Lana estaba abrumada al ver que Torin era la persona con la que se iban a encontrar, así que corrió y lo abrazó con fuerza. Él había sido uno de sus entrenadores y camaradas mientras ella estaba en el ejército, y tenían una muy buena relación.
—¡Ohhhh! ¡Parece una eternidad desde la última vez que nos vimos! —murmuró ella, pero sintió un frío repentino en su espalda y se dio cuenta de que algo no iba bien. Y fue entonces cuando oyeron a Liam toser varias veces, así que Lana soltó a Torin a toda prisa, dándose cuenta de la atmósfera helada en la habitación privada por los celos de alguien.
—Vaya, te ves más hermosa que la última vez que te vi. ¡Ya no eres la esnob que eras antes! —comentó Torin con una burla.
Lana se rió y dijo:
—He mejorado bastante, ¿verdad? Jaja… Mira tú... Escuché que te han ascendido y ahora eres General. ¡Estoy tan orgullosa de ti, General! —Torin le guiñó un ojo, pero luego los dos oyeron otra tos, más fuerte.
*Tos *Tos