Ian quedó en silencio. Sabía que su camino hacia Núcleo Dorado no sería fácil, y más aún, entendía que debía tomar decisiones inteligentes. Avanzar rápido significaba enfrentar una prueba más simple, pero menos preparación. Esperar y fortalecerse significaba una prueba más desafiante, pero con mayor capacidad de resistencia. Sea como sea, el destino le presentaría ese reto, y él debía estar listo cuando llegara.
Tras escuchar la explicación del sistema, Ian reflexionó profundamente. Ahora comprendía con claridad lo que significaba avanzar en los reinos de cultivo. No era simplemente una cuestión de acumular poder y estadísticas; cada paso hacia adelante implicaba un desafío, una prueba ineludible. Pero también comprendió algo más crucial: cuanto más fuertes se volvieran él y sus almas esclavas, más difícil sería la prueba. Sin embargo, el verdadero poder residía en superar esos desafíos.
Entonces, entre más fuerte me vuelva, más duras serán las pruebas murmuró Ian, procesando la idea. Pero una chispa de ambición brilló en sus ojos. Si supero esas pruebas, mis poderes no solo crecerán… se transformarán.
El sistema, siempre atento, confirmó sus pensamientos.
Así es. Las pruebas están diseñadas para llevarte al límite de tus capacidades, y una vez que las superes, tu poder no solo aumentará numéricamente. Sufrirás una transformación completa. Al pasar al Núcleo Dorado, tu energía se condensará y estabilizará, lo que te otorgará un control mucho mayor sobre tu poder y técnicas. Lo mismo ocurre en cada reino superior. Cuanto más difíciles sean las pruebas que enfrentes, mayor será la recompensa en términos de crecimiento y evolución.
Ian visualizó el proceso: los rayos cayendo sobre su cuerpo, la energía siendo absorbida y transformada en algo mucho más potente y refinado. Superar la prueba significaría no solo sobrevivir, sino emerger como una versión mejorada de sí mismo, con habilidades que serían inalcanzables para aquellos que apenas cruzaban el umbral de cada reino.
Es una apuesta murmuró, casi para sí mismo. Cuanto más fuerte te haces antes de la prueba, mayor es el riesgo, pero si lo logras, tu poder crece de manera exponencial.
Exactamente dijo el sistema. Es una cuestión de equilibrio. Puedes avanzar pronto y enfrentar una prueba más manejable, o esperar y entrenar más tiempo para obtener una recompensa mayor, pero a un costo más alto. Decidir cuándo tomar la prueba es una estrategia clave en el cultivo.
Ian se dio cuenta de que, a partir de ese momento, no solo debía enfocarse en mejorar sus estadísticas. Debía estar mentalmente preparado para las pruebas que vendrían, sabiendo que, cuanto más poder ganara, más ardua sería la batalla para avanzar. Pero la perspectiva de una transformación completa, de obtener un poder mucho mayor de lo que jamás había imaginado, era suficiente para impulsar su ambición.
Con esa nueva comprensión, Ian miró a sus esclavos de alma, sabiendo que también debían estar preparados para ese camino. Cada uno de ellos enfrentaría pruebas similares cuando llegara el momento. Y cuando las superaran, juntos se convertirían en una fuerza inigualable, trascendiendo los límites del poder conocido.
Ian sonrió para sí mismo. Había mucho trabajo por hacer, pero la recompensa valdría cada segundo de esfuerzo.
Siguiendo con lo que estaba haciendo, Ian invocó al dragón subterráneo de nivel 4, Al examinar sus estadísticas y habilidades, descubrió su enorme potencial en el nivel 4:
- Fuerza: 10,300
- Agilidad: 6,221
- Constitución: 10,815
- Poder Mágico: 12,550
- Manual de Cultivo: Herencia incompleta de la línea de sangre de dragón
Nivel 4 (Nivel Núcleo Dorado 1/10).
Habilidades principales del dragón subterráneo:
Aliento de Fuego Espectral:Llamas que queman tanto el cuerpo como el alma.
Terremoto Espiritual: Sacude la tierra y desestabiliza la mente.
Nube de Humo Etérea: Niebla que drena la energía vital y ciega a los enemigos.
Espinas de Tierra Espirituales: Columnas de tierra que desgarran carne y espíritu.
Rugido Espiritual de Desmoralización: Induce terror y reduce la moral enemiga.
Escamas de Piedra Espectrales: Defensa casi impenetrable contra ataques físicos y mágicos.
Al terminar de examinar las estadísticas y habilidades del dragón subterráneo, Ian quedó sorprendido. Sabía que este dragón no era un verdadero dragón, sino una especie con una línea de sangre que se remontaba a dragones reales. Sin embargo, lo que no esperaba era que el dragón subterráneo hubiera despertado una herencia de la raza dragón, aunque fuera incompleta.
Intrigado por esta revelación, Ian decidió preguntar al sistema sobre la herencia y su funcionamiento. El sistema respondió con claridad:
Algunas razas muy poderosas y con linajes ancestrales profundos dejan información y potenciales ocultos en su sangre. Estos linajes están diseñados para despertar en generaciones futuras, dándoles la oportunidad de alcanzar el poder de sus ancestros. Sin embargo, este despertar no es fácil. La mayoría de las criaturas con una pequeña parte de sangre de dragón no logran activar esta herencia. Solo aquellos con una conexión significativa y poderosa, como en el caso de este dragón subterráneo, pueden despertar parte de ese potencial.
El sistema continuó:
La herencia de dragón contiene conocimientos y habilidades que se transmiten a través de generaciones. Para que una criatura despierte esta herencia, debe ser extremadamente fuerte y tener una conexión profunda con su linaje ancestral. La activación de esta herencia permite que la criatura acceda a poderes que de otro modo estarían más allá de su alcance.
Ian asimiló esta información con asombro. La idea de que una criatura con solo una pequeña parte de sangre de dragón pudiera despertar habilidades tan formidables era fascinante. Esto no solo subrayaba la rareza y el valor del dragón subterráneo, sino que también revelaba un potencial oculto que podría ser aún más poderoso.
Con esta nueva comprensión, Ian reconoció que el dragón subterráneo era una adquisición invaluable. La herencia de la raza dragón, aunque incompleta, le otorgaba un nivel de poder y capacidad que podría ser decisivo en futuras batallas.
Ian decidió invocar a su último esclavo de alma, el Terror de Nivel 4, que había capturado en la mina. Cuando el espectro apareció, flotaba en el aire con su forma humanoide y envuelto en una densa niebla negra. Este ser etéreo emanaba un aura de maldad y poder oscuro que llenaba el ambiente con un escalofriante sentimiento de inquietud.
Despues de observarlo durante un momento Ian revisó las estadísticas del terror:
- Fuerza: 7571
- Agilidad: 13,521
- Constitución: 8,105
- Poder Mágico:11,895
Manual de Cultivo: De forma natural controla la oscuridad
Nivel 4 (Nivel Núcleo Dorado 1/10).
Terror Mental: Siembra confusión y reduce la moral de los enemigos.
Rayos de Oscuridad: Drena la vitalidad de los enemigos a distancia.
ntangibilidad:Evita ataques físicos y se desplaza rápidamente.
Oscuridad Total:Cubre un área en niebla oscura que drena energía vital y desorienta a los enemigos.