下載應用程式
29.82% El asesino legendario reencarna / Chapter 51: Capitulo 51 El último logro de caballero (parte 2)

章節 51: Capitulo 51 El último logro de caballero (parte 2)

—Perspectiva de Sebastián.

Sebastián miró por la ventana de la habitación. Un carruaje blanco, típico de los nobles, se detuvo afuera.

Del carruaje salió un hombre viejo que parecía un comerciante muy adinerado. Luego, salieron tres personas: dos mujeres y un hombre que parecía un caballero. Una de las mujeres, con cabello rubio por las orejas, era una elfa. La otra mujer, con cabello verde, vestía una túnica gris y llevaba un bastón de mago en su espalda; definitivamente era una maga.

Entonces, del carruaje salió un niño. Sebastián abrió bien los ojos; él sabía dónde había visto ese color de cabello.

"Un miembro de la familia real"

Por supuesto, no todos los miembros de la familia real tienen el cabello plateado. También están los miembros con el cabello azul y ojos azul marino, pero Sebastián conocía muy bien esos colores porque incluso los había visto en la ciudad imperial.

"Pero, ¿por qué lleva una máscara?"

Sebastián vio una máscara blanca en el niño. Aunque le cubría el rostro y no podía ver sus ojos, el único que tiene el cabello de ese color es, por supuesto, un miembro de la familia real.

Entonces, Sebastián pensó para sí mismo.

"¿Cuánto oro recibiré si le entrego a los dos, uno de las diez familias y uno de la familia real?"

Sebastián ya podía ver toneladas de dinero frente a sus ojos. Esta es una gran oportunidad para tener una gran riqueza en sus manos. No desaprovecharía la oportunidad; un pez gordo estaba justo frente a él.

Pero algo era extraño.

"¿Por qué un miembro de la familia real está aquí?"

Sebastián sabía que un solo miembro de la familia real era escoltado por cientos de caballeros y un grupo de magos de quinto círculo, pero es extraño; el niño frente a él no está siendo escoltado.

O quizás Sebastián se estaba confundiendo. Tal vez es un niño común que creció con los mismos rasgos faciales que los de la familia real.

"Es mejor comprobarlo"

Entonces, Sebastián miró a Pedro y Vendrik, quienes estaban mirando sus armas. Pedro miraba su gran hacha y Vendrik afilaba su espada, una muy gruesa y larga.

"Ustedes dos, tenemos que investigar algo."

"¿Qué pasa, jefe?"

"Creo que hay alguien de la familia real aquí, pero necesito comprobarlo más de cerca."

"¿Un... miembro de la familia real? ¿Pero no tienen muchos escoltas e incluso un grupo de magos muy fuertes?"

La voz de Vendrik tembló.

"Imbéciles, no haremos nada por el momento. Solo observaremos y comprobaremos."

Aunque Sebastián podía estar seguro de que ese niño de cabello plateado es de la familia real, necesitaba ver el rostro del niño y confirmar los únicos ojos de color rojo sangre que la familia real tiene.

"Vamos," dijo Sebastián, y entonces Pedro y Vendrik lo siguieron, no sin antes hablar.

"Y tú, niña de la familia Merwin, si intentas hacer un ruido, vendré a matarte."

Aunque antes Sebastián había entrado a la posada mostrando a la niña sin siquiera importarle, ahora era diferente porque abajo de donde él estaba es posible que un miembro de la familia real esté ahí y quizás tenga un escolta muy fuerte. Si Emilia hace ruido, sería arriesgado para Sebastián.

Entonces, los tres salieron de la habitación, dejando sola a Emilia con un trapo que rodeaba su boca e impedía hablar. Sus manos estaban atadas mientras estaba sentada en el suelo.

Entonces, el silencio la invadió y empezó a llorar en silencio.

***

—Cambio de escena.

—Perspectiva de Asher Frostblade.

Mirando a Félix, él habló.

"Pasaremos la noche en una posada. Mañana entraremos al bosque y supongo que ustedes deben prepararse."

"Bueno, es verdad. El bosque de este lugar es muy peligroso," dijo Alicia.

"¿Pero en qué posada nos quedaremos?"

"Oh, estamos cerca. Llegaremos en una hora."

Viendo el exterior, me di cuenta de que eran cerca de las dos de la tarde. Aún es muy temprano para el anochecer, pero encontrar un lugar y pasar la noche es relativamente difícil.

Félix parece tener todo el camino planeado, y nosotros, como sus escoltas, solo debemos protegerlo de los monstruos, bandidos, ladrones o incluso asesinos.

Mirando al cielo, el atardecer estaba cerca.

"Hoy es un día muy tranquilo," pensé para mí mismo.

Habían pasado unas cuantas horas desde que el viaje empezó y no nos hemos topado con nada peligroso.

De hecho, no es normal que en el camino no haya nada que nos ponga en peligro; es por eso que es extraño.

"Pareces muy preocupado," dijo Félix.

"No es eso."

"Entonces, ¿por qué estás viendo afuera todo el tiempo?"

"..."

Lo miré y entonces hablé.

