Al ver que Salvatore se había transformado completamente, Jordan y Dragón se alegraron mucho. La situación de Salvatore de verdad había cambiado drásticamente.
Dragón miró a Salvatore con envidia. En este momento, Dragon de seguro ya no era rival para Salvatore.
Dragón miró a Salvatore, que estaba probando su mano derecha.
—Ojalá Salvatore tuviera una fuerza tan asombrosa en sus manos izquierda y derecha, así como en sus piernas.
Jordan sonrió.
—Si todo su cuerpo pudiera cortar el hierro como el barro, el agua del lago habría sido al menos negra.
Dragón asintió.
—Ojalá tuviera una habilidad mutante. Aunque sea verde...
Jordan miró a Dragón. Sabía que Dragón envidiaba mucho a Salvatore y esperaba ser como él y tener la habilidad de un mutante.
Jordan no pudo evitar hacer una predicción. Vio que el agua del lago que tenía delante volvía a cambiar de color.
—Dragón...