—¿Cómo sabía la fruta? —preguntó Max, recostado en su cama en el área del dormitorio.
—Ácida —respondió Asiva desde el otro cuarto.
—¿Alguna noticia de cuándo iremos al Paraíso del Dragón? —preguntó Max.
—Deberían ser 3 semanas hasta que abra —respondió con sequedad Asiva.
Hacía tiempo que los dos habían estado hablando sin rumbo en el dormitorio, era un ambiente ligeramente cálido e incómodo ya que intentaban avanzar la conversación sin saber qué decir.
—Sebastián también estará allí, ¿no? —preguntó Max con curiosidad.
—¿Cómo lo iba a saber? —respondió Asiva con ligera irritación.
Max guardó silencio después de eso, mientras comenzaba a cerrarsele los párpados.
—Te vi mirando a Ferial hoy —dijo Asiva, sonando molesta.
—Mmm, sí —respondió Max medio dormido.
—¿Es ella más bella que yo? —preguntó Asiva nerviosa, esa pregunta era muy importante para ella.
—No —respondió Max con honestidad.