—¿Me estás diciendo que no vas a aceptar mi propuesta de volver conmigo a la fortaleza y casarte conmigo? —Alicia respiró hondo y preguntó.
No le gustaba la sensación de lo que Jack estaba insinuando. Además, por sus palabras, era obvio que todavía poseía el amor que tenía por Celine.
Pero eso era justo lo que ella quería. Quería que ese amor se transfiriera de Celine a ella. Comenzaba a preguntarse si debía eliminar a Celine, para que así, el amor que Jack poseía careciera de objetivo.
Y al final, dado que ella sería la única que se preocuparía por él, entonces, él no tendría más remedio que dirigir ese amor hacia ella.
Jack se levantó y se acercó a Alicia. Su rostro estaba tan cerca del de ella que ella olió su aroma masculino. Sintió cómo su corazón se aceleraba y realmente quería abalanzarse sobre él y besarlo, pero logró contenerse.