un poco—, ¿quieres hacerlo otra vez?
Ella negó con la cabeza, —oh, no, no creo —se rio nerviosamente.
Él asintió y envolvió sus manos alrededor de ella,—está bien entonces —asintió.
Hubo otro momento de silencio.
—Creo... que debería irme —le dijo ella.
—¿Qué? ¿Por qué?
—He pasado mucho tiempo contigo, creo que los demás pueden estar un poco preocupados .
Sus labios se curvaron hacia abajo en decepción, —oh, está bien .
Se desenlazaron y ella lentamente se bajó de la cama para vestirse.
—Ten cuidado, no te lastimes —él también se bajó de la cama y envolvió una mano alrededor de su cintura.
—Déjame ayudarte —dijo él suavemente.
Ella asintió, —de acuerdo .