"En realidad... me gusta la naturaleza."

"..."

"..."

Todos se quedaron callados, excepto Félix.

"Oh, vaya, eso es muy bueno de tu parte. La naturaleza es una gran belleza en el mundo, después de todo es nuestro hogar."

"Hogar..."

Nunca he tenido un lugar que sea llamado mi hogar, pero creo que Félix tiene razón. Estar en este lugar se siente algo así como estar en casa.

Pero... ¿por qué ellos me miraron así de extraño? Es verdad que me gusta la naturaleza, pero ¿y eso qué tiene de raro?

"Viniendo de ti... es raro que te guste la naturaleza," dijo Encrid.

"¿Y eso qué?"

"Un niño que no siente nada cuando mata, un niño al que pareciera no importarle nada más que unas cuantas personas, es por eso que es raro que te guste la naturaleza. Nunca te he visto disfrutar de la naturaleza."

"..."

Bueno, en eso Encrid tiene razón, pero eso no significa que no me guste la naturaleza. Como a cualquier persona, es normal que me guste la naturaleza, no hay nada raro.

"¿Por qué siento que todos a mi alrededor son idiotas?" pensé por un segundo.

"Ustedes dos... ¿por qué siento que son hermanos?"

"No, eso es imposible," lo dije al instante en que Isabella habló.

De hecho, me sentí extraño con las palabras de Isabella. Es como si realmente Encrid fuera mi hermano; pensamos extrañamente de igual manera y tenemos gustos relativamente parecidos. No es de extrañar que Isabella nos compare como hermanos.

Pero no somos hermanos y no nos conocemos tanto.

Tengo un año de haberme reencarnado en este mundo. Poco a poco me estoy acostumbrando a este mundo y conociendo nuevas cosas.

"Parece que ya llegamos."

"..."

Abrí bien los ojos al instante. Pasó una hora y yo apenas estaba sumergido en mis pensamientos, hablando con Isabella y Encrid dentro de mi cabeza.

"Mierda," entonces un pequeño dolor llegó a mi cabeza.

"¿Estás bien?" dijo Clara.

De hecho, no estaba acostumbrado al dolor en mi cabeza luego de tener una charla con Encrid e Isabella. Después de todo, ellos están en mi cabeza y cada vez que hablan, sus voces resuenan en mi mente.

"Estoy bien."

"..."

Clara me miró.

Le devolví la mirada al instante, y entonces ella habló.

"¿Por qué aún ocultas tu rostro?"

"..."

Para ser sincero, tengo planeado quitarme la máscara cuando estemos cerca de terminar la misión y mostrarles mi rostro a todo el grupo, pero por el momento no lo haré.

"¿Por qué?"

"Bueno..."

"¿Quieres verme? Los demás ya bajaron del carruaje."

"Eh... ¿Estás segura?"

Clara me miró confundida, pero eso quería ella.

Entonces llevé mi mano a mi máscara y lentamente empecé a quitármela. Mi rostro comenzó a verse lentamente hasta llegar a mis cejas.

Los ojos de Clara se abrieron de par en par rápidamente.

"¡Oigan, ustedes dos! ¿No bajarán?"

Entonces me detuve y regresé la máscara al instante. Solo mostré mis cejas, por lo que no se reveló mi rostro.

"Ah sí, ahí vamos," dijo Clara apresuradamente mientras bajaba.

"Supongo que aún no," habló en el momento en que pasó a mi lado.

Miré su espalda y rápidamente bajé, pero en ese instante Encrid e Isabella hablaron.

"Alguien te observa."

"Encrid tiene razón. No mires hacia arriba, pero parece que es un hombre y es bastante fuerte."

Mantuve mi mirada fija en los demás y disimulé caminar normalmente. Pero es verdad, sentía una mirada puesta en mí desde que bajé del carruaje. Quería mirar quién era el idiota que me miraba, pero no lo hice. Entonces, entré a la posada.

Al entrar a la posada, había varias personas sentadas en mesas bebiendo cerveza. El ambiente era normal, no había nada extraño. Miré una mesa vacía y me senté ahí. Clara y Dik me siguieron y se sentaron.

Mirando a mi alrededor, el lugar no era tan grande. Todo era de madera y estaba algo sucio. El olor a alcohol abundaba en el aire. Algunos hombres ya estaban borrachos, mientras que otros no lo estaban y simplemente conversaban entre ellos.

"Parece que son ellos," dijo Encrid.

Rápidamente escaneé todo el lugar y miré unas escaleras. Tres hombres bajaban de ahí. Uno de ellos parecía ser el líder de los tres. Ninguno estaba armado, pero por el aspecto físico eran realmente fuertes.

Entonces crucé miradas con el que parecía ser el líder. Fue cuando una sonrisa se dibujó en el rostro del hombre. Con sus cicatrices por todo el cuerpo y su físico claramente musculoso, unos ojos oscuros y profundos y su cabello azabache, daba una sensación de inquietud para cualquiera que lo mirara.

Desvié la mirada y observé a mi alrededor. Los rostros de todas las personas cambiaron a uno de miedo. Algunos echaron un vistazo al hombre, mientras que otros trataban de no mirarlo.

