El departamento especial, estrictamente hablando, no es parte de la fuerza policial.
Existen de forma independiente y se encargan solo de casos especiales que amenazan a la humanidad.
Por eso, en Ciudad del Mar, cuando a Chu Cimo se le difamó por asesinato, el cual en realidad fue alguien liberando un virus infeccioso, el capitán Cui, detectando que no era un caso ordinario, decidió tomar la investigación.
Desafortunadamente, la persona que había liberado el veneno ya había huido y no fue capturada.
Los enemigos del departamento especial son una organización sombría acechando en la oscuridad.
Esta organización se ha establecido durante más de cuarenta años y, como está tan bien oculta, la gente ordinaria desconoce su existencia.
Las figuras centrales dentro de la organización son científicos biomédicos reconocidos de varios campos y la misión del departamento especial es identificar y arrestar a aquellos que fabrican toxinas y armas bioquímicas.