Savannah se estremeció al recordar que había visto esa expresión en su rostro antes.
Cuando ella mencionó la muerte de su hermano en su coche, él también perdió la razón, como si no pudiera ver a nadie, ¡y habrían caído del foso si no fuera por ella!
Sin pensarlo, avanzó, extendiendo su mano —Dylan, baja primero. Es peligroso. Él seguía en silencio. Savannah se acercó a él desde atrás, conteniendo la respiración. —Dylan... Frunció el ceño ligeramente, como si estuviera molesto, y no se giró pero se inclinó hacia adelante
Savannah rompió a sudar frío del susto, e instintivamente se acercó a él dos pasos y lo atrapó en sus brazos, tratando con todas sus fuerzas fallidas de arrastrarlo hacia atrás.
Dylan no recuperó el sentido hasta caer al suelo con Savannah, y en ese mismo instante, la protegió fuertemente en sus brazos de golpearse contra el suelo, golpeando fuertemente el suelo con el codo con un grito de dolor. Entonces, cayó desmayado.