Obviamente, hay algo con esos tres que no cuadra.

"¿Tú también lo sientes, no?"

"Así es... Esos tres son extraños."

"Mirando sus cuerpos, son fuertes a simple vista."

Clara y Dik se habían dado cuenta.

Entonces Dik habló.

"Definitivamente son fuertes, pero... no tienen armas."

"Las deben de tener en sus habitaciones, quizás."

Clara habló. Entonces miré al grupo de tres que se sentaron justo a dos mesas delante de nosotros tres.

La atmósfera cambió cuando esos tres bajaron por las escaleras. Mirando nuevamente a mi alrededor, escuché el murmullo de dos personas.

"¿Qué crees que le hayan hecho a ella?"

"No lo sé... Pero creo que debe de estar muerta."

Entonces apreté el puño.

Me enojé, pero rápidamente me tranquilicé. No sé exactamente de qué demonios estaban hablando esas dos personas, pero parecía que su charla se dirigía a esos tres hombres.

Algo sobre "ella"... quizás está muerta. ¿A qué se refieren y de qué están hablando?

Mi curiosidad me invadió. Me gustaría preguntarles, pero... parece que esos tres tienen algo que ver con esa tal "ella". No estaba seguro a qué se referían si con "ella" se refieren a una persona, exactamente una mujer, pero ¿quién?

"Algo no está bien," murmuré.

Clara me miró y ella también pensaba lo mismo.

"Tienes razón."

"Todavía no hagamos nada, mejor esperemos a ver si sucede algo."

Clara tenía razón. Quizás esos dos estaban hablando de otra cosa y yo estoy pensando en cosas que no debería. Entonces simplemente me mantuve tranquilo.

Esperé unos minutos hasta que Alicia y Félix llegaron.

"Ya tenemos las habitaciones, pero..." Alicia hizo una pausa.

"¿Pero qué?" Clara habló.

"Tendremos que estar en una sola habitación. Dik y el señor Félix tendrán que estar en la misma habitación. Solo hay dos camas y es la habitación más pequeña."

"..."

Confundido, miré a Alicia y pregunté.

"¿Y yo dónde dormiré?"

"Bueno..." Hizo una pausa y entonces miró a Clara.

Creo saber a dónde está llegando esto. Es una idea muy cliché, pero ya sé adónde iba.

"Bueno, no me importa. Puedo dormir en el suelo," dije.

"..."

Las dos me miraron muy extrañamente, como si pensaran en otra idea.

"Sobre eso... Todas las habitaciones solo tienen dos camas y..." Nuevamente hizo una pausa.

"Sí, sí, quieren estar las dos solas, ¿verdad?"

Nuevamente, las dos se miraron. Entonces Isabella habló.

"Ellas dos quieren saber si compartirás la misma cama con una de ellas."

"..."

Qué demonios.

Aunque sea solamente un niño, eso no significa que tenga que dormir en la misma cama con una mujer. Eso es relativamente extraño; no solo extraño, también se vería raro.

"Eso..." Simplemente no pude hablar.

"Bueno, qué más da... Mmm, mejor decidan ustedes," no pude hablar correctamente.

"Entonces yo..."

Antes de que Clara hablara, el hombre de aspecto musculoso y ojos oscuros profundos se acercó con una sonrisa.

"Escuché su charla. Parece que tienen problema de habitación, ¿no es así?"

"Así es," Alicia, sin saber nada, habló amablemente.

Dik y Clara simplemente miraron en silencio. Yo hice lo mismo.

No se puede confiar en este sujeto.

"Si quieren, él puede quedarse en nuestra habitación. Hay una cama extra."

Eso definitivamente fue sospechoso. ¿Quién demonios comparte habitaciones con desconocidos, especialmente ofreciendo compartir habitación con un grupo de tres que claramente son muy sospechosos en este lugar? Todas las personas aquí parecen tenerles miedo por alguna razón.

Él estaba tramando algo; su sonrisa claramente era falsa.

"Por supuesto..."

"Ya me decidí, puedo estar con Alicia," no tuve otra opción más que compartir la misma cama con Alicia.

Aunque, por supuesto, esto es solamente una distracción porque si Alicia acepta es como estar dentro de los planes de ese sujeto.

Entonces él me miró y me dio una sonrisa. Luego habló.

"Por cierto, no me he presentado. Me llamo Sebastián." El hombre parecía alguien tranquilo, pero esos ojos decían lo contrario...


Load failed, please RETRY

每周推薦票狀態

Rank -- 推薦票 榜單
Stone -- 推薦票

批量訂閱

目錄

顯示選項

背景

EoMt的

大小

章評

寫檢討 閱讀狀態: C51
無法發佈。請再試一次
  • 寫作品質
  • 更新的穩定性
  • 故事發展
  • 人物形象設計
  • 世界背景

總分 0.0

評論發佈成功! 閱讀更多評論
用推薦票投票
Rank NO.-- 推薦票榜
Stone -- 推薦票
舉報不當內容
錯誤提示

舉報暴力內容

段落註釋

登錄