Robert salió del ascensor, dirigiéndose hacia la oficina de Jeffery Clark.
Miró la cámara que apuntaba a la entrada de la oficina, luego escuchó el clic de la puerta al abrirse. Entró en la oficina y saludó a Jeffery.
—Buen día, señor Clark.
Jeffery reconoció a Robert. Hizo un gesto con la mano hacia los dos asientos frente a él, ofreciéndole uno mientras lo observaba atentamente.
—¿Qué sabes de Ava? —preguntó Jeffery tan pronto como el trasero de Robert tocó la silla. Estaba impaciente y quería saber qué había pasado con su hija desaparecida.
Robert rió ligeramente al escuchar la pregunta de Jeffery. Sabía que Jeffery debía estar curioso por saber lo que tenía que informarle acerca de Ava, cuyo nombre había cambiado a Anastasia.
—No hay necesidad de apurarse, señor Clark. ¿No me va a ofrecer algo para beber? —preguntó Robert, con una sonrisa en los labios mientras sostenía su maletín firmemente como si en él guardara un tesoro precioso, lo cual era prácticamente verdad.