~ SASHA ~
Yhet la llevó de vuelta hacia el Pueblo, sus pisadas crujían sobre las hojas y ramitas congeladas mientras se abrían paso entre los árboles.
—Será más rápido caminar en línea recta. ¿Te sientes cómoda si te guío fuera de los senderos? —preguntó Yhet con cautela.
—Claro. —La verdad era que no se sentía cómoda en ningún lugar de aquí, pero ¿qué otra cosa podía hacer? La ausencia de Zev fue tan repentina que la dejó sin rumbo. Yhet parecía un puerto lo suficientemente grande para la tormenta.
Él la guió a través de los árboles, apartando ramas para permitirle pasar con facilidad y luego soltándolas cuando ella había pasado —y las ramas eran tan grandes que todo el árbol se sacudía al volver a su lugar natural. Sasha sacudió la cabeza.
Yhet no parecía darse cuenta de su asombro ante su fuerza, señalando pequeños pájaros y fauna mientras caminaban, recordándole a Zev de hace tantos años.